En el colegio..
La mañana es tranquila, cálida pero si no fuera por que aún no había sabido nada de su amigo desde el día de ayer quizá Hyung Jun lo notaria. Cada vez más chicos y chicas aparecían uniformados frescos y listos y él desde el segundo piso solo esperaba poder verlo llegar. A estas alturas no le importaba si lo hacía del brazo de Hyun Joong, le desesperaba no ver por si mismo como se encontraba.
Hablar aún si Young Saeng no lo quisiera escuchar, tenía motivos de sobra para pese a todo no alejarse de su lado. SungMin llegó hasta donde estaba uno de sus dos amigos e intuyendo el mismo estado de animo que cuando Saeng los apartó de su lado, lo abrazo él se sentía igual con respecto a la situación.
— Tranquilo, ya volverá a hablarnos— susurró el conejito a su lado algó pálido.
Hyung Jun sonrío suave, asintío y lo miró.
— ¿Y tú como te sientes? ¿Ya no tienes náuseas?— preguntó sujetando su mano sentandolo al lado suyo inspeccionando su rostró.
SungMin negó, se le veía más repuesto que a como llegó. Hyung Jun podría hasta jurar que el tímido e hiperactivo SungMin era tal vez de las personas más sanas del mundo, claró que existían objeciones sin embargó era muy rara la ocasión.
Por eso le sorprendío apenas verlo y saludarlo hace unos momentos cubriendo su boca con un gesto de asco y desapareciendo por la puerta con dirección a los baños. Inclusive noto que el color de su carita siempre sonrojada blanca como el papel.
— Si, descuida, mamá siempre me dice que debo dejar de comer tantos dulces y Kyunnie la apoya— se cruzo de brazos haciendo un lindo pucherito con su boquita rosa de corazón.
— Pues debes de hacerles caso SungMinnie, te dara un ataque diabético con tanto dulce y chocolate.
— ¿Tú también?— lo miro con ojitos vidriosos y a Hyung Jun se le arrugó el corazón.— Es lo que mamá y Kyunnie siempre me dicen.
SungMin ocultó su rostro entre sus blancas y delicadas manitas.
— O, o al menos no comer tantos ya ves que luego es una lucha hacerte comer la merienda por que tu apetito se va en cuanto pruebas el dulce, lo lamento Minnie pero lo decimos por tu bien— le paso un mechon de su obscuro cabello tras la oreja.
— Mm, bueno— quitó sus manos y aceptó no muy convencido.
— ¿Que te parece si durante el almuerzo vamos por un plato de frutas?— propuso Hyung Jun para hacerlo sonreír.
— ¡¡¡Esas tambien son dulces!!!— aplaudío encantado.
Y Hyung Jun empezo a rezar por que los sintomas de SungMin no se debieran a "Otra cosa" casí se abofeteo en cuanto una imagen de SungMin con panza se formo en su mente, ademas de que estuvo por llamar a su propío novio para que le diera una paliza a KyuHyun y despues obligarlo a usar condón de ahora en adelante.
No podia creer que el dulce SungMin ya estuviera teniendo sexo cuando hasta hace poco el lo había hecho por primera vez con Jung Min.
"Ese infeliz esta pervirtiendo a mi dulce conejito" se quejó infantilmente en su cabeza.
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Se estaba abrochando su camisa o al menos los botones que se hallaban intactos, sentado aún en el asiento trasero despues de que su chofer se corriera dentro suyo. Mientras este acomodaba su propío uniforme y le lanzaba alguna que otra mirada al cuerpo que no hace mucho había poseído.
Jae por supuesto no haría ninguna clase de drama alguna ya que el sexo le gustaba fuera con Hyun Joong o no, aunque con él era con quién más lo disfrutaba .
