Lo que sea, pero contigo ~ Evan Peters (PAUSADA TEMPORALMENTE)

Capitulo 6

*Narra Linette*

Desperté en una camilla, estaba con un camisón de esos de hospital, mi cabello estaba alborotado, miré a mis alrededores y no había nadie, solo se escuchaba repetidas veces un 'Pip, pip, pip', que provenía de una de las cuantas máquinas y monitores que había, trate de sentarme pero estaba débil, sentí una punzada en mi muñeca, miré y tenía un tubo inyectado que conectaba hacia un suero con sangre y otro transparente, intenté quitarmelo pero sonó una alarma, me asusté y volteé a todos lados tratando de apagarla, rápidamente vino una enfermera.

- Despertaste - Dijo y me sonrió, no sé que le veía de bueno, hubiera preferido seguir durmiendo antes que saber que estoy en este antro.

- ¿Dónde estoy? ¿Qué hago aquí? - Necesitaba respuestas, hace menos de un minuto estaba en el auto con mis padres viajando al aeropuerto y ahora estoy acá.

- Estás en Inglaterra, fuiste enviada aquí con el consentimiento de tus padres, es un centro de rehabilitación, estarás aquí hasta que progreses y puedas dejar tus adicciones - Me dijo mientras escribía algo en su pizarra, caminó a mí y empezó a revisarme - Está todo bajo control, al parecer no sufríste ningún paro-cardiorespiratorio

- ¿Qué cosa? ¿Dónde están mis padres? - Pregunté exaltada, cómo mierda había llegado aquí, dónde estaban todos, necesitaba irme, escapar.

- Por tu gran consumición de drogas, tu corazón está muy débil al igual que tus pulmones, podrías haber muerto en pleno viaje, te desmayaste en el auto de tus padres cuando llegaron al aeropuerto, nosotros tuvimos que trasladarte en un Jet privado, ya que el vuelo que tú tomarías estaba atrasado, llegaste aquí con las pulsaciones muy bajas, y estuviste inconsiente 4 semanas, tus padres están en California - Dijo para luego cambiar el suero, me miró y suspiró.

- O séa que casi muero, okey, no me lo esperaba - Dije y pasé mi mano por la frente en signo de frustración, todavía seguía confundida, luego recordé que tendría que quedarme aquí hasta que muestre nuevos signos positivos, hubiera preferido morir - Yo no quiero estar aquí, esto debe ser una confusión, yo tengo que estar en mi casa, no aquí - Dije soltando algunas lágrimas, tenía un nudo en la garganta.

- Lo lamento señorita, pero no puedo hacer nada, así está dicho no puedo cambiar nada aunque seas mayor de edad - Dijo e hizo un gesto.

- No, tu tienes que ayudarme a salir de aquí, por favor - Dije con mis ya mejillas empapadas de lágrimas, suplicando, necesitaba huír, no podía seguir aquí, sería como morir lenta y dolorosamente, la enfermera salió de la habitación - No por favor! No te vayas, no me dejes sola 

Se hizo de noche, me había pasado el día observando la ventana, lo qué daría por salir de este horrible lugar, al menos explorar y saber cómo era, traté de enderezarme sin activar ninguna puta alarma, apagué el monitor así no sonaba cuando me sacara las agujas, me pude sentar, mi cuerpo se encontraba algo débil, pero creo que podía aguantar, puse el primer pie en el suelo, estaba muy frío, segundo pie, un esfuerzo y ya estaba de pie, caminé y me fijé si había alguien, nadie, parecía de esos hospitales fantasmas, acomodé mi camisón y abrí la puerta, luces blancas en tonos medios azules, no había ni un alma, seguí mi paso por aquel gran pasillo, me acerqué a una pequeña ventana que tenían una de las cuantas puertas que se hallaban, allí se encontraba una mujer adulta sentada en una silla, cabízbaja, se la veía triste y deprimida. Decidí entrar a verla, quizás podría hacerla sentir mejor, entré con cuidado, el olor nauseabundo se centraba en toda la habitación, al parecer esta no se percató de que estaba dentro, caminé hacia ella y toqué su hombro, no había señales, me agaché para ver su rostro, mi corazón se detuvo y se hizo de piedra, mi miedo se fue por las nubes al ver su rostro, sus ojos estaban color bordó, casi negros, al parecer le había salido sangre de allí, me hice hacia atrás y gatié desesperada hacia la salida, el feo olor venía de la mujer, estaba muerta.

¿Cómo podían dejar a las personas pudriendose en las habitaciones? Mi corazón se relajó al poder salir de la habitación, nunca me iba a olvidar de algo así; Seguí caminando por el pasillo, escuché voces y pensé que podría ser alguien, así que me escondí tras un cesto de ropa sucia que había allí, me quedé escuchando y solo oía murmuros, creo que era una mujer, me asomé y no se encontraba nadie, salí cuidadosamente de mi escondite, vi que los ruidos venían de una habitación que su puerta decía 'Secretaría', me asomé al cristal que había sido tapado con una cortina deslizable, me acerqué más a esta y vi a una enfermera teniendo sexo con el que sería el seguridad de turno, que bien nos cuidaban, por eso tanta gente se queja día a día que los hospitales y todo tipo centro de salud son una mierda, aquí está la razón. Luego de ver aquella bizarra escena seguí mi camino por el internado.