27.- Suplentes

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Dylan

Al llegar a la empresa con una sonrisa de idiota, Carlos me obliga a ir directo a la sala de juntas y una vez adentro empieza a cuestionarme.

—¿qué te pasa?

—mejor dicho ¿qué te pasa a ti?, hace días que no te veo y te apareces aquí como si nada hubiera pasado

—¿hay algo que debería decirte?

—¿qué pasó con Sophia?

—llegará en cualquier momento

—creí que aprovecharías ese viaje para meterla a tu cama

—tuve mejores cosas que hacer que llevarla a la cama

—tiene que ser una broma

—claro que no

—bueno, ¿y qué harás hoy al respecto?

—debo arreglar papeles para salir

—¿saldrás nuevamente?

—así es, pero esta vez tardaré más tiempo en volver, así que por eso necesito dejar todo arreglado

—¿y se puede saber a dónde irás?

—te lo diré después

Salgo de la sala y al pasar por el escritorio de Sophia, la encuentro platicando con la secretaria de mercadotecnia.

—Sophia – ambas voltean a verme – si no está ocupada quisiera que llevara la agenda a mi oficina, tengo asuntos que arreglar con usted

—por supuesto

Entro a mi oficina y me concentro en mi celular mandando mensajes y haciendo llamadas para dar a conocer mis planes mientras salgo del país.

Sophia

Una vez que le he pedido a Ivone que expida un permiso para mí debido al viaje que haré y de explicarle un ridículo motivo (que tarde o temprano se sabrá que es mentira), tomo la agenda de Dylan y entro a su oficina como me lo ha pedido.

Al terminar su llamada me observa y parece muy molesto.

—mi madre se ha negado a que deje a cargo a Jeny

—¿qué ha dicho exactamente?

—que Jeny no tiene experiencia para ser presidenta, así que vendrá mañana para nombrar a alguien más

—pero Jeny es perfecta para el puesto, además, es tu hermana

—por esa razón he pensado en irnos esta noche

—pero mi padre

—todos llegarán mañana, ya me he encargado de eso – me interrumpe – lo que quiero es impedir que mi madre mande al carajo mi decisión

—sin tu firma ella no puede poner a nadie más a cargo

—exacto

—me parece bien, si nuestra huida le da una oportunidad a Jeny, lo haré

—iremos a visitar a Jeny antes de irnos

—bien

Le sonrío y se acerca a mí para abrazarme y después darme un beso.

—¿ya has elegido a tu secretaria suplente?

—aún no, pero haré unas llamadas más tarde

—me parece bien

...

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