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poco se sabe sobre el origen de aquella secta, lo único que saben es que quién la creó seguramente es una especie de psicópata aunque claro, no es el primer grupo de su especie en Karmaland, sin embargo es el primero en llevar tantas bajas a pocas semanas de su repentina aparición.
— llevan 48, no podemos seguir esperando a que más gente caiga.— mencionó Mangel al momento en que estaba todo el cuerpo policial reunido. — 49, esta mañana apareció otro, Javier me hizo llegar el reporte.— el propietario de dicha voz dió un paso al frente entregándole una carpeta a su superior. — Gracias Fargan. ahora debemos actuar con rapidez, tienen un ritmo para trabajar, cada dos días aparecen cinco cuerpos en el mismo lugar. el toque de queda parece no funcionar así que debemos hacer guardia las 24 horas si queremos atraparlos.— mencionó Alex frente a todos sus oficiales dando vueltas de un lado al otro de la sala. — yo los iré ubicando, de momento Fargan y yo, iremos a revisar el sur y estén atentos a todo lo que ocurra alrededor, ya saben que hacer si hay una emergencia, Luzu estará a cargo en mi ausencia.— terminó la charla saliendo de dicha sala siendo acompañado por su compañero y amigo.
ambos se habían alejado un poco, no estaban muy claros los motivos entre ellos pero la única razón de su alejamiento era la hermandad oscura. desde que tomó su lugar en Karmaland, Alex no separa su ojo del trabajo y de querer saber quiénes son aquellos que cobardemente esconden sus rostros detrás de las máscaras. Fargan por su parte se centró más en aquel grupo que en mantener sus amistades, personas como Auron, Lolito o incluso el mismo Vegetta notaron su cambio tan drástico y no era por culpar a nadie pero desde que Fargan se apagó más a Willy, todo a su alrededor cambió.
las bromas hacia sus compañeros se volvieron más pesadas al grado de explotar sus casas o incluso saquear las mismas mientras todos se encontraban laborando o estaban simplemente ocupados. él sabía que aquello estaba mal, sin embargo y por alguna razón no podía dejar de hacerlo, dañaba gente y sus propiedades por diversión a lo que Willy se percató y decidió reclutarlo para formar "la hermandad oscura".
— ¿cómo has estado? últimamente te he notado raro. - mencionó el de menor estatura mirando alrededor. — ¿a qué te refieres? — Fargan, nos conocemos hace casi once años, siempre hemos estado con el otro y es obvio cuando estás diferente y cuándo no, ¿sabes? por eso mismo te lo digo, no eres el mismo de hace meses y me gustaría saber el motivo por el que tú...— las palabras del comisario fueron interrumpidas por su compañero, se le veía un poco alarmado e incluso nervioso mientras miraba a un lugar en concreto del bosque detenidamente. — Alex al suelo.— no alcanzó a repetir la indicación, después de que su compañero lo mirara con un semblante confuso éste lo tiró al suelo poniéndose sobre él, pudo notar como una bala pasaba justo a la dirección en dónde estaban anteriormente de pie.
un escalofrío intenso invadió todo su cuerpo acompañado de un dolor extremo al costado de su cuerpo haciendo que el mitad búho llevara con rapidez su mano al área afectada notando así como dicha parte se llenaba de sangre. intentó no quejarse mucho para no asustar a su compañero pero era tarde. Alex había notado la sangre ya que al estar debajo de el herido algunas gotas de aquél líquido rojo habían ensuciado su traje azul.
— Luzu tenemos un 10-00, no tarden mucho.— habló a través del radio que llevaban equipada en el uniforme a la vez que intentaba calmar el sangrado del mayor echando rápidas miradas a su alrededor en busca de los responsables del estado en que se encontraba el oficial. — Fargan tranquilo, no te muevas tanto que se te pondrá peor la herida. — Alex, ¿alguna vez te había dicho lo bonitos que son tus ojos? aún más desde arriba. después de aquél halago, el de menor estatura comenzó a reír de manera nerviosa a la vez que sus mejillas se pintaban de rojo. — pero Fargan...— volvió a ser interrumpido, esta vez por Luzu quién llegaba corriendo, agradecía que Merlon les hubiera obligado a ponerle un rastreador a los trajes de lo contrario les hubiera resultado bastante complicado dar con la ubicación de aquél par. el recién llegado se puso de cuclillas al lado de aquél par revisando con detalle la herida. — Mangel y Jesús, ustedes serán los encargados de llevar con cuidado a David al hospital, vayan.— terminada la oración, ambos chicos tomaron de su compañero con excesivo cuidado llevándolo a una patrulla.
Alex seguía en un estado de shock, no sabía en que momento había pasado tanto, mucho menos la razón aunque pudo imaginarse que el atentado iba para asustar al departamento entero y dejaran así todo lo relacionado a la hermandad pero nada les aseguraba que fuera dicha secta la encargada del ataque.
después de un rato y tras dar su declaración, el capitán por fin pudo ir al hospital a ver a su amigo que a pesar de no haber sido herido de gravedad debía estar bajo revisión por cualquier cosa, después de todo no era completamente humano y aún no sabían exactamente como es que reaccionaría su cuerpo ante lo sucedido. al llegar pudo notar a Lexosi y Elyas custodiando la habitación por lo que saludó a ambos y procedió a entrar, quiso llevarle flores por la tontería pero no tuvo tiempo de hacerlo, quizá después sería, pensó.
una vez dentro pudo notar como el ambiente estaba un poco tenso, no entendía la razón hasta que notó como Fargan estaba sentado en la camilla mirando sus manos y frente a él se encontraba el cuerpo de su esposa la cuál se notaba bastante furiosa. Alex se sentía incómodo con la presencia de aquel matrimonio en la misma habitación que él y aún más por Dulce puesto a que sabía lo que la chica opinaba de él tras haberla escuchado hablar con Mónica al respecto aunque tampoco era difícil adivinarlo ya que la chica no era nada disimulada. tras unos cuántos segundos sumergido en sus pensamientos reaccionó a que lo mejor que podía hacer era irse y volver luego cuando Dulce no estuviese cerca, había dado un par de pasos para atrás cuándo el más alto habló.
— ¡Alexby, cariño! ¿qué tal? ven junto a tus ojitos bonitos.— Fargan intentó calmar lo tenso del ambiente sin embargo solo consiguió que su esposa se molestara aún más lanzándole una mirada intimidante para después dejar la habitación logrando una carcajada de parte del oficial. — Fargan, creo que deberías arreglarte con Dulce, puedo venir más tarde para no causarles molestia. — no es necesario y creo que está todo lo que podemos arreglar, solo vino a regañarme y a pedirme que firmara unos papeles, parece que no todo se pudo arreglar y bueno, nos vamos a separar. — ¿se van a divorciar? no sabes cuánto lo siento, ¿estás bien? ¿necesitas que te traiga algo?— al escuchar aquellas preguntas el mitad búho rió un poco negando con la cabeza. — estoy bien, la verdad es que nuestra relación no podría salvarse ni con ayuda de los dioses así que lo mejor que pudimos hacer fue esto pero créeme que estoy bien, incluso me atrevería a decir que me siento libre. — ya, mejor deberías descansar porque de aquí no sales hasta mañana, lo sabes ¿no?— dicho esto notó como el que estaba sobre la camilla asintió con la cabeza. — también debe quedarse alguien contigo por si pasa alguna emergencia, ¿quieres elegir a alguien o lo asigno yo? — te elijo a ti, Alex.
