• 𝙊𝙣𝙚 𝙎𝙝𝙤𝙩𝙨 𝙈𝙖𝙧𝙫𝙚𝙡 •

• Cherik •

𝑪𝒂𝒍𝒍 𝑴𝒆 𝒃𝒚 𝒀𝒐𝒖𝒓 𝑵𝒂𝒎𝒆 

⟨1985⟩

No pasaría este verano junto a mi familia en la mansión de Westchester, sino que, esta vez pasaríamos nuestras vacaciones en una de las viejas casas pertenecientes a mi familia, ubicada en un terreno privado cerca de la playa en la ciudad de Musselburg, al norte del Reino Unido. Serían las perfectas 9 semanas que me merecía, con tan solo 19 años, recientemente me había graduado de la universidad como un joven prodigio con un futuro prometedor.
Mi hermana Raven había decidido inscribirse en un curso de verano, el cual le ayudaría a reforzar sus estudios, por lo que se había quedado en la casa situada en Londres. Parecía que recibieron unas semanas tranquilas, solo yo y mis padres ... O eso creí.
Al parecer mi padre, el cual rara vez aceptaba a este tipo de cosas, decidió ayudar a un joven hombre de 24 años, recientemente recibido de su profesorado en historia, había acudido a él para completar una pequeña pasantía que la universidad le otorgaba, teniendo en cuenta que entregar al final del verano un escrito para trabajar en alguna universidad, algo así como un currículum, el tal Erik se arriesgó con mi padre, un profesor y contador multimillonario, aun sabiendo que no aceptaba a cualquiera.
Para mí, este tal Erik Lehnsherr era insoportable, queriendo impresionar a mis padres con su cultura "encantadora", siempre entrometido en mi vida o lo que hacía. Definitivamente no nos llevábamos nada bien, llegando a molestarnos el uno al otro, Lehnsherr hablando sobre qué deberíamos de pensar en viajar a Alemania las próximas vacaciones, ¡Jamás iría allá!, Mientras que yo aceleraba un poco mi forma de hablar al estar en la mesa para así confundir a Erik antes de que pudiera procesar lo que había dicho, pero luego de unas 3 semanas de ignorarnos el uno al otro al fin llegamos a una tregua.

--- Que te parece... ¿Una tregua? --- dije mientras leía un libro frente a una pequeña piscina --- Ya me harté de ver tu cara malhumorada cada vez que vengo aquí ---
--- Hum... sí, suena bien --- habló con esa voz grave que lo caracterizaba al alemán --- A no ser que estás diciendo esto para atacar por la espalda ---
Reí un poco mientras que cerraba el libro y quitaba mis lentes obscuros de mi rostro --- Tranquilo, no es eso, solo que aún quedan algunas semanas para que te vayas y si seguimos así no acabaremos bien ---
--- Entonces, tregua --- extendió su mano húmeda debido a que poco tiempo antes había estado en el agua ---
--- Tregua - - dije mientras me acercaba y estrechábamos nuestras manos... Ojalá nunca hubiera dicho aquello.

Los siguientes días pasamos horas y horas juntos, creí que sería tedioso y aburrido, pero realmente generaba algo diferente en mí, ya no era solo una amistad, lo cual me preocupaba, si alguien llegaba a saber lo que generaba en mi pecho aquel alemán, mi padre me mataría y ya bastante tenia de mí que nunca hacia nada que lo enorgullezca.
No podía ocultarlo por más tiempo, los días seguían pasando y Erik parecía volverse más cercano a mí, debía decírselo así que el día en que salimos por la tarde a caminar cerca de la playa perteneciente al terreno de mi padre, nos sentamos en la arena, ambos mirando el paisaje de la tarde.

--- Creí que iríamos a nadar Charlie --- dijo él mientras dirigía su mirada hacia mi ---
--- Si, pero antes quería ver el paisaje, ¿no es hermoso? --- quería evitar tocar el tema de forma repentina --- Es como si a estas horas el cielo se preparara para que todos lo contemplen, creo que el ocaso es lo más hermoso de la naturaleza, ¿No lo crees? ---
--- Si, aunque es aún mejor oírte hablar así --- sentí como giraba a verme --- Sabes tantas cosas aun así siendo tan joven ---
--- Yo no sé nada Erik, si supieras lo poco que se de las cosas que importan --- dije entre una suave risa mientras giraba a otro lado ---
--- ¿Qué cosas importan? --- habló en un tono serio mientras fruncía su seño ---
--- Tú sabes a que me refiero --- no quería volver a girar a ver su rostro ---
--- ...Charlie, ¿Por qué me dices estas cosas? --- oía la seriedad en sus palabras ---
--- Porque pensé que sabrías --- dirigí mi mirada a él apenas unos segundos, volviendo a evitar el contacto visual ---
--- ¿Y por qué pensaste que lo sabría? --- parecía ya más relajado, o algo así, pero no dejaba de estar algo...fastidiado? ---
--- ¿Porque quería que tú supieras...? --- miré el paisaje frente a ambos mientras dejaba salir un suspiro --- ¿Porque quería que tú lo supieras? --- ahora esa pregunta daba una, dos, tres, cinco, diez, quince vueltas en mi mente --- Porque no puedo decírselo a nadie más que a ti --- dije volteando para cruzar nuestras miradas ---
--- ¿Estás diciendo lo que creo que dices? --- en su mirada podía notar algo de curiosidad, asentí lentamente para afirmarle que seguramente estaba en lo correcto ---