Mi peligro favorito. [EkkoxJinx]

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Nota de la autora

¡Bienvenidos! espero disfruten mucho esta historia; solo quería comentar que fue escrita ANTES de que Arcane saliera, cualquier cambio que no conecte con la historia que han visto o han leído, es porque es un Fanfic. Disfruten~

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¡Hola!, soy Ekko, un rapero famoso que pertenece a la banda true damage, la cual tiene características que van más allá de lo que los fans pueden ver, diría que, guardamos un secreto.

¿Alguna vez has pensado viajar en el tiempo?, o ¿Haz tenido algún deja vú?; disculpame por eso, fui yo... ¡Así es! Yo viajo en el tiempo, pero no me detendré a explicarte como funciona, mejor te cuento como empecé a usarlo.

Hace mucho tiempo en algún lugar perdido que en otra realidad solía llamar Zaun, creé a Pulsar-Z, tenía 2 amigas que pensaban que era una tontería pero logré perfeccionarlo, hasta que un día tuve una fuerte pelea que dañó a mi aparato y el tiempo se detuvo, mandandome a otra línea temporal, en la cual me encuentro ahora.

No me quejo, me gusta la vida que llevo, soy un cantante famoso, viajo por el mundo y tengo muchas fans, sin embargo, siento un vacío desde que cambié de línea temporal; con un poco de investigación logré encontrar en el mapa donde solía ser Zaun, y sé que probablemente ahí estaría una persona que me ayudará a saber porque me siento así.

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Ekko y la banda iban a dar una nueva gira, se sentía emocionado porque al fin encontraría una respuesta a su vacío, o al menos el sospechaba que así sería. Sentía revuelto el estómago al subir al avión el cual se encaminó directo a su destino, durante el viaje comenzó a buscar contacto con quien se supone tiene la respuesta, en que lugares podría encontrarle y donde le invitaría a comer.

Finalmente el avión aterrizó, había una gran multitud de personas esperándolos, primero bajaron las damas, y luego Ekko y Yasuo, firmaron algunos autógrafos y se tomaron algunas fotografías con las personas que los esperaban, llegó el auto que los llevaría a su hospedaje y tomaron su rumbo.

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-Entonces le dije, ¿Porque debe ser rosa y no azul?- Qiyana hablaba a Ekko mientras este apuntaba números de teléfono en una libreta y algunas direcciones, Qiyana arqueó una ceja y le tomó de la mejilla mientras lo miraba fijamente a los ojos.

-Me vuelves a ignorar y no te dejo usar mi aro- Ekko se rió leve y dejó la libreta de lado.

-Discúlpame, es que... conozco a alguien aquí y quiero verle pero no tengo su contacto- dijo agachando la mirada, soltandose del agarre de la pelirosa.

-¿Y se puede saber de quien estás hablando?- preguntó tratando de llamar su atención nuevamente.

-Es una amiga- dijo Ekko sin más, Yasuo escuchó la plática y decidió entrometerse.

-¿Amiga? Si, claro... el rubor en tu rostro nos demuestra que es UNA AMIGA- dijo el pelinegro en tono burlón mientras tomaba una lata de refresco, Akali rió fuertemente al igual que Qiyana, mientras Senna solo escuchaba y reía suavemente.

-Shhhh- dijo Ekko apenado.

Llegaron al hotel, otra multitud les esperaba pero estaban cansados, así que los llevaron por una entrada más discreta, finalmente los músicos podrían descansar para luego tener un día alborotado.

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En otro lado de la ciudad, se encontraba Jinx, ella era una ''desastroza anónima'' Jinx era buscada por autoridades debido a su historial de crímenes, pero se desconocía su identidad, solo sabían que era una chica delgada que tenía al rededor de 20 años.

Vivía felizmente en un apartamento no muy lejos del hotel donde la banda se encontraba así que podía escuchar el bullicio de la gente que fue en masa a ver a sus ídolos. Jinx se acercó por la ventana y logró ver a Ekko, inclinó un poco la cabeza hacia el lado y pensó: -Siento que lo he visto en otro lado... pero es un cantante famoso, quizá solo por eso- salió de sus pensamientos y cerró la ventana, descansaría de un día pesado huyendo de su vida.

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-LEVANTATE EKKO ¡¿YA VISTE LA HORA?!-

Akali le pegó con una almohada en la cabeza a Ekko mientras este hacía como si no pasara nada, Akali bufó fuerte y puso su mano sobre el rostro de si misma, dando a entender su frustración.

-Salte de la habitación que solo estoy en boxer- Ekko abrió uno de sus ojos para ver a Akali y luego se levantó sobre sus brazos, dejando ver un poco de su torzo. -¿COMO DEMONIOS ENTRASTE A MI HABITACIÓN?- ahora, es Ekko quien le tira una almohada.

-COSAS EXTREMAS NECESITAN MEDIDAS EXTREMAS- Akali sostuvo una pinza de cabello entre sus manos con una sonrisa pícara, tomando paso a la salida de la habitación.

Ekko rodó los ojos y se dejó caer de cara sobre la almohada murmurando ''maldita ninja'' y de los pasillos escuchó un ''te oí''.

Llegó la tarde, los ensayos fueron duros pero finalmente podría dedicarse a visitar un poco la ciudad, después de ducharse y cambiarse de vestimenta, Ekko salió a los al rededores del hotel a ver que encontraba.

Había una tienda de regalos, varios restaurantes, tiendas de ropa, joyerías, etc. Se acercó a una vitrina de una tienda de ropa a ver una chaqueta que llamó su atención y a través del reflejo, logró ver una silueta que se le hacía conocida.

Entró a la tienda y ahí vió a Jinx, acomodando ciertas prendas en donde corresponden, Ekko no pudo reaccionar y simplemente se acercó a ella.

-Bienvenido, ¿En que puedo ayud...?- se quedó paralizada al ver quien era.

-Ho-hola- pausó viendo directamente a sus ojos, Ekko sabía que Jinx no lo conocía en esa realidad así que se decepcionó un poco, pero ya le había hablado, así que debía proseguir con lo que había empezado. -¿Qué cuesta la chaqueta?-

Jinx reaccionó inmediatamente y sonrió ladeante, Ekko señaló la chaqueta de la vitrina y Jinx volteó a verla, para luego dirigir su mirada a Ekko.

-Cuesta... 27 dólares- se acercó a una pieza que era parecida pero en distinto color. -Tenemos varios colores y tallas- se dirigió a Ekko quien no prestaba mucha atención a la prenda, si no a ella.

-¿Te llamas Jinx...?-