ᴠᴀᴍᴏs ʜᴀᴄᴇʀʟᴏ ᴊᴜɴᴛᴏs • ᴛᴇᴡᴋᴇsʙᴜʀʏ.

|ᴛʜʀᴇᴇ|

¿Ǫᴜᴇ ᴇs ᴇʟ ᴀᴍᴏʀ? ᴇʟ ᴀᴍᴏʀ ᴇs ᴜɴᴀ ᴍᴇɴᴛɪʀᴀ ᴘᴇʀᴏ ᴜɴᴀ ᴍᴀs ᴅᴇsᴘɪᴀᴅᴀᴅᴀ ǫᴜᴇ ʟᴀs ᴅᴇᴍᴀs ʏᴀ ǫᴜᴇ ᴇʟ ᴀᴍᴏʀ ᴇs ʟᴀ ᴍᴇɴᴛɪʀᴀ ᴍᴀs ᴄʀᴇɪʙʟᴇ.

Elizabeth Charlotte Janes
Princesa del arco y flecha

Estaba caminando por la habitación hasta que veo a Enola entrar algo despistada.

-¿Enola?-Pregunte mientras que esta me miraba.

-Tewkesbury esta en un acantilado-Me dijo esta a lo cual yo solo la contemple algo sorprendida y preocupada.

-¿Acantilado? ¿¡Tewkesbury?!- Me acerque a esta y ella me contó una historia de cuando ella era pequeña y se había arriesgado por una oveja en el acantilado.

-En este Caso Tewkesbury esta en un Acantilado- Solté de repente y esta me miro con una sonrisa preocupada.

-Madre debe de esperar- Se dijo para si misma y yo pensé lo mismo.

Al otro día Enola Y yo fuimos a la casa de Tewkesbury o bueno a la de la familia.

Un montón de sirvientes, Su madre, Su abuela y El tío mandon.

Ambas eramos viudas lo cual era bastante raro pero servía.

Evita que hablen de la muerte, Y dan un poco de miedo. Nada mejor que el miedo.

Entramos al ENORME hogar que tenían y fuimos a hablar directamente con la madre de Tewkesbury, Lady Tewkesbury Marquesa se Basilwether.

-Ustedes quieren hablar con Lady Tewkesbury Marquesa de Basilwether.- Dijo uno de los mayordomos muy elegantemente.

-así es- Respondí con firmeza

-May Beatrice Posy-Señalo a Enola.

-Camille Dennise Crounch- Ahora me hablaba a mi.

Entramos al gran salón y ¿Conversamos?

-Creo que mi cuñada tiene toda la ayuda que necesita- Dijo el que creo que es el tío, Hermano del padre de Tewkesbury. 

-Ustedes son escritoras de ese horrible periódico- Se excusó la madre la cual parecía estar nerviosa todo el tiempo.

-No somos escritoras, Somos Detectives- Respondió Enola a lo cual yo asentía frenéticamente.

-Váyanse o se irán a la fuerza- Nos amenazo la mujer y fuimos empujadas a la salida.

-¡Trabajamos para Sherlock Holmes!- Dije por primera vez a lo que Enola me miro reprochando.

-¿Holmes? ¿Está interesado en el caso?-pregunto la mujer con curiosidad a lo que Enola asintió.