014

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Melissa mantenía sus ojos cerrados dejándose llevar por el ritmo de la música.

Estaba tan concentrada en ello que no escuchó la entrada de Denver al departamento.

— Melissa —grita, al parecer el chico llevaba tiempo insistiendo por su atención.

La rubia abre los ojos inmediatamente sorprendiéndose ante la presencia de su amigo.

— ¿Cuento tiempo llevas aquí? —pregunta, estaba confundida.

— Desde —guarda silencio, para observar la hora en su celular— cinco minutos. Por cierto, deberías cerrar bajo llave la puerta de la entrada, cualquiera puede entrar.

— ¿Mi puerta estaba abierta?

— ¿Te encuentras bien?

Melissa guarda silencio unos minutos. No estaba bien, aunque no lo quisiera, el tema de Bryce aún le afectaba y odiaba eso.

Quería dejar de sentirse así por alguien que seguramente estaba pasándola mejor sin ella.

— Estoy bien —sonríe regalándole una sonrisa.

Denver sabía que no lo estaba, la conocía tan bien. Pero prefería no decir nada, Melissa eran un tanto testaruda y se negaría a hablar sobre el tema.

— Traje algo de comer, esta en la cocina —apunta.

Melissa toma su móvil bajando el volumen. Se pone de pie acompañando a su amigo hasta la cocina.

Se disponen a charlar y comer. Melissa amaba tener visita en su departamento pues después de lo sucedido con Bryce el ruido en el lugar había reducido.

Aceptaba que lo extrañaba, pero se negaba a ella tener que hablarle. ¿Qué le diría? Bryce fue el que cometió el error, él tiró su amistad por la borda por el simple hecho de conversar o quede bien frente a su exnovia.

Además, ambos chicos actuaban de una manera totalmente infantil mandando indirectas en sus post de instagram o tiktok.

En efecto, ella no le hablaría.

— Meli, te habla Bryce —escucha como Denver la llama.

Melissa hace un sonido con la boca pidiéndole que repitiera lo dicho.

— Te habla Bryce.

— Denver, sabes que no quiero hablar sobre el tema...

— No te estoy preguntando —niega con la cabeza— Bryce te llama por teléfono —apunta con su tenedor el teléfono de su amiga.

Melissa, al percatarse que la música que tenía había cambiado al tono de llamada, baja su mirada donde efectivamente, estaba recibiendo una llamada de su amigo.

— ¿Qué hago? —la histeria comenzaba a apoderarse de su ser.

— Respóndele o deja que siga la llamada hasta mandarlo a buzón.

— No me ayudas —reprocha.

La parte de su ser que aún ama a Bryce se apodera de ella respondiendo la llamada. La otra parte de la un golpe.

Cierra los ojos esperando que él hablará primero.

— ¿Melissa? —se escucha la voz ronca del chico.

— Sí.

— Extrañaba tu voz, pensé que no responde... —Sin más, cuelga la llamada.

— ¿Qué fue eso? —pregunta Denver entre risas.

— Cállate, entre en pánico.

Aquí es donde Melissa se dio cuenta que seguía atada a Bryce. No quería seguir así.

Friendzone; bryce hallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora