A La Cama.

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BAM!

Salgo de mi casa azotando la puerta, mis padres están peleando de nuevo, ya no puedo más con esto, si no se aman, por favor que ya se separen.

Es de noche, no hay a donde ir, y mucho menos en estos tiempos.

Podría quedarme en el garage, pero no quiero, quiero que piensen que me fui, así que salgo a la calle y me siento frente a la casa de al lado, en donde un árbol me cubre de todas las ventanas de la casa.

No hago nada, sólo estoy ahí sentado, escuchando a los grillos y viendo carros pasar y vecinos salir.

Entonces, cuatro casas a la derecha de la mía, se abre la puerta, es él, en cuanto lo veo me volteo, él no vio que lo vi, así que agacho la mirada, no estoy de humor para otro ridículo.

Él camina y entonces me ve, se cersiora que sea yo, y entonces se acerca.

-Hola...

-Saint

-Soy Perth, cómo has estado? Ya hace más de una semana que nos vimos.

-Si, bastante ya, estoy bien, gracias, y tu? -se sienta a un lado de mi.

-Pues no me quejo, que haces afuera tan tarde? Olvidaste las llaves?

-Ah... No, mis papás se están peleando, así que me salí, no quería oírlos.

-Dejaste a tu mamá sola!?

-Eh... No, no tengo mamá

-Oh... Qué está pasando? Bueno, si es que puedo preguntar.

-Ah... mi papá está enojado porque mi padre casi nunca está en casa.

-Oh ya veo... Y tú estás bien?

-No, simplemente estoy harto, estas peleas son cada semana, si no es que 3 veces por semana, y cada vez es algo diferente, si no se aman más, qué caso tiene seguir juntos?

-Bueno, algunas veces a las personas les da miedo separarse de su comodidad, y más a parejas que llevan tanto tiempo juntas, es difícil dejar ir.

-Saint!... Oh hola, buenas noches.

-Buenas noches -contesta Perth a mi papá con una sonrisa y se levanta.

-Saint, por favor entra a la casa, te vas a enfermar, ni siquiera traes suéter.

-Gracias por hablar conmigo Perth, nos vemos luego.

Perth me sonríe y levanta la mano en señal de despedida, le sonrió y entro a la casa. Mi papá me detiene en el garage.

-Bebé, lo siento, no volverá a pasar.

-No papá! Tú no deberías dusculparte, debería desculparse él.

-Saint, él también es tu padre, por favor, no grites, vas a despertar a los vecinos.

Entro a la casa y cuando veo a mi padre en la sala, lo miro feo y sigo mi camino. Llego a mi cuarto y azoto la puerta.

Me lavo y me duermo, mañana tengo escuela.

El Vecindario [Pinson] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora