al fin encontré el ¿amor?

13- Aquella puerta.

Poco a poco fui abriendo mis ojos cuando me di cuenta que estaba Jack sosteniendome en sus brazos, lo vi con sus ojos empapados de lágrimas sólo pronuncié :

-¿Qué te ocurre? - dije algo extraña.

-Oh, Madisson, estás bien.

-¿Eso creo?, ¿Qué me ocurrió?

-Fuiste a abrir la puerta de casa de Catalina y algo fue lo que viste y caíste al suelo.

-El, él.

-¿Quién?

-E-él, me hizo mucho daño - pronuncié a través de mis labios.

-¿Quién era? - dijo Jack algo extraño.

-M-mi tío.

-Oh, cariño, ¿Dime que ha pasado?

-Nada, no es el momento de decirlo.

-¿Hay algo de ti que no se?

-Se podría decir que sí, pero es parte del pasado y no te incumbe.

-Pues tú me importas hermosa.

-¿Catalina dónde está?

-Fue a buscar un doctor para que venga a verte.

-¿Y Bruno?- dije mientras miraba hacía todos lados.

-Bueno, él la acompaño.

Luego que Jack pronunció eso a través de sus labios, me abrazó, sinceramente no quería soltarlo, algo me estaba ocurriendo con él, algo inexplicable.

Narra Jack.

Qué ocurrirá con Madisson me formulaba esa pregunta una y otra vez, ella me encanta pero últimamente ha estado algo extraña, esa chica me vuelve loco, es todo un misterio. Estoy algo preocupado por ella, por lo que hablamos anteriormente, algo le ocurrió con su tío, quiero saberlo, quiero ayudarla. Madisson es mucho más hermosa cuando duerme, quisiera que fuese mi novia.

Narra Madisson.

Eran las 10 am, yo recién comencé a despertarme cuando de pronto me di la vuelta y estaba Jack a mi lado, es que ese chico me fascina, el puede romper todos mis esquemas. Estaba durmiendo dulcemente, tenía un sueño placentero que se notaba a centímetros, debo confesar que se veía muy tierno como dormía. Me siento mucho mejor que anoche, estoy algo adolorida, me duele todo mi cuerpo. De pronto sentí como Jack se despertaba y decidí hacerme la dormida y el susurró:

-Hasta durmiendo te ves preciosa.

Hice como si no hubiese oído nada y continúe fingiendo que estaba dormida, me acarició el cabello y me abrazó. Hasta que decidí dejar de hacerme la dormida y pronuncié...