Capitulo 15: El grupo de Podencos

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Dylan: *Escribiendo* Salí del callejón con mi inseparable bolso, con el la vestimenta de G-12 puesta. Había dicho en voz alta para mis adentros «Andando», y me di cuenta de que se escuchaba mi voz común y corriente. No me quisiera imaginar lo que pasaría si llegaba a hablar con cualquier persona, y pudieran identificarme por la voz. Encendí nuevamente el modificador y sentí algo de alivio al comprobar que podía oír la voz metálica, característica de G-12. Acto seguido seguí caminando, hasta el punto de encuentro. Mientras avanzaba, iba preguntándome que hubiera pasado si Da Vinci no me hubiera descubierto desde un principio. Creo que muchas cosas: Tal vez ella hubiera ido hasta donde estoy yendo yo ahora. Quizá hubiera ido con la misma pintura de G-12 o quizás no. ¿Pero ello me hubiera vuelto menos precavido respecto a las excusas, y susceptible a que varios descubran mi identidad? Sinceramente, no lo sé, y creo que ni yo ni el lector de este diario, nunca lo sabremos...

*flashback*

(G-12 había llegado a la convención de arte, situado en un parque, que quedaba algo distanciado de la casa. Y aun así, esas tres cuadras y media no se comparaban a la distancia que había desde el 101 hasta el pabellón de poesía. Había llegado hasta una fila algo corta y calmada. Le pareció escuchar comentarios de sorpresa detrás de él, diciendo: «Es el.» Al voltearse, pudo comprobar que si se referían a G-12. Un grupo conformado por podencos.)

G-12: Que tal.

1er Podenco: ¿Tu eres el poeta anónimo?

G-12: Correcto. (Vaya, Dav tenía razón, me hice noticia.) Seguro se preguntan qué hago aquí.

2do Podenco: ¿Eres artista también?

G-12: No, solo soy poeta. Le estoy haciendo un favor a una amiga: Da Vinci Dálmata.

3er Podenco: ¿Quién?

G-12: Bueno, no importa. Seguro viene la próxima vez.

(Al apenas terminar de articular aquellas palabras, Entregó la pintura que iba a ser expuesta en la convección, saliendo de la fila. )

G-12: Fue un placer conocerlos, chicos.

*fin del flashback*

Dylan: *Escribiendo* Aunque realmente me agradaron aquellos podencos y hubiera querido conocerlos siendo Dylan, tenía que volver a casa. Recordé también que el día de ayer—Domingo, 3 de mayo de 2020— fue cuando Dylan «conoció» a Tasha. Aquel día, dicho encuentro se hizo posible porque Dolly era quien tenía que cuidar a los cachorros, por definición hoy me tocaba a mí, y no tendría tiempo para ver a la Terranova. Era entonces preferible que le avisase de mi inconveniente, antes de que se quedara plantada. Al llegar hasta su casa y tocar su puerta tuve que esperar unos segundos para que abriese. Aun cuando ella conocía mi identidad, me llamaba G-12. A diferencia de Da Vinci, me llamaba según el tipo de persona que estuviese siendo, e inclusive cuando no hubiese nadie. Me alegraba que realmente estuviera cumpliendo su promesa.

*flashback*

G-12: Hola, Tash... quería avisarte que puede que no vaya a aparecer como G-12. Hoy me toca a mi encargarme de la «manada» (1)

Tasha: Descuida, lo entiendo.

G-12: Oye, por cierto... Realmente agradezco tu discreción... *se quita la máscara* Me alegra realmente haber confiado en ti.

Tasha: *sonríe* Gracias... *desvía la mirada* G-12, hay alguien detrás tuyo.

(Dylan rápidamente se pone la máscara otra vez, asustado y Tasha soltó una ligera risa)

Tasha: Estoy bromeando, somos los únicos despiertos.

G-12: *risita* Lo admito, si me lo creí... Ya tendría que volver. Bueno, entonces Dylan te verá en el parque hoy. Adiós. *se va*

*fin de flashback*

Dylan: *escribiendo* Imagino que Tasha habría entendido el juego de palabras. En fin, sigamos con el relato.

...

Dylan. *escribiendo* Había llegado a casa, todo parecía normal. Resultaba que todos en la casa ya estaban en el comedor. No tardé mucho para ir hasta la casa del árbol y ocultar la vestimenta en donde siempre. Concluido el almuerzo, Dolly había soltado la palabra clave, intencionalmente para que me cayesen encima los cachorros. Aunque si llevaba razón, pues ya era momento de ir al parque. Al llegar, le dije que iba a hablar con alguien, y no se le olvidó que era mi turno para encargarme de los cachorros.

*flashback*

Dylan: Bueno, al menos déjame que traiga a alguien. *le hace señas a Tasha*

(Fue en cuestión de segundos para que la terranova se acercase.)

Tasha: Hola Dylan.

Dolly: *cara picara* O, ya sé de qué va esto.

Dylan: Ah, casi lo olvido, Tasha, ella es Dolly, mi hermanastra.

Tasha: Hola.

Dylan: Oye, Dolly, ¿y eso que ahora no has ido con tus amigas? ¿O es que tú quieres cuidar a los cachorros hoy?

Dolly: Nop. Ya me voy. Un gusto Tasha. *se va*

Dylan: Ey, ¿te cuento algo interesante?

Fin del capitulo

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