Puro silencio!

Capitulo 8

Les sigo contando, al momento de entrar a la casa la cual era el destino de esa cita supuse que Erika seria la que iba a encargarse de mi cuerpo pero no fue así, todo se formó diferente, llegue a sentir que mis planes se desvanecían pero algo me sostuvo y me llegó a la mente aquel consejo que mi abuela me dio en alguna etapa de mi vida el cual me ayudo bastante y decía lo siguiente:¡Nunca dejes que alguien te intimide porque lo malo se apodera de tus miedos y tus miedos hacen el pacto con lo malo!.

Pues seguí ese mensaje que me quería dejar el poema y con la frente en alto entre en cada rincón de la casa hasta encontrar mi objetivo que en ese momento era el sangriento.

Después de haber pasado una media hora finalmente llegó el sangriento pero lo más impactante para nosotras fue que el no había llegado solo, venia en compañía de dos personas más que eran los padres de Erika. En ese momento llegaron preguntas a mi mente y fueron las siguientes: ¿Por qué o para que trajo a los padres de Erika a este lugar y como los encontró si ellos estaban enterrados muy lejos de este sitio?, seguramente quería desvanecer las fuerzas de Erika y alimentarse con ellas, eso fue lo único que se me ocurrió en ese instante.

Mis pensamientos fueron realmente lo que ayudó a que Erika no callera al piso dejando todo en mis manos, lo que si estaba esperando eran las palabras de el sangriento y para lograr que el hablara  le pregunte ¿Por qué los trajiste aquí, quedamos que solo vendríamos 3 personas y tu muy bien sabe quienes son, o a caso no tienes la suficiente fuerza para combatir con nosotras, te debería dar pena y vergüenza que para enfrentarte a una mujer debes usar a sus padres para causarle mas dolor y desgastar sus fuerzas?, pero que te digo, lo que no te esperas es que le has dado mas razones a   para combatir contigo, - y me despedí con una fuerte risa. Como era de esperar la respuesta del sangriento fue muy drástica, dijo que lo que menos el quería era hacernos daño, solo quería dejar una imagen marcada en nuestras mentes, sinceramente no entendía nada pero Erika si lo llegó a entender, lo que nos quería dejar dicho era que iba a volver a matar a los padres de Erika a lo cual Erika le respondió:

- Si supieras que ya me da igual, he aprendido que los muertos no resucitan, no sienten y no tienen los mismos pensamientos que los vivos, haz lo que quieras pero te aseguro que en cualquier momento tu y yo volveremos a vernos cara a cara y de todo lo que te voy a hacer nunca pero nunca te olvidaras de mi...