5 Razones Para Salir Conmigo _ NaKook

Rose; 2

Corriendo tanto como sus pies le permitían, NaYeon trataba de llegar temprano a clases, luego de haber perdido el autobus que la llevaría.

No contaba con que una pequeña -gran- piedra, se me metiera en su camino, y consiga que se tropiece, acabando con el cuerpo en el suelo, y sus útiles desparramados por doquier.

Soltó un quejido al sentir un leve dolor en la rodilla, pero ya iba tarde, por lo que se apresuró en juntar todo, y retomar el camino hacia su destino inicial.
Cinco minutos más, y llegó al instituto, corriendo por los pasillos hasta dar con su aula, en donde golpeó la puerta, y soltó un bufido al ver que el profesor Wang le negó la entrada.

Rendida, vago hasta el baño de mujeres, y se metió para verse al espejo. Allí se arregló el maquillaje, el cabello, y sacudió su ropa, frotándose el cuello por el estrés que comenzaba a sentir.

Se quedó un rato más con el teléfono, y luego salió.

— ¿NaYeon? — Oyó que la llamaron.

— ¿Si? Oh, hola Kook — Habló la femenina, acercándose a saludar al pelinegro — ¿Qué haces aquí? Se supone que debes estar en clases.

— Exacto, se supone, pero la profesora me sacó, ¿te doy un consejo? Nunca le digas a una mujer que se ve vieja — Comentó, asintiendo con la cabeza, seguro de lo que decía.

— ¿Pero qué-...

— Oh, y por cierto, ¿tu que haces aquí? Debes estar en clases de inglés — Recordó Jeon, cargando su mochila en un solo hombro.

— Llegué tarde y no me dejaron entrar — Explicó, soltando un suspiro — ¿A don-

— ¿Qué tienes en la pierna? — La interrumpió, luego de notar un color rojo en la piel de la mayor.

— ¿Ah? — Miró su extremidad, sin inmutarse al ver sangre en la zona — Oh, me caí mientras estaba viniendo al colegio, no es nada.

— ¿Nada? Te está sangrando — Acusó, frenando su caminata.

— No es para tanto, solo es un raspón — Aclaró.

Jeon la miró con el ceño fruncido, y sin decir nada, buscó algo en los bolsillos de su mochila, sacando una pequeña caja blanca de ahí.

— ¿Qué es eso? — Inquirió ella.

El menor no contestó, sólo se agachó, y con un algodón más algo de alcohol, comenzó a curar la herida de la chica, quien se quejaba de a ratos.

— Mi mamá sabe que suelo ser algo torpe y distraído, así que siempre me obliga a llevar esto conmigo, y siempre me sirve de algo — Contó, colocando una curita luego de finalizar el proceso.

— Vaya, tu mamá es muy inteligente — Señaló, sonriendo levemente.

— Así es, oh, y por cierto, esto es para ti — Informó, sacando una rosa de su mochila, esta vez de color amarillo.

Ella lo tomó en sus manos y echó un vistazo a la nota, pero cuando levantó la vista, solo alcanzó a ver la espalda del pelinegro, riendo ante la actitud del joven.

"El amarillo representa la amistad, que es lo más valioso que me pudiste dar luego de haberte acompañado hasta tu casa. Loco, ¿no lo crees?
¿Quieres otra razón para salir conmigo? No es por nada, pero mis besos son los mejores de todo el instituto, así que un beso mio garantiza una mejor calidad de vida.

-Kookie✨

— Ahora entiendo porqué huiste — Murmuró entre risas, comprendiendo que eso era mucho, incluso para el fabuloso Jeon Jungkook.

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Nimin_36