Adore You [Yoonmin/omegaverse]

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La sorpresa podía verse claramente en el rostro del Alfa, quien sin más se fijó un poco más en su Omega, olió su cuello esperando sentir algún olor diferente, pero solo se encontró con el sutil aroma dulce de Jimin y el propio, ambos mezclados muy tenuemente.

— ¿Estás embarazado? pero ¿Cómo? — preguntó de nuevo al no percibir nada inusual.

— ¿En serio, Yoonie? ¿Quieres que te diga cómo? — dijo con ironía Jimin.

En ese momento el rostro de felicidad que reflejaba Yoongi, era tan indescriptible que ni él mismo sabía cómo reaccionar ante tal noticia, así que todo lo que hizo fue tomarlo entre sus brazos y besarlo hasta que a ambos les hizo falta el oxígeno.

Hacía más de un año que estaban buscando el embarazo, pero este simplemente no se había dado, especialmente porque al principio de su matrimonio, ambos habían acordado en cuidarse para pasar un tiempo juntos, pero después de que hicieran un viaje relámpago a visitar a Seokjin y Namjoon, y que Jimin se enterara de que el Omega mayor estaba en espera de su primer cachorro, tal parecía que la ilusión de la maternidad al fin había llegado para Jimin.

* * *

Pasados unos meses, cinco para ser exactos, Jimin no daba crédito al ver a Yoongi tan preocupado y tan atento con él, ni siquiera parecía el mismo Alfa. Ahora hacia todo lo posible por llegar a tiempo del trabajo, y pasaba casi todos los días a recogerlo a la tienda y cuando no, procuraba hablarle para saber si había llegado con bien a su hogar. Por supuesto que después de que Jimin tuviera al cachorro, él tendría que dejar de trabajar por un tiempo, por eso cada día hacía de su trabajo algo para recordar, y lo hacía con mucho gusto.

Una mañana de domingo, Jimin se despertó algo inquieto, ya que las idas al baño se estaban haciendo más frecuentes, al regresar a la cama comenzó a sentir algo inesperado, comenzó a sentir como el cachorro se movía en su interior y una patadita inesperada hizo que pegara un grito por la sorpresa, el cual, por supuesto alarmó de inmediato a Yoongi, quien aún medio adormilado se levantó.

— ¿Qué sucede? ¿Estás bien? ¿Le sucede algo al bebé? — preguntó con preocupación, al tiempo que se colocaba aún lado de Jimin.

— Estoy perfectamente, pero... — respondió el Omega, mientras una lágrima rodaba por su mejilla, entonces tomó la mano de Yoongi y la colocó en su vientre, para que él también pudiera sentir lo que estaba viviendo.

Nuevamente la mezcla de sensaciones en el rostro de Yoongi no se hizo esperar. Su rostro era todo un poema. Por desgracia el momento no duró mucho, porque en ese momento tocaron a la puerta principal y, el Alfa tuvo que ir a ver quién era a regañadientes. Sin embargo, al notar Jimin que Yoongi no regresaba, decido salir del cuarto para ver por él mismo, que era lo que pasaba.

— Yoonie, amor ¿Quién... tocó?

En la puerta se encontraba Yoongi con el rostro entre preocupado y enojado, ya que quien estaba en frente de él, era nada más y nada menos, que su madre.

— Ahora si va a decirme, ¿Qué está haciendo aquí, madre? — preguntó Yoongi.

— Vine a verte, que no es obvio — contestó ella, con su ya usual forma de expresarse.