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Cuando Adexe volvió con el té y vio a la chica en el suelo se asustó demasiado como para saber que hacer, segundos después de procesar lo que estaba pasando hizo lo único que pudo hacer ante el shock.

-¡Mamá! -Gritó-

Dejó rápidamente el té en la mesa y corrió hacia la chica. Agradeció el hecho de que en aquel momento no había ningún cliente.

Nare salió de la cocina y se acercó a la chica rápidamente.

-Tranquilo, solo es un desmayo, estará bien. Nau cierra la puerta, creo que ya hemos trabajado mucho por hoy.

Después de un rato, habían tumbado a la chica en un pequeño sofá que estaba también cerca de la chimenea, habían sacado unas cuantas mantas y Adexe no se separó del sofá en todo el rato.

-Iré a preparar una tarta de manzana, cuando se despierte necesitará comer algo. - Habló Nare con una sonrisa. Nau se dirige junto a su madre a la cocina mientras Adexe sigue junto a la chica.-

-Me has dado un susto de muerte -Susurró el castaño mientras apartaba delicadamente el pelo que caía por delante de la cara de la chica-

La chica lucía demasiado pálida y parecía estar enferma, pero aún así, aún pareciendo más muerta que viva, a Adexe le pareció la chica más bonita que había visto nunca.

coffee - adexe y nauDonde viven las historias. Descúbrelo ahora