El conjunto de vivencias colorean tu corazón hasta alcanzar una gama determinada, la cual, definirá todos tus pensamientos, sentimientos y preferencias. Para poder comprender el color debemos entender de dónde proviene.
¿Qué es lo que reside en el s...
Tipo: fanfic one-shot Pareja: HuiJae/MinJun Publicado: 20-11-2020 Corregido: ... Número de palabras: 1542
Basado en Un tonto y un gran tonto del manga Doukyuusei de Asumiko Nakamura
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— ¿HuiJun-ssi?....
Duele...
Colgué de nuevo la llamada antes de que dijera otra palabra y me dispuse a bloquear aquel numero de mi celular. Tiré con coraje aquella botella al contenedor y me dispuse a alejarme de la gente. Estaba hostigado, comenzaba a sentir mareos y sobre todo, estaba triste.
Duele...
Llegué a un parque y me senté sobre el césped a lado de los columpios, esperando a que el mareo pasara y la fatiga por caminar tanto se disipara. Nunca me había sentido así de desorientado y débil, como frágil.
— Aun puedo terminar con esto... — dije al aire. — Todavía puedo terminarlo y podré olvidarlo. — me recosté observando el cielo de un azul oscuro y profundo, sin estrellas. Las lágrimas comenzaron a fluir lentamente y a media voz continué: — Aún puedo pretender que no pasó nada.
Solté un sollozo y limpié mis lágrimas con coraje. No podía llorar, no así, no por él.
Duele...
Mi teléfono volvió a sonar con un tono distinto al usual, significaba un número desconocido y sin pensar contesté.
— ¿Dónde estás? — la voz desesperada de MinJae hizo que separara el aparato de mis orejas, estaba gritando. Mi estómago sintió un cosquilleo al escucharlo y al pensar que estaba buscándome. Mis sentimientos me traicionaron y volvía a acercarme el aparato a la cabeza.
— En algún parque, junto a los columpios... — colgué rápidamente y solté otro sollozo.
Él no podía verme así, traté de de calmarme, respiré profundo y me recargué sobre mis codos para poder levantarme, pero me congelé al escuchar mi nombre.
— ¡HuiJun.ssi! — MinJae estaba corriendo hacia mi, en ese momento no pude moverme, y él se lanzó sobre mi envolviéndome en un abrazo apretado, casi tirándome de nuevo sobre el césped.
— Suél-tame. — le ordené sin fuerzas. Sentí su cabeza, que estaba escondida entre mi cuello y hombro, negar. — ¡Suéltame!
— Nunca. — Su cabeza se levantó y movió de posición una de sus manos colocándola detrás de mi cabeza, en mi nuca. Su rostro se acercó lentamente al mío y retrocedí, pero su mano me lo impedía, poco a poco él fue tomando terreno hasta besarme.
Y se sentía diferente. Al principio me negué, lentamente intenté retroceder, pero MinJae no me daba tregua, poco a poco quedé recostado de nuevo, con su manos debajo de mi cabeza para amortiguar el golpe. El beso era intenso, parecía que quisiera fundir su boca en la mía. Su lengua comenzó a invadirme y yo la acepté con el sentido nublado, el dolor se había disipado por un momento y un sentimiento reconfortante me invadió junto con un calor más intenso del que ya sentía gracias al alcohol en mi sistema.
