𝟱𝘀𝗲𝗰𝘀 𝗼𝗳 𝘁𝗵𝗲 𝗵𝘂𝗻𝗴𝗲𝗿 𝗴𝗮𝗺𝗲𝘀 [not completed]

Habilidades |

Es mi segunda noche en el tren, hemos cenado y logre mantener una conversación de mas de dos palabras con Uma. Ellas es linda. Ha sido criada de la forma en que ha sido criada nada más. No tiene la culpa de que nuestro mundo sea así. O quizás yo quiero creer que es así para no salirme de control y tomarla de su cresta y estrellarla contra la pared.

Alguien toca la puerta de mi habitación, es Jack.

Cuando abro la puerta me quedo observándolo.

-¿Puedo pasar?- me pregunta.

Me corro hacia un lado indicandole que sí. Me siento en mi cama y él se queda parado delante de mí.

-No podía dormir- sonríe al suelo y luego se agacha sobre mi pequeña cajonera blanca junto a la cama. Observa la foto donde están mi abuelo mi madre y Tracey.

-¿Qué habilidades tienes?-masculla, aún sin mirarme.

Lo observo, confundida y parpadeo mil veces por segundo.

Balbuceo vocales sin sentido alguno. Jack me mira y se sienta a mi lado.

-Bueno- observa- quitale provecho a tu tamaño.

Por un momento creo que me está tomando el pelo. Se percata de ello y prosigue.

-Corres rápido de seguro, y escalas árboles.

Asiento, es verdad. Puedo hacer ambas cosas.

-¿Y tú?-susurro.

-Bueno he casado un par de patos y he degollado un par de gallinas en mi vida.

De acuerdo, al menos no vacilará en el momento de cortarle el cuello a alguien. Las entrañas se me retuercen. Yo tengo naúceas cuando veo sangre.

Me coloco a mi misma frente a un tributo en la arena. No sé porque pienso en Leona, la chica de dos metros del Distrito 7.

Estoy frente a ella y su cara de asesina, a pocos metros. Llevo un cuchillo en la mano, ella corre hacia mí, se me abalanza y yo pierdo el equilibrio. Pero sé que no he intentado perforarla. Estamos en el suelo forcejeando, ella me toma del cuello y me estrangula. Yo comienzo a ahogarme…

-Lana- Jack pone una mano en mi hombro.

-No estoy bien- mascullo.

-¿Cuál es el problema?

-No puedo hacerlo Jack.

-¿Él que?- me mira fijamente y yo hago lo mismo.

-No puedo matar personas.

Se queda en silencio, procesandolo.

-El día que te torciste el pié pude darme cuenta, te desmayaste y no tenias ninguna fractura.

-Dilo, estoy acabada.

-Oh no. Verás, la arena no es como todo lo demás. Cuando peleas por tu vida las cosas cambian.

-Jack ¿tu confías en nosotros?

-Claro. Y tienes el tiempo suficiente para afrontar esto, sólo debes practicar. Ven, empecemos por algo básico, golpeame- se sienta de frente.

-¿Qué?-susurro.

-Golpeame Lana, un cachetazo…justo aquí-se toca el costado de la cara.

-Jack ¿Qué…?

-Sólo hazlo.

Lo hago, primero con miedo. El sonríe y entonces le pego otra vez, mas fuerte, y una tercera vez lo logro empujar unos centímetros de su lugar.

Se ha sentido bien. Como una descarga.

-Bueno nada mal, pero sabes que eso de nada te servirá.

Niego con la cabeza.

-Comienza con un insecto. Luego sigue contigo.- me aconseja, dedicándome una media sonrisa.