Temporada 6 | Fria realidad

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(-Spoiler alert-) En esta nueva temporada notaran como la trama sufre un cambio tremendo. Por cierto, el drama de mis historias ha subido de nivel, poco a poco lo notaran.

Tinieblas, era lo que se apreciaba en el cielo de aquella tarde, una grieta aérea que generaba un estruendo que anunciaba el fin del mundo, acompañado de una melodía salvaje que chillaba en los oídos y que parecía empeorar con el paso de los segundos, un viento frio y cortante que hacía estremecer al calor que producen los seres humanos, todo eso estaba ocurriendo a horas de la tarde en el planeta tierra... Ciudad Satán estaba siendo encadenada al fin de los tiempos y aún no lo sabía.

—Vegeta, ¿Sientes lo mismo que yo ahora?—Comentó el pelinegro protagonista de esta historia, alzando el vuelo en un ritmo desesperado.

—Lo que sea que es, su maldad llega hasta acá, incluso yo puedo intuir que esto no se trata de ningún aficionado esta vez, ¡Maldición! Cuando creía que había paz por un momento—Vegeta encorvó sus cejas por el estrés que estaba pasando, potenció su vuelo y dejó atrás a su compañero. — Date prisa Kakaroto, no estoy de buen humor. —

—Vamos, yo tampoco estoy de buenas. — Goku tenía una expresión seria, el así siguió el rumbo con Vegeta hacía el cielo, tratando así de alcanzar al origen de todos los males. 

Mientras que, en el centro de la ciudad, específicamente en el área de los departamentos de venta de ropa, estaba una chica de cabellos puntiagudos quien corría a toda prisa por las calles, tratando de alcanzar algo.

— ¿Qué diablos está pasando? ¿El clima ha cambiado tan repentinamente?— Un frio sentimiento recorrió el cuerpo de la azabache, haciéndole entender mejor algo. — No es nada del clima, esto solo significa que habrá problemas—La saiyan rechinó los dientes con fuerza, ella sabía que algo desagradable estaba por pasar y sus agrios augurios nunca fallaban, por eso emprendió vuelo hacía unos ki cercanos que ella reconocía, los de Kale y sus dos hijos

— ¡Hermana!—Kale alzó la mano desde la distancia, acompañada de los pequeños hijos de la pareja Saiyajin, los niños saludaron a su mamá rápidamente y Kale estaba por hablar, pero fue interrumpida por su hermana. 

—No hay tiempo para hablar aquí, síganme—Caulifla tomó a su hermana, dos hijos y se fugó con su técnica aprendida por Goku hacía su planeta hogar— Cuéntame, ¿Qué diablos pasa en la tierra? —

—No lo sé, el cielo se oscureció y parecía abrirse, Vegeta y Goku se adelantaron a toda prisa a ver—Expresó Kale con temor mientras hablaba

—No hace falta que digas más, ya puedo imaginar el resto, protege a los niños y quédate aquí, nos haremos cargos—Caulifla estaba por teletrasportarse de nuevo pero...

—¡Yo también puedo ir y pelear¡—Aseguró Kale con coraje 

—No, no puedes, tienes una vida que proteger a parte de la tuya, y sé que Vegeta pensaría lo mismo. —Caulifla señaló el vientre de su hermana, para luego despedirse y retirarse. — Protégete y cuida a los niños, no sabemos qué puede suceder—Caulifla se marchó finalmente.

Ya en la tierra, volando por las nubes oscuras y tormentosas estaba Caulifla, atravesando el brillo de los relámpagos y las ondas de choque que hacían eco en la ciudad, pasados unos kilometros de vuelo ella llegó al rango donde podía presenciar el ki de tres seres, el de Goku, el de Vegeta y una fuente de Ki altamente hermética, ella no sabía quién sería la tercena persona, pero algo si tenía en claro, en ese planeta se estaba librando una batalla tan descabellada que hacían parecer que el cielo estuviese siendo desgarrado por las vibraciones. Ella continuó su viaje para encontrar el origen de esto y finalmente lo logró, no obstante, ella estaba viendo como lo imposible se convertía en penumbra. Un sujeto de mediana estatura estaba dándoles la paliza de sus vidas a los héroes más aclamados del universo. Cuando ella lo vio ya era tarde, ¿Había una forma de escapar de esta? En el cielo había indicios que se había librado una batalla sin cuartel y, consecuente a esto, una ráfaga descendente que imitaba la velocidad de un meteorito cayó hacía el suelo impactando con brutalidad, Caulifla siguió la ráfaga y se encontró una desagradable sorpresa.

—Un hombre de ropa casi desintegrada y con el cuerpo taladrado en diversas partes estaba arrastrándose con sus fuerzas por el suelo, solo hacía lo que su determinación de permitía pese a su miserable estado físico—Regresa tonta, me he confiado y he terminado mal de un segundo a otro. — El hombre tropezó y dejó caer su cuerpo. — Regresa y protege a Kale, esto se nos ha salido de las manos—Vegeta quien estaba en un estado de miseria rió con cruel ironia, su rostro estaba apaleado y con rastros de sangre, sin hablar de su cuerpo entero— Solo dormiré un poco—El hombre soltó el último aliento cálido que tenía para ofrecer y desfalleció totalmente, su intensa mirada renunció pese a su voluntad de guerrero, pero podrían notarse las lágrimas de impotencia que comenzaron a salir de él aún en el otro mundo. —

— ¡Vegeta!— Caulifla confirmó el pulso de Vegeta y terminó con sus dudas, él había muerto.

Ella en su mente no tenía la convicción para pensar con claridad dentro de la emergencia y quedó mirando el cuerpo inerte de una de las personas más fuertes de todo el multiverso mismo, allí tirado como sí nada, como sí todo su poder no valiera para sobrevivir. — ¡Qué diablos! —Gritó la chica muerta de rabia por dentro.

—El diablo soy yo pequeña—Una sombra se posicionó detrás de Caulifla y estaba por atacarla grotescamente a muerte por la espalda, pero, la reacción de su pareja la salvó, de momento.

— ¡No le pongas una mano o te mato infeliz!—Gritó con furia Goku quien usaba el súper saiyajin dios azul a todo poder, pateando con precisión al rival que solo retrocedió por el impacto, comparado con eso, la fuerza de la patada tenía lo necesario para dividir un continente, pero el enigmático sujeto no sufrió muchos daños que digamos.

—Si no es que terminas tan miserable como él, por cierto, no quiero que le caiga moscas. —El hombre posicionó sus manos de forma misteriosa y pulverizó el cadáver del príncipe de los saiyajin en milisegundos, no dejó ni las cenizas del cuerpo.

— ¡Maldito!—Gritó Goku con todas sus fuerzas al ver tan miserable acto, la crueldad de ese misterioso hombre era algo incalculable a ciencia cierta, el pelinegro desató toda su furia y comenzaba poco a poco a perder la razón, usando la doctrina egoísta en un estado inestable lleno de hostilidad.

—Ya deseas que llegue tu turno, ¿No?— La silueta del hombre mostró una sádica sonrisa llena de oscuridad.

—Caulifla, por favor vete, voy a matar a este sujeto y nada será seguro, así que muévete. —Goku habló con Caulifla para que ella se marchara del campo de guerra, mientras él dejaba fluir su inmenso poder vestido en ira.

—No te molestes Son-Goku, lo único seguro es que de aquí no sales respirando— El hombre finalmente soltó una sombría túnica con la que cargaba, mostrando así quien era el asesino de Vegeta y el hombre responsable de producir una catástrofe en toda la historia.


Nuevo capítulo. Nueva redacción, nueva oportunidad, ¿Qué tal ha estado? ¿He perdido el toque o qué?

Goku X Caulifla | Amor multiversal / TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora