Enamorada de Jeon Jungkook || Tu y Jungkook +18

2. Descarado

Los días posteriores a aquella tensa cena de negocios, ______ no pudo dejar de pensar en Jungkook. Había algo en él que la había dejado intrigada y, aunque no se lo admitiría ni a sí misma, también algo atraída. Decidió que tenía que saber más sobre este hombre que había entrado de manera tan brusca en su vida. Por supuesto, no le preguntaría a su padre; esa conversación terminaría antes de empezar, en cambio, optó por el método más sencillo y efectivo: las redes sociales y el buscador de internet.

Sentada frente a su computadora, tecleó "Jeon Jungkook" en el buscador y los resultados no tardaron en aparecer, miles de primicias y logros destacaban en la pantalla, él era un joven prodigio en el mundo de los negocios, reconocido por su inteligencia, visión y, claro, su innegable atractivo. Los artículos lo elogiaban por sus esfuerzos y éxitos a una edad tan joven, había fotografías de él en eventos importantes, rodeado de gente influyente, en todas y cada una de ellas el resaltaba.

—Que dolor no ser tu mujer, Jeon—dijo ella mientras veía una foto reciente de una rueda de prensa.

También encontró uno que otro chisme sobre su vida personal, la mayoría de ellos resaltando lo guapo que era y especulando sobre sus romances.

______ se perdió en esos artículos, fascinada por lo que iba descubriendo. A pesar de la arrogancia que había mostrado durante la cena, no podía negar que Jungkook era alguien realmente impresionante pero no dejaria que la próxima vez que se vieran, este la volviese a molestar.

Unos días después, mientras bajaba las escaleras de su casa, lo vio. Jungkook estaba allí, hablando con su padre en su oficina, al parecer tenía que recoger unos documentos pero el pasó de largo sin siquiera mirarla, eso la molestó ¿Qué tan arrogante podía ser alguien para ignorar completamente a una persona en la misma habitación? Sin pensarlo agarró el cojín más cercano y se lo arrojó, pero Jungkook ya había cerrado la puerta de la oficina y el cojín golpeó la puerta en su lugar.

***

Esa misma tarde la visito Mina, su amiga desde la infancia. Estaban sentadas en la cama de su habitación, rodeadas de revistas y libros, cuando el tema de conversación inevitablemente volvió a Jungkook.

—No puedo evitar sentirme atraída por él —confesó ella, con un suspiro—. Es increíblemente guapo e inteligente

Su amiga la miro expectante.

— Pero todo lo que tiene de cerebro, lo tiene de egocéntrico—dijo _____ recordando como la trato.

Mina rio y negó con la cabeza, mientras una idea cruzo por su mente.

—Ten cuidado, _____. Sabes cómo es tu padre, si se entera de que tienes interés en Jungkook, no reaccionará nada bien, podría complicarse mucho.

______ asintió, consciente de lo que su padre era capaz, pero no podía negar la chispa de desafío que sentía cada vez que pensaba en Jungkook. Estaba decidida a demostrar su valía, no solo para él, sino también para sí misma. No podía dejar que el miedo la detuviera.

Jungkook, por su parte, no había pensado mucho en ella desde la cena, o al menos eso se decía a sí mismo. Su enfoque estaba en los negocios, en mantener su reputación impecable, sin embargo, había algo en la forma en que ella lo había desafiado que no podía olvidar, había algo en su mirada, en su determinación, que le recordaba a sí mismo cuando era más joven y estaba lleno de ambiciones.

El día que fue a la casa de los Park a recoger unos documentos, notó a _____ al pasar pero fingió no verla. Sabía que cualquier involucramiento personal con la hija de su socio podría ser desastroso, pero cuando cerró la puerta de la oficina, escuchó un ruido sordo, como si algo hubiera golpeado la puerta, giró la cabeza y sonrió ligeramente al imaginarse a ______, probablemente enojada con él.