Noche de niños. Penny X Leon (Brawl Stars)

Capítulo 13.

Luego de distraerme con directos de Pikamee y juegos, sigo.

Ambos niños ya se encontraban en la mesa, uno al lado del otro.

Era una mesa ovalada, mediana y de madera, decorada con un mantel blanco y nada más.

Penny estaba temblando, de un lado tenía al chico que le gustaba y por el otro a la "madre" del chico que le gustaba.

Leon jugaba nerviosamente con sus dedos, los juntaba, los tronaba, los peñizcaba. Tenía muchísimo miedo, ¿que podía pasar? Para el, todo lo malo que pudiera pasar pasaría.

El almuerzo ya estaba servido, pollo frito, arroz y algunas verduras.

Mientras comían el chico tenía una meta muy clara. "Por lo que más quieras no te manches", ¿quedar en vergüenza frente a Penny? Si eso llega a pasar no saldría de su cuarto jamás.

El almuerzo estaba siendo muy callado y tranquilo, quizá demasiado aparte, esto no era lo que esperaba Leon. Pensaba que Pam haría millones de preguntas e insinuaciones.

Pero su "madre" estaba como en cualquier día, tranquila mientras disfrutaba su almuerzo. Ni siquiera parecía que le importará la presencia de la chica.

Por la mente de la pirata apareció una idea loca, ¿y si se declaraba a Leon ahora? Aquí en frente de su "madre" en pleno almuerzo.

Río para sus adentros, era tan estúpido pero por alguna razón quería hacerlo. ¿Y si Leon decía que si? Tan fácil sería y se convertirían en novios.

¿Pero que significaría eso? ¿Qué diferencias había comparado a sólo ser amigos? La joven más o menos sabía la respuesta.

Se tratarían de forma melosa, podrían besarse, decirse cosas lindas, tomarse de la mano.

Todo eso sonaba tan hermoso y mágico, tanto que Penny estaba roja, y con una pequeña sonrisa. La idea de ser novios la había calmado y alejado del mundo.

Mientras estaba siendo feliz, el arroz y pollo que estaban en su tenedor cayeron y ensuciaron su ropa.

-Oh, te manchaste querida.

La voz de Pam sacó a la pirata de su lugar feliz.

-No te preocupes, yo te limpio.

La mujer se acercó y empezó a limpiar con un pañuelo su camisa decorada con rayas azules.

-¿Como te manchaste? Supongo que estabas pensado en otra cosa...

Esas palabras captaron la atención de la joven, ¿Estaba insinuando algo? ¡Obvio!

¿Ya había descubierto que le gustaba su "hijo"? ¡Si! Penny sintió como su respiración se detuvo por unos largos 3 segundos.

-Gracias por la comida mamá.

Leon ya había terminado, quizás demasiado rápido pero la joven estaba agradecida.

-Gracias por la comida.

Con sus nervios colgando de un pelo agradeció por la comida, aunque apenas había comido.

-¿No vas a comer más? Apenas has comido.

-Bueno es que...

Penny tenía que pensar algo y rápido, una excusa creíble para una mujer muy astuta.

-Estoy a dieta...

La manera en que la pirata lo dijo sonó a mentira. Pero Pam lo aceptó y dejó que se fuera.

Penny observó a la robusta mujer un momento, no le había creído pero aún así la dejó en paz. Ya era obvio que se había dado cuenta de le gustaba Leon.

Afuera de la casa ambos niños no sabían que hacer y tenían mucho día por delante.

-¿Qué es lo que sueles hacer después de comer?

-Dormir.

La pirata esperaba algo más... interesante, aunque tampoco sonaba mal, dormir con él, quizás hasta abrazados.

-¿En que estas pensando?

Penny tuvo que bajar de su nube, no le iba a decir la verdad, tenía una reputación que mantener y una buena imagen que dar.

-Nada importante, ¿y donde duermes?

-Donde se pueda, a veces en mi cama o abajo de uno de esos árboles.

-No creo que esos árboles secos sean buenos para una siesta.

-Ya, pero me gana el sueño.

Leon le hizo una seña para que lo siguiera, tenía el lugar perfecto para dormir junto a Penny.

Detrás del hogar de Pam había una enorme hamaca, tan grande como para dos niños o Pam, además tenía sombra.

-Se ve bien.

Con mucha impaciencia el joven subió a la hamaca y cerró sus ojos.

-Acá estaré si me necesitas, no creo que quieras estar ahí parada y verme dormir.

"Quizás" dijo Penny en su mente, obviamente lo iba a acompañar ya que la hamaca era suficiente para ambos.

Sin decir nada, ella también subió a la hamaca y se acomodó. Estaban un poco pegados pero no importaba.

Ambos niños estaban en completo silencio pero sus mentes y corazones estaban explotando miles de veces.

Sentían que el mundo era diferente y que ellos eran iguales. Penny sonreía y Leon temblaba.

"Quiero besarte" Nunca creyó que algún día una chica como ella diría eso, pero es lo que sentía, si pudiera besarlo, un suave beso en la frente.

Sería tan feliz

-Oye Leon.

-S...Si?

-Recuerda bañarte, apestas.

Ohaoooo, hasta aquí el capítulo, debo recordar poner una canción luego, ya no pongo nada porque me demoro mucho y el capítulo se retrasa más, espero acordarme Jsjsjs.

Sin nada más que decir

Arrivederci.

-Random