Desde que te vi I EN PROCESO I

Capitulo 20. ¡Es hermoso!

No sé si golpearlo o solo dejar que disfrute.

¿Es que acaso no tiene cerebro?

Voy a matarlo.

Todos ven a Daniel preguntando, ¿Qué pasó?¿Qué fue eso?¿Nos estaban siguiendo?.

El ¿Por qué? se puede mirar en sus caras.
Se miran entre sí, a ver si alguien dice algo.

Jason mira a Daniel con cara de ¿Qué decimos?, a la vez que mira a su alrededor.

Daniel me ve a mi pero yo le reprochó con la mirada.

No diré nada.

El solo tiene que arreglar sus problema.

Ahora los dos me ven a mi pidiéndome ayuda con la mirada, los demás me miran a mi, buscando una respuesta.

Lo juro, Daniel te mato.

Suspiro y sonrió-Fue increíble ¿no?-todos se miran confundidos menos Daniel y Jason puesto que se dieron cuenta de que tengo un plan.

Así es Daniel otra vez te vuelvo a ayudar.

Y espero que tú hagas lo mismo por mi una vez en tu vida.

--¿De que hablas?¿De verdad no estaban siguiendo? Y ¿Por qué Jason tenía un un arma? Y lo más importante ¿Por qué?

Esas si son muchas preguntas.

Río-Es mi bienvenida para que conozcan mi nueva casa, y que mejor que dándoles un susto de muerte pero ¡Vamos! Hay que iniciar la fiesta.-Les insisto con mi mirada a que me sigan, ellos sin decir nada me siguen pero impresionados por la belleza de esta Mansión , cuando llegó a la puerta la abro, y ellos detrás de mí entran.

Vaya, esa si que fue una pésima excusa.

Entro y ellos me siguen, todos quedan impresionados y dan vuelta alrededor viendo todo.

Yo voy a la gran vitrina de cristal donde hay diferentes botellas de alcohol.

Tomo una botella de vodka y sirvo un poco en un vaso de cristal, bebo un poco antes de sentarme en un sillón individual.

Jason como si fuera su casa hace lo mismo pero este escoge Jack Daniels, Daniel hace lo mismo y los demás igual, mientras tanto unos de los del equipo busca como poner música y los demás le ayudan.

Al no hallar el aparato de música, jack se acerca a mi.

Me levanto de mi asiento y les sonrió-¿Qué quieren escuchar?-

-¿Mía?-preguntó, buscando una respuesta.

-Se le ofrece algo señorita A -la voz robótica de Mía se escucha por toda la casa, los chicos al escuchar esa voz empieza a mirar por todos lados buscando de dónde proviene la voz pero no encuentran nada.

Le indico la canción asignada por uno de los chicos, y es cuestión de segundos cuando se hace sonar.

Mía es una asistente robótica, puede hacer todo lo que yo le diga por qué solo tiene como reconocedor mi voz.

Los chicos deciden sacar varias botellas de mi vitrina, servirse y beber.

Cómo si fuera su casa.

Salgo al patio trasero de está mansión y veo a más de trece chicas vestidas de forma un poco provocador, si, como si fueras a una fiesta

Ellas están desorientadas preguntándose ¿Dónde están? y ¿por qué?. sobre todo temerosas, no es lindo que te secuestren a tales horas de la noche.