¿Cómo Salvar una Caricatura?

El Teléfono Rojo

Era de madrugada cuando escucho el sonido.

En un inicio no sabía que era precisamente, pero fue cuestión de escucharlo un par de veces mas para comprender. Sonaba como un teléfono antiguo, por eso el sonido del timbre era tan ruidoso al punto de escabullirse hasta su cuarto, y vamos, que su nave no era precisamente pequeña como para que el ruido viajara de cuarto en cuarto tan fácilmente.

De mala gana se puso de pie en busca del teléfono, no deseando lidiar con algo de ese tipo a esas horas de la madruga.
Maldijo por lo bajo, su incapacidad de dormir rodeado de ruido. Era como un mecanismo de defensa que se alteraba en él manteniéndolo alerta y despierto ante cualquier ruido anormal.

Pasando por la cama de K-9 le hizo una señal perezosa para que lo acompañara.

Salió de su cuarto y lo raro era que el ruido parecía provenir de un lugar al que hacía años que no entraba.
Se detuvo de pie frente a la puerta de aquel sótano secreto que tenía su nave y bajo despacio siendo seguido por los ruidosos pasos de K-9.

- '¿De aquí? No es posible...'- Murmuro explicando con extrañeza a K-9, a lo que su fiel compañero solo ladeo la cabeza.

Llevando su mano a la perilla de la puerta, se detuvo al escuchar como el timbreo cesaba.

Se quedo de pie frente a la puerta, fuera lo que fuera dejo de sonar y posiblemente no requería de su atención a esas horas.
Froto sus ojos con cansancio, tenia que grabar temprano en la mañana, no debía de estar jugando al detective a las ridículas 3:50 de la mañana.

Soltando un bostezo se dio media vuelta, dispuesto a volver a la cama con lo que K-9 estaba más que de acuerdo.


Apenas y subió al primer escalón de aquellas viejas escaleras metálicas cuando el timbreo inicio nuevamente.

Ahora molesto por la insistencia de aquel objeto terrícola, abrió la puerta de un solo jalón y entro.

Miro hacia el viejo teléfono rojo, lleno de polvo y deteriorado por el tiempo, mas no por el uso. Sabia bien que ese teléfono jamás se había usado... de hecho jamás había sonado antes.

Quedándose de pie frente al objeto, cerro los puños con fuerza ¿Qué se supone que debía hacer?

- 'D-dod... ¿Dodgers?'- Frunció el ceño ligeramente.

Ahora lo recordaba, durante el corto tiempo de noviazgo que tuvo con Dodgers, el pato llevo consigo algunas de sus pertenencias que dejo en su nave mientras vivían juntos "Cosas de suma importancia" fue lo que dijo aquel pato protector de la galaxia.

Marvin, recordaba haber visto el teléfono en ese entonces y si su memoria no le fallaba si había preguntado al respecto "Me dijeron que lo tuviera cerca", eso fue lo único que dijo.
Hubo muchas cosas que el marciano prefirió no inquirir, optaba por no saber al respecto, además de que Dodgers era el tipo de Looney que al sentirse agobiado por muchos cuestionamientos acababa por molestarse fácilmente.

Si quería llevar o no un teléfono rojo que parecía sacado de los '80s eso era decisión de Dodgers y si deseaba guardarlo en su cuarto secreto donde mantenía ocultas armas viejas y explosivos fabricados sin autorización, entonces estaba bien, no cuestionaría nada.

Existieron muchas cosas que Dodgers jamás le dijo y él en cierta forma, permaneció indiferente al respecto, pero a estas horas de la madrugada con el teléfono cesando de timbrar nuevamente, deseo haberlo cuestionado más, por lo menos para saber quien diantres le iba a llamar a ese teléfono o de donde lo sacó.

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Bugs' POV

El insistente timbreo de un teléfono a lo lejos amenazaba con sacarlo de su mundo de ensueños, era la tercera vez que lo escuchaba y fue lo suficientemente capaz como para dejarlo pasar las primeras veces, pero parecía no querer dejar de sonar.

Removiéndose nuevamente entre las cobijas, no quería salir al frio de la noche en pleno invierno. Estaba cómodo con su mejilla pegaba al emplumado pecho de su pareja. Plumas negras lo arrullaban, haciendo que su cuerpo se relajara y permaneciera cálido durante toda la noche, pero ese molesto timbreo amenazaba con arrebatarle su descanso.