Carta LX

73 6 0
                                    

Querido Nick.

Nada cambia.

Me siento aún mal.

Pero como sí eso no fuera suficiente.

Hoy en tu estado pusiste la inicial de Ángela.

Y ella puso la inicial de tu nombre en su estado.

Estás con ella.

Me dolió mucho.

¿Por qué es así?

¿Por qué me duele?

Como me gustaría que no me importara nada que viniera de ti.

No se porque te sigo queriendo.

Lloré de impotencia

Y mi hermana entro en mi cuarto y me pregunto que había pasado.

le conté lo que vi.

Me pidió que me calmara.

Me dijo que eras un mal chico.

Que los chicos siempre mentían.

Ella es menor que yo.

Aún así le cuento todo.

Ella te odiaba.

Me consoló.

Sólo quería quedarme en mi cuarto y no salir jamás.

Mi hermana me convenció para ir al gimnasio.

En cuanto pusieron sus estados me hablaste.

Me dijiste "Noraaaa"

Te respondí "dime"

Me preguntaste como estaba.

Te dije que bien.

Me preguntaste si te odiaba.

Me dio tanta cólera.

¿Que más podía hacer?

¿Reclamarte?

¿Reclamarte porque nunca me quisiste?

¿Reclamarte porque te alejaste de mi?

Ya no podía más.

Esto es lo que hacia falta para odiarte de verdad.

Y ahora si te odio más que nunca.

No te respondí nada.

Te eliminé de mis contactos.

Llore mucho esa tarde.

Sentí como mi corazón se rompía.

Pasaron unos días y fui a casa de Valeria.

Y  le dijiste que me mandabas saludos.

Le dije que no te respondiera nada.

¿Por qué eres así?

No te quería dar pena.

Y ya no había nada de que hablar.

Solo esperar a que el tiempo pasara.

Y que todo estuviera bien.

Estaba hablando con Cecilia, le conté una parte de lo que sucedió.

Me dijo que siguiera hacia adelante y que ya todo pasaría.

Cartas a NickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora