Obsesionado por ella || Vadhir Derbez ||

CAPÍTULO 35

•Narra Vadhir
Entre a mi recámara, deje la puerta abierta y me quite los pantalones quedando en ropa interior. Entre en el baño y aunque estaba nuevamente en casa y todo había terminado de igual manera deje el arma junto al jacuzzi luego fui al jacuzzi para poder relajar mi cuerpo, en eso escuché un ruido que venía de mi recámara, por suerte había dejado el arma junto conmigo. Me envolvi en una toalla y tome el arma, camine despacio y abro la puerta de golpe apuntando con el arma al instante.

-grita Fabiola- Vadhir

-sorprendido- dios, Fabiola -baja el arma- por me asustas de esa manera hermana? -cubre su rostro con una mano- hay Fabiola -suspira- que necesitas?

-suspira- sólo quería dormir nuevamente contigo y te pones agresivo -se acuesta en la cama de Vadhir- puedes venirte y dormir conmigo?

-aciende con la cabeza- si, sólo déjame ponerme algo se ropa y guardar -mira el arma- esto. -se acerca al armario- -toma una pijama y entra al baño nuevamente- listo -dice saliendo del baño- -deja el arma sobre un mueble que está al salir del baño- listo hermana, ya me acerco hasta haya -camina hasta la cama y se acuesta al lado de Fabiola- veo que tu también te duchaste hermana!

Si, cuando entraste a mi recámara y besaste mi frente abrí los ojos y recordé que aún no me duchaba, y decidí levantarme para poder ponerme también algo de ropa limpia -riendo- gracias por salvarme la vida -acaricia su rostro- gracias Vadh.

Eres mi hermana, eres la niña de mis ojos como no iba a salvarte. Créeme que fueron las peores horas de mi vida.

-rie- para mi fueron semanas hermano.

Siempre si fueron varias horas, lo mejor que pude hacer fue haberte salvado -abraza a Fabiola- que fue lo que te hizo hermana?

-suspira- no quiero hablar de eso -salen sus lágrimas- desde el momento en que me saco del coche me llevo a esa cabaña.

-limpia sus lágrimas- hermana, hay que estar felices de saber que sólo fueron horas y no días, que hice hasta lo imposible para que no pasará a mayores -sonrie- no se de donde saque el valor para ponerle un arma a un oficial en la cabeza -rie- pero lo importante es que tu estas aquí y estas bien -acaricia sus labios- tenía tantas ganas de tenerte nuevamente aquí -se acerca a sus labios- de tenerte nuevamente a mi lado -dice besandola-

-se aleja de Vadhir- por que lo haces? -dice mientras se aleja- no quiero que lo hagas!

-suspira- lo siento -se aleja de ella- me deje llevar -sonrie- mejor cuéntame que quieres que hagamos, nos vamos nuevamente a nuestra casa en la ciudad o nos quedamos aquí?

-suspira- lo único que quiero hacer ahorita es descansar

-rie- es verdad, ven -se acuesta- acuestate aquí, yo te cuidaré!

-se acuesta sobre el pecho de Vadhir- gracias hermano -dice cerrando los ojos- sólo quiero dormir ya después pensamos que hacer!

-acaricia su cabeza- vale, duerme!

•Narra Vadhir
Acariciaba el cabello de mi hermana, a los minutos noto que ella se queda completamente dormida, sonrio y sigo acariciando su cabello. Luego de unas horas al ver que no podía dormir, me levanté y baje hasta la cocina para tomarme un vaso de leche con chocolate, estaba preparando el vaso con chocolate cuando sentí como alguien tocaba mi espalda.

Fabiolaaaaa -grita Vadhir- -voltea a verla- me vas a matar de un susto tu deberás!

-riendo- hay hermano, extrañaba hacerte eso
-lo abraza- que haces?

-vuelve a voltearse- preparándome un vaso con chocolate, quieres uno?

-aciende con la cabeza-

-sonrie- vale, toma el mío -dice dándole el vaso- yo me prepararé otro -sonrie nuevamente-

-toma el vaso- gracias hermano -besa su mejilla- -se acerca al sofá sentándose-

-preparandose un vaso con chocolate- y pudiste dormir?

-bebiendose el licuado- si hermano, si dormí muy bien.

Me alegro hermana -dice guardando la leche en el refrigerador- yo no puede dormir -toma el vaso- -voltea a ver a Fabiola- estaba cuidandote -sonrie- -bebiendo licuado- no se si hoy quieras dormir en mi recámara -se acerca a Fabiola- yo puedo dormir en el suelo y tu duermes -se sienta al lado de ella- en mi cama.

-bebiendo licuado- yo digo que prefiero dormir hoy contigo, pero no tienes por que dormir en el suelo -rie- puedes dormir junto a mi, prometo no moverme demasiado

-riendo- no es por eso, creía que querías dormir sola.

-se acerca a Vadhir- no tengo por que creer dormir sola -acaricia su rostro- eres mi hermano

-se queda en silencio-

-bebiendo licuado- oye Vadh, donde está nana?

-suspira- no recuerdas lo que le hicieron -salen sus lágrimas- es un poco fuerte pero te lo diré, Nana se encontraba aquí en casa, yo la había dejado sola por ir a buscarte a ti a casa de Alan, para cuando yo fui, te saque de haya, te lleve al hospital, Alan secuestro a Nana y -se queda en silencio- -suspira- termino con su vida -salen sus lágrimas- secuestro y asesino a Nana, simplemente por que lo hizo, aún no lo sé -limpia sus lágrimas- el muy descarado en lo dijo.

-comienza llorar- todo esto es mi culpa verdad? -coloca el vaso sobre la mesa- yo fui la culpable de que Nana muriese -llorando- fui yo quien trajo a ese monstruo a nuestra casa -cubre su rostro- mejor me hubiera matado a mi.

-dejando el vaso sobre la mesa- no, no digas eso -se acerca a ella- crees que yo quería eso? Obviamente no, no quería que Nana muriese de esa manera, pero que quieres que haga eeh -dice tocando su rostro- no puedo hacer nada, Nana está en un lugar donde no existe la maldad y donde puede descansar, pero tu aún estás aquí, por algo dios se llevó a Nana y no a ti -salen sus lágrimas- me da sentimiento que digas que quieres morirte, por que yo arriesgue mi vida por ti -dice tomando sus manos- me pusieron un arma en la frente, tuve el valor de enfrentarme al imbécil de Alan -llorando- todo por ti y quiero que veas la forma en que hablas -suelta sus manos- Alan cambio tu manera de ser, desde que salimos de haya, te comportas algo extraño.

Y que quieres que este tan contenta -dice gritando- que quieres que después de que ese hombre me violo y me maltrato quieres que este feliz y contenta -se levanta del sofá- por supuesto que estaré muy contenta, carajo -dice mientras se acerca a las escaleras y sube corriendo hasta su recámara-

-voltea a verla- Fabiola, Fabiola! -dice levantándose del sofá- no tienes por que ponerte así -grita desde abajo- -cubre su rostro con ambas manos- maldita hora en que aparecio ese chico.