Rebel

Décimo

-Hey nena.-La voz de Axel envió escalofríos por toda mi columna vertebral.

Acerqué el teléfona más cerca de mi oído y respiré hondo.

-Hola.-Sonreí.Aunque sabía que no me podía ver.

-¿Cómo fue tu día?El mío fue una mierta total y absoluta.-Se rió.

Puse los ojos y miré mi portátil.Sólo estaba mirando fotos en We Heart It,una rutina normal en mí.

-¿Por qué fue una mierda total y absoluta?El mío estuvo bien,no me puedo quejar.-Suspiré.

-Porque no te ví después del almuerzo,te extrañé.-Hizo un mohín.

Me mordí el labio,mientras me sonrojaba.Era un ligón.

-Yo también te extrañé.-Susurré.Demonios.-Eh...um...no sé de que hablar.-Menuda manera de cambiar de tema Libi.

Pude sentir mis mejillas arder de pura vergüenza.Si bien estaba actuando como una completa idiota con problemas.Ni que me fuera a comer.

-Te llamé para preguntarte si podía ir a tu casa...si le parece bien a Michael.-Se rió.Me estremecí al recordar el suceso en el que mi hermano me avergonzó días atrás.-Tengo que preguntarte algo.-Agregó.

¿Debía dejar que Axel viniera?¿Qué podría pasar?Oh dios,no pienses así Libi.Eso era exactamente lo que me temía.Probablemente sólo había jugado conmigo para meterse en mis pantalones.¿Cómo podía ser tan estúpida?

-Um...¿es un mal momento?No tengo que ir si no quieres.-Su voz me sacó de mis pensamientos.Supongo que si lo dejaba venir sólo tenía que tener un poco de cuidado y no dejar que las cosas fueran demasiado lejos,si eso sucedía.

-No,no...está bien,Michael aún no está en casa y no volverá en un tiempo.-Empecé a jugar ocn mi pelo,girándolo alrededor de mis dedos.

Miré el relos de la pared,eran las seis.

-Estaré allí en quince minutos.Nos vemos ahora nena.-Murmuró la última parte antes de colgar.

Sonreí para mis adentros y luego corrí al cuarto de baño.Rápidamente me lavé los dientes y me recogí el pelo en una coleta.Después corrí a mi habitación y me cambié de ropa,poniéndome un oantalón de chandal y una camisa holgada.Ahora él seguramente no querría hacer nada con una chica vestida no provocativamente,¿no?

Unos diez minutos más tarde oí el timbre de la puerta.Tomé una respiración honda y profunda y empecé a bajar corriendo las escaleras en calcetines.Esa no fue una buena idea.Porque antes de que pudiera llegar a la puerta,me resbalé y terminé cayendo de bruces al frío suelo.Estaba bastante segura de que Axel había visto todo a través de la puerta de vidrio.Gimiendo,me levanté del suelo y me dirigí ahcia la puerta.No me había dado cuenta de cuando me caí,pero cuándo giré la muñeca para abrir la pueta,un dolor se extendió por todo mi mano,y me di cuenta de que estaba roja como un tomate.Cuando abrí la puerta,Axel me envolvió de inmediato en un fuerte abrazo.

-Estás hermosa Libi.-Murmuró en mi oído.

Sentí mis mejillas calentarse y luego sus brazos se separaron de mi cuerpo.¿Cómo podía estar hermosa cuando parecía que acabaab de levantarme de la cama?

-Te vi caerte.-Tomó mi mano entre la suya,dándole la vuelta para ver el moratón que se estaba formando en mi muñeca.

-¡No hables de eso!Bastante vergonzoso que tuvieras que ver eso.-Le golpeé juguetonamente el brazo.

Él me devolvió el gesto con una sonrisa.-¿Qué tal si vamos a por un poco de hielo para la muñeca y olvidamos el incidente?-Dijo riéndo.

-Llévame.-Abrí los brazos.-Por favor.-Le rogué haciéndo un puchero.