Café WangXian

Cómo explicarte lo que siento.

Dentro del departamento, Wen Ning finalmente logra bajar la fiebre y los “calores” de su amigo, hace tiempo le había prometido y se había prometido a si mismo, jamás tocarlo sin su consentimiento, su amistad significaba más para él que un simple momento de desahogo pasajero.

Lentamente Wei WuXian vuelve en sí, mira a su amigo frente a él y se lleva la mano al rostro, mientras se masajea la cien y respira profundamente.

—Wen Ning… yo…. 

Su amigo niega con la cabeza y le interrumpe.—Por ahora solo trate de descansar amo Wei, después podremos hablar si quiere.

Wei WuXian sonríe amargamente antes de asentirle.

—Gracias.

Su amigo deja de lado el cubo con agua fría, y levantándose del sitio que ocupaba junto a la cama, le responde.

—Será mejor que vuelva a bajar, el joven maestro Lan ya no debe tardar en llegar y seguro que se preocupara si no ve a nadie en el café.

Wei WuXian ni siquiera es capaz de pensar claramente, por lo que olvida el hecho de que el pequeño Jade ya se encontraba en la cafetería.

—Bien, yo… bajaré en un momento.

Wen Ning asiente y le sonríe antes de salir del departamento, Wei WuXian respira y trata de recomponerse, mientras cierra los ojos y piensa detenidamente, ahora que explicación le dará al Jade.

Esa tarde, Lan Wangji no vuelve a aparecer en la cafetería y por el resto del fin de semana, tampoco da señales de vida.

Los días se sienten lentos y pesados, y Wei WuXian está cada vez más nervioso a medida que el fin de semana se va acercando, una parte de él tiene miedo de que el Jade no vuelva jamás.

Las 9 menos cuarto, Wei WuXian abre la cafetería sólo, ese día su amigo Wen Ning tiene que asistir a un importante examen, por lo que llegara después del medio día, Wei WuXian enciende las cafeteras y comienza a moler el grano de café, se asegura de tener las  máquinas de frappuccino listas y funcionales, limpia las botellas de los jarabes, y rellena los cereales, mira dentro de los refrigeradores para cerciorarse de que no le falta ningún ingrediente.

De pronto la campanilla de la puerta llama su atención, pero si volteara vista siquiera, él solo murmura.

—Aun faltan diez minutos para abrir el servicio, pero si toma siento en un momento más lo antender…. 

Unos fuertes brazos se cierran alrededor de su cintura, desde su espalda, y Wei WuXian tiemblan al sentir el inconfundible aroma a sándalo.

Su corazón comienza a golpear con fuerza cuando vuelve la vista al hermoso joven que lo está observando fijamente con aquellos penetrantes orbes dorados, como si estuviera a la espera de alguna reacción.

La voz de Wei WuXian tiembla al preguntarle.

—¿Qué es lo ocurre, pequeño Jade?

Lan Wangji aprieta su agarre, antes de voltear el cuerpo del mayor, en un rápido movimiento para quedar frente a frente, a pesar de que justo ahora, el Jade es uno par de centímetros más pequeño que Wei WuXian, la fuerza de sus brazos sigue siendo la misma de siempre, bendita sea la Secta Lan y sus infames paradas de manos.

Wei WuXian traga grueso, puede sentir como el corazón del Jade golpea violentamente contra su pecho, esquiva su mirada, con nerviosismo está seguro de que si lo mira fijamente, terminará envolviendo sus brazos alrededor de su cuello.

La mano de Lan Wangji se aferra a su mentón, obligándolo a sostenerle la mirada justo antes de estrellar sus labios contra los suyos en un torpe pero ardiente beso.