-¡Luke, vamos a llegar tarde!- le grite apoyada en su furgoneta negra ya casi destrozada.
Quedaban diez minutos para ir al instituto y Luke estaba desayunando todavía. Para todo era muy lento y siempre muy seguro de sí mismo. El había decidido (como casi todas las mañanas) venir a desayunar a mi casa y luego llevarme al instituto en su coche. Luke ya tenía los dieciocho años así que, según los cumplió, decidió sacarse el carnet de conducir. Pero yo aun tenía diecisiete. Por lo tanto, iba al instituto en autobús, andando o en el coche de Luke.
-Ya estoy- le oí decir desde detrás de la puerta de la cocina.
Cuando salió de la casa tenia la boca hinchada por los cereales que todavía no había engullido, y alguna que otra gota de leche le resbalaba por las comisuras de la boca.
-Toma, guarro...- Le di un clínex que guardaba en mi bolsillo y me sonrió burlonamente cuando extendió la mano para recogerlo.
Nos metimos en el coche y Luke condujo lo más rápido que pudo para no llegar tarde al instituto. La verdad es que prefería llegar tarde y no tener un accidente de coche, a llegar puntuales pero con posibilidades de muerte en el intento. ¡Luke conducía como un loco! No sé cómo le pudieron dar el permiso.
Por fin llegamos y percibimos que todavía había alumnos entrando en la escuela. Nos despedimos y cada uno fuimos a nuestra aula. Las clases se me pasaron demasiado lentas (en la hora de Biología casi me dormí y me tuvieron que llamar la atención). Luke me dejo en casa para luego irse, tenía ensayo con la banda. La verdad es que me gusta mucho el estilo de la banda de Luke, era punk, rock... acorde con mis gustos.
Pase toda la noche pensando en Michael. Todavía no asimilaba que me hubiera dejado para irse con un grupo que el mismo odiaba en los tiempos que andábamos juntos. El fue mi mejor amigo, antes de conocer a Luke. Éste siempre me advertía de que me anduviera con cuidado. Cuando yo quedaba con Mike, Luke se comportaba de forma extraña, siempre andaba terco con él.
Luke veía mal que yo siguiera siendo amiga de Mike (después de todo lo que me hizo) ya que él pensaba que me utilizaba para sus bienes. Pero yo no le hacía mucho caso. Era mi mejor amigo, sí, pero había cosas que decía sin sentido. Había veces que pensaba que estaba celoso. Pero no entendía el por qué.
Ese mismo día había pensado en ir a casa de Luke a ver unas películas y a quedarme allí a dormir. Era viernes, así que mis padres no se opondrían al plan. O eso creía.
-Mama, Luke y yo hemos quedado en ver unas pelis que ha alquilado y, ya de paso, quedarme allí a dormir- la dije a la hora de comer.
-Es viernes así que no creo que haya problema. Pregúntale a papa.
Al final me dejaron, así que decidí mandarle un mensaje a Luke afirmándole que me dejaban y preguntarle a qué hora quedaríamos.
"Luke, ¿a qué hora voy a tu casa? Llevo yo las palomitas."
"Vale." Contesto enseguida. "Pues a las 19.30 ven a casa :)"
Luke.
"Ok, allí estaré. Bss."
Eran las cuatro aun, asique me tumbé en la cama y me puse a jugar con el móvil. El tiempo se me pasó volando, y cuando reparé el móvil, eran las seis y cuarto. Así que decidí darme una ducha, preparar la mochila que llevaría para la noche y la caja de palomitas para hacerlas allí y comérnoslas calientes.
Muchas veces iba a casa de Luke a dormir. Era mi mejor amigo y el único que estaba ahí realmente cuando lo necesitaba. También tengo una mejor amiga, Alexis, pero ella es un poco pasota. Le gusta mucho ir de fiesta, emborracharse, fumar a escondidas de sus padres, tener sexo con cualquier chico mono que se le cruzara en medio... Yo esas cosas no las llevaba bien. Era muy tranquila y pacífica, y prefería alejarme de de ese mundo lo mas que podía. Así que gran parte de mi vida lo pasaba con Luke.
Justo antes de irme me sonó el móvil que estaba en el bolsillo trasero de mi pantalón:
"¿Si?" Pregunté.
"___, soy yo, Alex."
"Hola, ¿Qué tal?"
"Bien. Era para decirte si te apetecía dar una vuelta al centro comercial."
"Lo siento, ya he quedado con Luke, vamos a ver unas pelis... Pero si quieres ven, no creo que le importe que vayas."
"No gracias, llamare a Kate"
"Vale, ya lo siento." Repetí.
"No pasa nada boba, pasadlo bien, adiós."
"Adiós, Alex." me despedí de ella. Sabía que no la molestaría que no quedara con ella ya que tenía muchos amigos con quien pasar la tarde.
Mire la hora y se me estaba haciendo bastante tarde. Así que cogí la mochila, salí de casa no sin antes despedirme de mis padres y me encamine hacia la casa de Luke. El vivía a veinte minutos de mí, me tenía que dar prisa si no quería que Luke me echara la bronca cuando llegara.
Eran justo las siete y media cuando toqué el timbre de su casa. La puerta se abrió dejando ver a un Luke despreocupado con un pantalón de pijama y sin camiseta.
-Tú más fresco no podrías ir ¿no?- le pregunté irónicamente.
-Si que puedo.- me contestó, y enseguida cogió la bolsa que llevaba en mis manos, la dejó en la mesa del salón y comenzó a bajarse el pantalón.
-¡Luke, era ironía!- le dije entre carcajadas.
-Ya lo sé... ¿Qué te creías?- me dijo con el ceño fruncido y con una media sonrisa. Esa que tanto me gustaba a mí. (Sabía perfectamente que era capaz de bajarse el pantalón). Se acercó a mí y me abrazó rodeando mis brazos y dejándome presa contra su pecho apretando bastante fuerte.
-Luke... no puedo... respirar- le dije con la respiración entrecortada.
-¡Ayyy! ¡Qué mona eres!- me dijo apretando los dientes y pellizcando mis mejillas.
-Y tú que tonto eres.
Nos reímos los dos por el comentario y nos apresuramos en preparar las palomitas y subir para poder ver cuantas más películas nos fuesen posibles. Pusimos la película de terror "Annabelle" para pasar un rato de miedo y nos tumbamos muy juntos en la cama. Cuando tenía miedo, Luke siempre bromeaba con mi aspecto de miedica y se reía de mi.
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Solo decir que gracias a todos vosotros por leer y que intentaré subir cada poco los capitulos.
Gracias de nuevo y espero que disfruteis de esta historia muuuuy interesante ;)
