La ultima hora de vida del recluta Park Chan Yeol, estuvo surcada por el temor y la incertidumbre, era jueves, era el día en que tenía una cita con el cabo. Cada jueves se reunían una hora antes de que los reclutas se levantaran, para que el viejo pudiera desfogar sus pasiones libidinales en su cuerpo mientras gemía como un cerdo.
Hacia frío la neblina sobre el pastizal anunciaba más que el frio, anunciaba la tortura, anunciaba el dolor que parecía no acabar. Chan había hecho todo lo que se le indicó y no dejaban de meterse con él.
Tocó la puerta del despacho, dos golpes sobre la madera.
—Pase.
Chan tragó con fuerza la inexistente saliva en su boca y se adentró en el lugar.
—El teniente esta perdiendo la paciencia.
Esto sorprendió al recluta, por lo general la sesión comenzaba religiosamente con un "Soldado atento a lo que hago con mis manos"
—¿No tiene información del recluta que activó la alarma?
—Señor, no señor.
Plaf
La mejilla caliente de Chan se encargó de confirmarle que había recibido un fuerte golpe.
—Mira, no nos colmes los nervios, tienes que averiguar y traer la información, esto no se puede quedar así ¿o fuiste tú?
Chan le hubiera gustado ser tan noble como Jimin, realmente lo admiraba... él solo supo esconderse y temblar bajo las mantas al ser conocedor de lo que les iba a suceder a esos reclutas en la oficina del teniente.
—No, no fui yo.
El cabo se lamió obscenamente los labios—quizá toque darte un pequeño incentivo para recordar.
El cabo giró el cuerpo de Chan Yeol y le bajó rápidamente los pantalones junto con su ropa interior, el recluta automáticamente comenzó a llorar como se le había hecho costumbre, las veces que el cabo lo había penetrado, lo hacia de forma totalmente brusca y animal, al principio sólo lo hacía y ya, ahora se le daba por un asqueroso juego previo que era peor de intolerable, Chan sentía que las manos de ese energúmeno animal quemaban cada vez que se deslizaban por su cuerpo.
Sintió como lamía el lóbulo de su oreja y empezaba a friccionar su erección contra sus nalgas, Chan trataba de reprimir el vómito y las ganas de morir.
Y ¿Qué mas da si moría?
Ya tenía la amenaza de una sentencia social y penal encima... ¿Qué más daba?
Lo pensó, lo considero unos minutos mientras sentía como el cabo refundía sus manos por debajo de su ropa, el asco siendo más fuerte que su cordura.
—¿A usted le gustan los hombres Cabo cierto? si... usted es marica.
El nombrado detuvo su ritual sobre el cuerpo de Chan abruptamente.
Quizá hubiera sido mejor detenerse, quizá estas palabras golpeaban tan fuerte el ego de aquel hombre que lo dejaría ir, pero Chan, él ya estaba roto y quería cortar con sus pedazos al ser que se atrevió a hacerlo trizas.
—¿por qué se detiene? se nota que lo disfruta.
El primer puñetazo llegó certero en la mejilla del recluta, que tambaleó hacia un lado y escupió parte de su sangre, brindándole una sonrisa rojiza al cabo—¿Por qué se asusta? no que los que se asustan son maricas.
Una patada en las costillas lo silenció un momento.
Después de toser un poco Chan volvió a hablar—Puede pegarme todo lo que quiera, incluso hasta matarme, pero eso no va a quitar el hecho de que le gustan los penes, que es un closetero de mierda.
ESTÁS LEYENDO
Articulo 92.6 [Taekook]COMPLETA
FanfictionLos rumores sobre la orientación sexual homosexual de Jeon JungKook desataran un caos mientras presta su servicio militar obligatorio, sumergiendo en esta tormenta a otro recluta Kim Taehyung. -"Si...conozco a JungKook del instituto, dicen que cuand...