Confianza

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Quería ser una estrella.

Saltar a la fama, hacer reír a los demás, firmar autógrafos, ser adorado y sencillamente tener el honor de codearse con los mejores, mientras gozaba de los dulces frutos de un trabajo bien hecho.

Lo que nadie le dijo cuando fue creado, era que su personalidad cambiaria tanto. Que las acciones bizarras y bromas maliciosas no le traerían lo que él deseaba. Ni que por mucho que se esforzará existía una regla unida a él que no podía ser pasada por alto.

Sencillamente las cosas no funcionan a su favor.

Por mucho que fuera ganando, por mucho que hiciera las cosas bien, por mucho que se esforzara en tomar la delantera, una pequeña formula, una regla... un simple acuerdo en su contrato lo cambiaba todo.


Cuando tuvo su primer corto animado, su introducción frente a las cámaras y en la gran pantalla, el mundo era muy diferente, al igual que él.

Porky no era tan noble, ni tan inteligente o suertudo.

Él no estaba solo loco, no le importaba realmente lo que ocurriera a su alrededor. El punto era divertirse.

Podía cantar cuando quisiera, saltar por todo el escenario, hablar incoherencias y sus trucos para zafarse de problemas funcionaban impecablemente.

Era más listo, más flexible y despreocupado. Tal vez hasta más gracioso con todos esos movimientos bajo su manga.

En algún momento cuando su personalidad comenzó a cambiar, cuando los estribos se le ajustaron a sus manos y los libretos agregaron más a su personalidad que un "simple" pato irreverente, entonces la forma en que los demás lo percibían cambio.

Demasiadas bromas pesadas y jugarretas lo llevaron a ser notablemente una molestia para algunos y un artista renombrado para muchos otros.

A él le daba lo mismo, siempre y cuando el público estuviera de su lado, riendo por sus actos y admirando su talento.

Pero entonces llego él.

Tex no fue justo al crearlo tan perfecto, tan único y tan sencillamente... molesto.

Un ganador nato, con trucos creativos y una imaginación envidiable. Un héroe cómico de esos de los que existen pocos.

Los libretos no vienen con todas sus acciones detalladas en el papel, mucho de lo que ocurría en los cortos venia de su improvisación, por lo que la imaginación, creatividad y velocidad de reacción son claves para sacar la broma que puede cambiar el curso de acción como el director deseaba.

Debías de hacerlos reír y ganar al final.

Ganar.

Ese es el problema. El dejo de ganar siempre.

Su fama, admiradores y la gloria se le escaparon de las manos, cayendo entre sus dedos hasta el escalón de segundo lugar.

"- 'El héroe es lo que deseamos ser, por eso los alentamos y los emulamos.

Deseamos ser ellos aun sabiendo que muy probablemente nunca lo seremos. Sin embargo, esos héroes cómicos nos dan la esperanza de ir por la vida con su mismo valor, seguridad y confianza.'- "

Las palabras de Chuck seguían resonando en su mente y aun podía recordar ese día como si hubiera sido ayer.

El olor a tabaco por todo el set, la sonrisa paciente de Chuck Jones mientras le hablaba, otorgándole un porque al éxito de la nueva estrella de Merrie Melodies y los Looney Tunes.

¿Cómo Salvar una Caricatura?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora