38. Flexiones

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El obstáculo de 'gran hermano trasvesti' fue probablemente uno que no superarían. Mientras viejo Tang no estaba mirando, Liu Cunhao y los demás usaron la computadora de la clase para buscar faldas. "¿Que tal este? Hay encaje, por lo que se ve como una princesa... romántica y también bastante elegante".

Wan Da: “Vamos con este traje de sirvienta. Este es bueno, parece seductor".

Luo Wenqiang, que no sentía afecto por esas cosas: "......"

“El de arriba. Desplazate hacia arriba." Después de la pelea con Xie Yu, He Zhao se inclinó y enderezó su silla con una mano, uniéndose a la diversión. "Ese no, desliza hacia arriba."

"¿Cúal?" Liu Cunhao se desplazó hacia arriba durante mucho tiempo y no vio ninguno que se ajustara a los requisitos, por lo que cuanto más se desplazaba, más confundido estaba. "Zhao-ge, ¿viste mal?"

Luego, He Zhao mostró su gusto por la ropa de mujer a toda la clase sin reprimirse en absoluto. “Tercero desde arriba, eso es bueno".

En la pantalla había un vestido tubo con estampado floral de peonías, una mierda de perro de rojo y verde.

"¿Por qué me miras así?" He Zhao se sentó en su asiento y miró la pantalla del proyector, luego a su compañero de escritorio. "¿Qué piensas? ¿No es buena esta?

Liu Cunhao y los demás quedaron en silencio conmocionados por este vestido insoportablemente hortera y el terrible sabor del libro de texto de He Zhao. Mil palabras se clavaron en cada una de sus gargantas.

Xie Yu dijo: "¿No tienes ningún sentido de esto en absoluto?"

He Zhao dijo: “Creo que está bien. Si esto fuera un juego de disfraces, este vestido definitivamente obtendría una buena puntuación".

"Un jugador de Renminbi no tiene derecho a hablar aquí".

"Créeme."

"Cállate."

“Mira estos colores, muy brillante…"

"¿Brillante?" Xie Yu se burló, extrayendo sangre a la vez. "Las tías del mercadillo tienen un sabor que deja a los tuyos ocho cuadras en el polvo".

Cuando Xie Yu terminó, Wan Da comenzó a aplaudir. "Bien dicho, exquisito."

Liu Cunhao: "Me gusta, Yu-ge".

He Zhao: "......"

Después de la farsa de He Zhao, las emociones de Luo Wenqiang habían pasado por una montaña rusa y las fuerzas opuestas se habían nivelado entre sí. Ahora sentía que el romántico vestido de princesa y el uniforme de sirvienta no eran tan difíciles de digerir después de todo.

Entonces Luo Wenqiang apretó los puños y soportó el dolor. "Entonces, entonces vayamos con el de hace un momento".

"¡Zhao-ge, bien hecho!"

Wan Da claramente había pensado demasiado en las cosas. Recordando lo que acababa de suceder, ahora pensó que He Zhao había buscado intencionalmente el atuendo más feo para provocar al representante del gimnasio. Le disparó a He Zhao con el pulgar hacia arriba y dijo con respeto: "Aún tienes los trucos más impresionantes".

"Aceptaré el cumplido". He Zhao estaba muy confundido, pero tenía bastante práctica para mantener una conversación. Después de decir eso, se inclinó cerca del oído de Xie Yu y susurró: "¿Por qué me elogia?"

Xie Yu apartó la cabeza, no estaba de humor para hablar.

Después de la última clase del día, todos hicieron las maletas y se prepararon para irse a casa mientras el estudiante de turno limpiaba la pizarra.

Dos amigos probl3m4t1c05Donde viven las historias. Descúbrelo ahora