Estúpido de mil maneras

Capítulo 1 : Sus ojos!

Abrí mis ojos rápidamente, el frío estremecía mis pies, de pronto sentí como mis dos largas y formadas piernas se congelaban.

Trataba de calentarme con las delgadas mantas que me tapaban pero el frío seguía recorriendo todo mi cuerpo hasta llegar a la punta de mi nariz.

Cuando sentí el frío mientras movía mis dedos de la mano escuche pequeñas gotas de agua, entonces me paré de inmediato y caminé lentamente hacia la ventana para comprobar si en realidad estaba lloviendo o solo era uno de esos sueños que crees que son reales. Rogué a Ala para que sea lo segundo, no quería que mi primer día de clases comenzara desanimadpresentimiento.. A pesar de que me guste la lluvia preferiría que no lloviese hoy, sin embargo mis súplicas a Ala no sirvieron de nada.

Estaba tan desconcertada, no podía creerlo. De hecho nadie podría creerlo, estábamos en pleno marzo y los días anteriores el Sol había irradiado tanto la ciudad que hubieran podido llamarla "La Ciudad Dorada" de no ser por la basura que había en las calles.

Mientras me cambiaba pensaba en diferentes razones del cambio de clima tan drástico que se había dado. Sin embargo sentí una punzada que me decía que la razón no era ninguna de las anteriores y tenia un extraño presentimiento.

Aproximadamente diez minutos después.

Caminaba con prisa, estaba muy nerviosa no sabia si seguiría en el mismo salón o tal vez mis amigas se habían cambiado de colegio porque ellas me lo advirtieron antes.

De todas maneras, cualquiera que fuese la razón, sentía que iba a tener uno de esos pequeños ataque de ansiedad que últimamente había estado teniendo durante las vacaciones, pero que no se lo había dicho a mis padres porque no quería que fuesen sobre protectores conmigo, como siempre lo son.

Por fin llegué al segundo piso, vi la lista de alumnos y sí, estaba ahí. Sin embargo sentí que algo estaba mal, como cuando entras a tu habitación y te das cuenta que falta algo sin saber todavía que es. Seguí viendo la lista y ...

No puede ser.

Hace un mes, un sábado en la tarde.

Estaba ansiosa por salir, quería comprar la tercera parte de mi saga favorita "Hush hush'". Es que en lo único que podía distraerme era sumergiendome leyendo diferentes tipos de libros. Lo hacia solo cuando estaba sola. A quien engaño!? Leía todo el tiempo posible.

Esperar a que mi mamá termine de cambiarse era como comvencer a mi hermano que dejara la computadora. Sí, tardaba mucho tiempo.

Cuando llegamos mi mamá me dijo que se iba a comprar una cartera y que vaya buscando mi libro. Así que entré y lo primero de lo que me di cuenta fue que habían cambiado el color de las paredes. Lo siguiente fue que no habían chicas, solo habían chicos y para ser franca todos eran muy guapos.

Habían altos, bajos, delgados, con buen cuerpo, morenos, rubios, etc.

Uno en especial me llamó la atención: era alto, tenía un muy buen cuerpo formado, una perfecta sonrisa y...y...y sus ojos. Sus ojos eran de unos azules zafiros por el brillo que irradiaban o como el cielo por la alegría que transmitía. No me decidí. Y deje de mirarlo por sinla gente notara que estaba babeando. O él se diera cuenta que lo violaba mentalmente.

Cuando encontré el libro que buscaba di un pequeño salto de alegría y un gritito reprimido. Entonces cuando estaba a punto de cogerlo el libro salió por el ñlado contrario del que yo estaba y me encontré con una sonrisa muy pícara.