¿De nuevo ésta confusión?

1.6K 74 17
                                    

Narra Jane

Sally-¡Lo sé, es tan divertido!

Observaba con confusión los cuerpos débiles y pequeños de esos niños alejarse de todos nosotros mientras tomaban sus manos. Me surgieron dudas pero no pregunté, simplemente los dejé ir.

Mi alma se identificaba con esa distancia recorrida

Mi alma se identificaba con esa distancia recorrida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

De repente, sentí un jalón por parte de Danaé. Iba a reclamar hasta que observé mi alrededor. No había absolutamente nada, ni un respiro. Todo se veía tan lejano, la cuidad, el mínimo rastro de que alguna persona estuviese cerca, todo.

Insane-¡¿Ahora a dónde mierda iremos?!-gritó desesperado.

Danaé-Tendremos que quedarnos aquí

Nina-Qué porquería

Podrías largarte

Jane-Puedes irte cuando quieras-no obtuve respuesta a cambio de cierta satisfacción en mis adentros.

Jeff-¿Por qué todo estará tan solo?-una sonrisa tétrica se asomó-¡Todavía tengo ésta sensación!-se alejó de nosotros rápidamente, hacia una parte oscura-Nina, ¡ven!-ella corrió a su lado.

Quería estrellarlos contra el suelo en cuanto los vi juntos, sería interesante escucharlos gritar por piedad. Mi imaginación era cruel para algunos, para mí, un sueño demasiado hermoso.
Los brazos de Danaé, que me rodeaban, me interrumpieron.

Jane-¿Qué haces?

Danaé-No digas nada

Jane-No te necesito y lo sabes-la empujé bruscamente.

Danaé-Necesitas tanta ayuda que no quieres admitirlo

No entiendes nada, ¿cierto?

Mi respiración y pulso se aceleraron. Por Danaé me había dado cuenta que nadie entendía el verdadero dolor. Estaba sola. Nadie podía experimentar lo mismo, tal vez por eso tenía ansiedad por lastimar, ese deseo de querer destruirlo todo. No sé por qué lo hacía, era una simple necesidad y por más que quería evitarlo, Jeff me había convertido en el ser que más odiaba, uno que ni siquiera se conoce a sí mismo.

Al cabo de unos segundos, mi puño terminó en su rostro. Satisfecha, me retiré sin abrir una vez más la boca. Caminaba buscando ramas para hacer una fogata. Sólo transcurrieron minutos y no pude encontrar nada más, nadie visitaba ese lugar. Finalmente, me rendí y me acosté relajada viendo hacia el cielo. Levanté mi mano para tapar la luna mientras bostezaba o cerraba los ojos.

Jeff-Go to sleep-me senté de golpe.

Jane-¿Por qué siempre apareces cuando estoy sola?

Jeff-No eres la única que merodea por el bosque

No me quiero enamorar de ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora