• house of cards (s2) | kth •

once

♥ · ♦ · ♣ · ♠

- Hey... - Taehyung me agarró de los hombros mientras me alejaba de su pecho lentamente. - ¿De verdad estás bien? ¿No te has hecho daño? - me miró preocupado.

Asentí moqueando, evitando mirarle.

Escuché un breve suspiro por su parte y se agachó un poco hasta llegar a mi altura.

- Vamos a sentarnos, ¿te parece bien? - sonrió gentilmente.

No entendía por qué de repente se comportaba así conmigo, pero conseguí calmarme y asentí de nuevo mientras miraba hacia otro lado tímidamente limpiándome las lágrimas que aún no habían llegado a caer, haciéndole sonreír.

- Vamos. - me agarró de la mano delicadamente y me guió hasta llegar a un banco. - Siéntate.

Obedecí y me senté a su lado, dejando un poco de espacio entre los dos.

- Hana... - susurró en medio del silencio. - Lo siento.

Apreté los puños que agarraban mi falda, arrugándola. Lo está volviendo a hacer, me estaba volviendo a molestar.

- Soy consciente de que todo esto es por mi culpa, lo siento mucho, de verdad.

- ¿Por qué lo hiciste...? - Susurré haciendo que Taehyung me mirase después de escuchar de nuevo mi voz. - ¿Por qué... por qué fingiste que no me conocías...?

Taehyung bajó la mirada y se mordió el labio.

- Quería hacerlo para protegerte, pero... - suspiró entre sus palabras. - parece ser que no ha servido de nada. - susurró cabizbajo.

- ¿Y no intervenir mientras Hye hacía de las suyas también era para protegerme? - pregunté con rabia apretando el agarre de mi falda.

Tardó en contestar, pero asintió lentamente, evitando mi mirada.

- Lo siento... - repitió de nuevo.

Resoplé con fuerza rodando los ojos. Me estaba hartando de esa palabra.

- Olvídalo. - me levanté del banco y fui a coger mis cosas del suelo mientras Taehyung solo me observaba.

- Tu madre no era la encargada de limpiar mi casa. - me detuve por sus palabras. - Nuestras madres eran amigas.

Me giré a mirarle con una ceja elevada. ¿Qué está diciendo ahora?

De pronto se levantó y guardó sus manos en sus bolsillo mientras se dirigía a mi dirección, plantándose delante mía.

- Mi madre tenía cáncer. Mi padre estaba siempre ocupado con negocios, por lo que no podía ocuparse de ella, y llamó a su mejor amiga, tu madre. - mantuve silencio mientras le escuchaba. - Tu madre al saber de las noticias de mi madre, decidió dejar el trabajo y cuidar de la mía. Era quien se encargaba de cuidar de mi madre, no de limpiar casas de gente rica.

Estaba tan confusa que no sabía qué decir. Era muy pequeña para saber de todo esto.

Taehyung bajó la mirada y agarró de nuevo mi mano.

- Lo siento mucho... si mi padre no nos hubiese forzado para irnos al extranjero por sus negocios familiares, tu madre no habría perdido el trabajo.

Me mordí el labio. Estaba empezando a ver borroso de nuevo. Las lágrimas estaban volviendo.

- Es tarde pero... lo siento mucho por tu pérdida, Hana. - susurró mirándome a los ojos. Su mirada transmitía sinceridad.

Bajé la mirada. Esta vez no podía soportarlo, mis lágrimas comenzaron a caer. Taehyung me abrazó de nuevo, pero no me aparté ni me quejé. Necesitaba ese abrazo, una vez más.

- Taehyung... - susurré sin soltarle. - ¿Qué tal está tu madre?

Tardó un rato en contestar, pero escuché de nuevo su voz tranquila.

- Ya está descansando... - susurró manteniendo calma.

Le abracé con más fuerza mientras cerraba apretando los ojos, soltando cada gota de lágrima. Él debe de haberlo pasado igual de mal. Me sentía mal de no saber cómo reconfortarle, sentía que era la única que recibía apoyo de su parte.

- ♣ -

- ¿Enserio? - pregunté incrédula mientras escuchaba atentamente a Taehyung. Éste asintió mirando al cielo. - ¿Tu padre acaso tiene corazón? ¿Cómo puede obligar a su propio hijo a casarse con alguien? ¡No sois ni mayores de edad! - estaba muy sorprendida.

- Lo sé... - suspiró cerrando los ojos.

Me quedé observándole apenada. Me he comportado como una insensible con él. Él también tiene muchos problemas que giran en torno de Hye.

- ¿Qué harás? ¿Aceptarás? - pregunté preocupada.

- Pues claro que no.

- Pero Hye tiene muy seguro que sois pareja.

- Solo dejo que haga lo que quiera. De momento no puedo hacer nada, no tengo ningún derecho siendo un estudiante de secundaria, pero cuando me haga mayor de edad, me las apañaré.

- ¿Tienes algo pensado? - éste negó la cabeza. - ¿Entonces qué tienes tan seguro? - elevé una ceja.

- No sé. - rió por lo bajo haciéndome rodar los ojos. - Sólo sé que tengo una cosa segura.

- ¿Ah sí? - pregunté comiéndome el helado que me compró después de saltarnos las clases. - Taehyung asintió mirándome.

- Tengo seguro que Hye no será la chica con la que me casaré.

- Obvio, es lo que se supone que estás evitando, ¿no?

- Me casaré contigo, Hana.

Empecé a toser casi atragantándome con el helado mientras Taehyung me observaba en silencio.

- ¿¡Qué tonterías dices ahora!? - exclamé sorprendiéndole.

- ¿Por qué reaccionas así? - me miró confuso.

- ¿Y qué hago? ¿Me río? ¿Aplaudo?

- Pero si siempre te lo decía. - ladeó la cabeza pensativo.

Resoplé mientras me calmaba un poco.

- Yah, éramos unos críos.

- Pero lo decía enserio. - dijo mirándome de nuevo seriamente.

Parpadeé varias veces, notando cómo mi temperatura subía de la vergüenza. ¿Qué diablos le pasa?

- Yah, ¿no recuerdas lo que pasó el primer día? Bueno, qué digo, el primer día y todos los días que solamente he respirado tu mismo aire. Hye no me ha dejado vivir ni un segundo, ¿por qué crees que estoy tomando antidepresivos? - resoplé.

Taehyung bajó la mirada apenado. Genial, ahora le he hecho sentir culpable.

- Lo siento. - suspiré viendo su reacción. - No quería hacerte sentir culpable, es solo que-

- Déjame protegerte. - me cortó, sorprendiéndome de nuevo. Elevó la mirada hacia mi. Me miraba fíjamente a los ojos, acercándose cada vez más a mi. No pude alejarme, ya que estaba al borde del banco. - Esta vez... - susurró bajando la mirada hacia mis labios. - No fallaré.

Elevó su mano hacia mi mejilla acercándose a mi. Cerré los ojos involuntariamente al notar sus labios rozando los míos.

♥ · ♦ · ♣ · ♠

Lo siento por no haber podido actualizar en un tiempo. Empecé las clases por fin pero tampoco han sido buenos días para mi.

Sé que no viene a cuento, pero desearía desahogarme un poco. Mi relación que duró 4 años se acabó hace poco, y no tenía ganas de actualizar, espero que entiendan.

Intentaré actualizar más seguido la próxima vez, un beso :)