Cadena de secretos || Trueno

12

Emma

-Me gusta Martin...

-Martin es horrible, negro

-Bueno... Román

-¿ Sos joda Mateo?- dije incorporándome en la arena y sonriéndole de costado.

Nos habíamos despertado bastante temprano, hoy yo tenía el día libre y él trabajaba a la tarde, así que se le ocurrió esta fantástica idea de venir hasta la reserva natural y almorzar acá.

Habían pasado un par de días desde que habíamos ido al hospital, ya me había hecho algunos análisis, me quedaban un par más para esta semana, y la próxima tenía que llevarle todo a mi doctora. Desde ese día nos habíamos unido diez veces más, Mateo estaba muchísimo más ilusionado, había empezado a hablarle a mi intento de panza, y yo ya no era yo, sino que era ''ustedes'', es como si ya se hubiera hecho la idea de todo lo que se nos venía, y aunque económicamente íbamos a tener que reajustarnos, eso parecía lo de menos.

Ahora nos encontrábamos recostados, cerca de la orilla, disfrutando del sol. A Mateo se le había ocurrido la idea de empezar a tirar nombres, para ver si coincidíamos en alguno, pero hasta ahora eso no pasaba, adivinen el porqué...

-No nena, no es joda....

-Si, claramente veo que no es joda ¿algún nombre de uno que no sea jugador de boca se te ocurre?

-Eh... ¿Paulo?- dijo con duda, apoyándose sobre su brazo derecho

-¿Paulo?

-Si, como Dybala...

-Listo, me rindo, ves que con vos no se puede...

-Pero vos dijiste que no sea jugador de boca... Dybala juega en la juve amor- argumentó aguantándose la risa.

- Sos un caso perdido- murmuré recostándome sobre él

-ay... pesas- se quejó, pero antes de que pudiera decirle algo volvió a hablar- Es chiste, no pesas nada tarada

-Idiota...

-Pero lo re amas a este idiota-susurró en mi oido, provocando una corriente a través de mi curpo.

-Mucho... idiota- murmuré antes de darle un beso, pero justo cuando estábamos por juntar nuestros labios, su celular comenzó a sonar.

-¿Qué pasó má?- dijo respondiendo- sí... no, no estaba... no, yo lo puse ahí... estaba arriba del escritorio... sí... bueno, dale, ahora voy.- cortó la llamada y me dio un rápido beso, no pude evitar sonreír sobre sus labios- Vamos a tener que ir yendo... parece que hay quilombo con la plata de las cuotas...

-Dale, no hay problema- respondí levantándome y extendiendo mi mano para que él hiciera lo mismo. Una vez parado, me tomó de la cintura y me atrajo hacia él, para luego abrazarme con fuerzas.- ¿Estás bien?

-Sí- murmuró con el rostro escondido en mi cuello y dejando un beso ahí- Te amo...

-Ay cuando te pones asi de trolo te amo tanto...

-callate tarada- respondió riendo y comenzando a caminar aun abrazado a mi.

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-Está raro boluda, no sé qué onda, pero está raro- dijo Micaela mientras cebaba un mate.

Después de la llamada de Juli, con Mateo volvimos al barrio, él se fue directo al teatro, parce que faltó plata de las recaudaciones y mi novio era el encargado del tema de los cobros y todo eso. Yo seguí mi camino y justo cuando estaba por llegar a casa, recibí una llamada de Mica diciendo que iba a estar con Abo en el río, tomando mate, si quería ir hasta allá. Así que acá estamos las tres, sentadas en uno de los tantos banquitos.

- ¿Y le preguntaste qué onda? - preguntó Abo, antes de darle un sorbo a su botellita de jugo, ya que no tomaba mate.

- Si, como veinte veces- respondió Mica alcanzándome el mate, yo negué- Dale boluda, ¿vos tampoco tomas ahora? Tengo a dos taradas de amigas...

-Me da acidez- respondí entre risas- Dejanos en paz.

Mi amiga suspiró y se tomó el mate antes de seguir hablando. Estaba incomoda, no me gustaba mentirle, actuar como si no supiera nada... ojalá pudiera decirle lo que se sobre Camilo, pero no me pertenece, es algo que tiene que hacer él, me dijo que lo iba hacer él.

-Bueno, como decía, le pregunte mil veces ya, siempre me esquiva, me cambia de tema, o se va... no quiero dudar, pero no puedo no pensarlo...

-Lo cago a palo si eso pasa- dijo Abo

-No te está cagando boluda- respondí firme, si al menos podía darle seguridad en este sentido, lo iba a hacer- es Camilo... es imposible, te ama más que a nada.

-Lo cago a palo igual- aseguró Abo, provocando la risa de las tres.

-Ay las amo tanto- dijo Mica regalándonos una sonrisa

-Y nosotras vos... aunque te falle un poquito- murmuró Abo antes de llevarse la botella a la boca.

-Hablando de fallas- dije mirándola- ¿Qué onda vos con Ramiro?

Que ondaa, espero que todo más que bien.

Cortisimoo, lo sé  y ni siquiera estoy segura de si se parece a la idea que tenia en mente, peero peor es nada. Perdón pero la facultad me está consumiendo las pocas neuronas que me funcionaban pero prometo meterle porque tengo un borrador de todos los capitulos, el tema es la inspiración de escribirlos... así que me gustaría que me digan si les está gustando, si hay algo que no, o algo que no entienden,  alguna critica constructiva, si quieren votar tampoco me enojo...  tamos trabajando pa ustedes, ahre.

bueno, besos y nos leemosss