Cuando el Fuego y la Tierra se enamoran

Capitulo 14: El es mi chico

Afuera del Templo se dirigía un globo, el cual transportaba a la princesa Azula y su amiga Mai, las cuales descubrieron la ubicación del equipo avatar debido a que un descuidado Zuko fue visto por su hermanita.

-Ese tonto de Zuko, el tonto cree que nadie lo vio cuando la realidad es otra – dijo Azula

-Azula, se que nuestro deber es capturar al Avatar y a los que se encuentran con él, pero no le hagas daño a Zuko – dijo Mai

- ¿Después de lo que ese idiota te hizo?, sabes Mai, aun me acuerdo cuando te encontré llorando por el idiota de mi hermano, ¿enserio aun lo quieres después de la humillación en la prisión? – le cuestionaba Azula a su amiga

-Ese es asunto mío Azula, no acabaras con Zuko a menos que yo lo diga – dijo Mai con su tono frio de siempre

- ¿Tu, dándome órdenes a mí? – dijo Azula apuntándose así misma

-No se te olvide que te salve de una reprenda de tu padre por fallar en la prisión Azula, ¿quieres que el se entere de que su hija, la prodigio en todo, fracaso? – decía Mai con un tono amenazante

-Uff, está bien, ¿desde cuándo te volviste tan arrogante? – dijo Azula con algo de ironía

Ambas chicas estaban cada vez mas cercas del Templo Aire del Oeste, mientras que el joven Zuko se encontraba entrenando al Avatar para que este mejore su técnica del fuego control.

-Vamos Aang, quiero ver esas llamas de maestro fuego – dijo Zuko a su discípulo

-Eso intento Sifu Hotman – respondió Aang

-No lo intentes, solo hazlo, así – dijo Zuko mientras de sus puños salían llamaradas muy calientes

El joven nómada aire hacia su mejor esfuerzo para satisfacer a su maestro, pero este solo estaba preocupado

-Eso no es una llama muy caliente que digamos, ¿acaso te sucede algo? – dijo Zuko

-No es nada Sifu – respondió Aang

- ¿Es acaso por tu pelea con el señor del fuego? – pregunto Zuko

-Es eso Sifu – contesto Aang

-No te preocupes por eso todavía, aun falta 1 semana para el día del cometa – dijo el príncipe

Aang se motivo un poco y siguió entrenado su fuego control, con cada intento que este realizaba, se acercaba al resultado esperado por Zuko.

-Wow, ahora veo que te sale natural, con razón eres el avatar – dijo Zuko

- ¿Qué tal lo hice? – pregunto Aang

-Nada mal eh – contesto Zuko

Aang puso una sonrisa en su rostro

-Vámonos, hay que descansar – le dijo Zuko haciéndole el gesto con la mano

Cuando ambos jóvenes se dirigieron a descansar de su exhausto entrenamiento, Katara se acerco a ellos para poder platicar.

- ¿Qué tal el entrenamiento? – pregunto Katara

-Muy duro como siempre – respondió Aang

-A diferencia de Toph deberías agradecer que soy mas flexible contigo enano – dijo Zuko con los brazos cruzados

-Eso no cambia el número de regaños – contesto Aang

-Pobrecito, pero esa es la carga del deber – dijo Katara de consuelo

-A veces quisiera poder disfrutar el día sin tener que pensar en el dia del cometa – dijo Aang desanimado

- ¿Sigues todavía con eso? – pregunto Zuko