Comienzo de todo.

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Estoy arta de todo.De mis padres,del insituto,de mi vida.No puedo hacer nada por mi cuenta,me toman como si fuese una niña pequeña y ¡tengo 16 años!

Y de esos 16 años,16 los he vivido bajo el techo de mi casa,hasta hoy.

Han trasladado a mi padre a otra ciudad,lo típico de una empresa de inmoviliarias.

A fin de cuentas ya era hora de irse de aquella espantosa ciudad que traía problemas por todos lados,que si robos,que si asesinatos,secuestros...todo aquello era típico allí.

Aunque mis padres no se preocupaban demasiado de que había unos delincuentes andando por el barrio,solo les importaba el dinero.

Siempre he sido la niña mimada de papá que lo tiene todo y que no le faltaba de nada,o eso es lo que decían de mi en mi antiguo instituto,pero ellos no sabian la realidad.Mi verdadera situación.

Mi hermano pequeño,David,murió cuando yo tenía solo 8 años.Ya han pasado otros 8 años más,y sigo sin superarlo.

La cuestión de perder a lo que más quieres no es muy agradable que digamos.

Aunque con ayuda de Meri,la asistenta de la casa,y Don Ramón,mi pscólogo personal había salido más o menos a delante,por lo menos hasta ahora.

Meri era como segunda madre para mi,ella me ha dado todo el cariño que mi madre biológica no ha conseguido darme en estos 16 años de vida.Siempre ha sido un gran apoyo, he confiando en ella y lo aré hasta el último momento.

-Marta dame el móvil y ayuda a desempaquetar las cajas.

-Ya que me has separado de mis amigos dejame contactarme con ellos por lo menos,¿no?

Suspira y agacha la cabeza,triste.

-Hija,no lo entiendes todo esto es por tu bien,además no es nuestra culpa que ha tu padre lo hayan trasladado aquí para trabajar,necesitamos el dinero.

-Vosotros nunca teneis culpa de nada.

Y dicho esto,cojo mi maleta y entro a la nueva residencia,donde hay,comenzaré mi nueva vida.

Que necesitan el dinero dice,no tiene fe.Yo necesito el cariño de una madre,no lo tengo y me aguanto.

Mientras giraba el picaporte de la puerta para entrar algo llamó mi antención.

Me giré pero no vi a nadie.Que raro juraría que he notado como si alguien me estuviera vigilando.Da igual seran los vecinos.

Cuando entre a la residencia mi boca hizo una O involuntaria.

Era increíble todo aquello,los muebles ya estaban perfectamente colocados como dijimos.

Miré hacia arriba y me encontré con aquella lámpara que me gustaba tanto,era una lámpara que colgaba del techo formando una araña.

A continuación iba caminando por el salón de entrada,y me dirijí a la cocina.

Luego hacia esas escaleras de caracol que me gustaban tanto.

Y,después hacia los pasillos,Meri me dijo donde si situaba mi cuarto,asique decidí ir a colocar la ropa que tenía en la maleta.

Cuando entré,me alegré tanto,el cuarto estaba hecho a mi medida,justo como yo lo quería.Me heché en la cama,sí,era tan blandita como yo pensaba.

Pero no me di cuenta y en un abrir y cerrar de ojos,me quedé dormida,sin saber,que al día siguiente,mi vida cambiaría y no para mejor,o quizá sí,quien sabe.

Sí,quiero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora