Chamuyeros

parte 2/?

Manos en el fuego

Sentado en el patio de su casa Aran cerro los ojos a medida que la brisa golpeaba su rostro—¿Y? ¿Al final vienen o no? —preguntó, mientras abría su cuarta cerveza de la noche.

—Osamu y Suna vienen, pero se van con el hermano después. Terushima va a pintar*29 recién para el after*30 —contesto Ushijima.

—¿Y qué onda con el melli? Ya ni se lo ve —Aone se sumó a la conversación mientras acomodaba unas bolsitas de maní salado en la mesa en medio de la ronda.

—Se puso de novio con un amigo de un exgarche fijo*31 de este boludo*21—dijo Kita, señalando a Ushijima con la cabeza—, y si el novio se entera que anda por aquí le arranca los huevos*32.

—Esta como Kuroo y Tsukishima entonces—continuo Aone, sacando su ya sexta cerveza de la conservadora, aguantándose las ganas de reír—. Nos juntamos hace como dos sábados para ver el partido, y subí una foto a las historias de Instagram. No sé si pasaron dos minutos y ya los estaban llamando, porque el pelotudo*33 de Kuroo le había dicho a su novio y al novio del otro que se iban a comprar unos bifes de pollo que ya volvían.

La ronda se empezó a reír, y así continuaron compartiendo anécdotas, destapando cerveza tras cerveza, de a poco entrando en ese estado de liviandad previo a quedarse completamente inconsciente. Se detuvieron cuando Suna y su novio aparecieron por la puerta, cada uno con un pack de birras en la mano.

—¿Cómo andan los novios? —detrás de ellos apareció Kyotani, tomándolos desprevenidos, rodeo sus hombros con sus brazos— ¿Te tienen agarrados de los huevos*34 a vos también?

—Más gobernado*35 que su hermano no hay nadie —contesto Suna haciéndose a un lado para buscar donde sentarse. Antes abrió la conservadora y dejo caer las latas de cerveza que habían traído.

—Andan desconocidos*36 los pibes*37, ¿verdad? —Esta vez fue la voz de Kuroo la que los sorprendió, y más aun cuando Tsukishima apareció detrás de él.

—¡No lo puedo creer! ¡¿Te soltaron la correa*38, rubio?! —grito Ushijima, los demás riéndose por lo bajo

—Sí, si, hijo de puta —rezongo, y se abrió paso cargando una silla para acomodarse a su lado.

—De como que andan por acá—comenzó a decir Osamu, dirigiéndose a Kuroo— ¿Le dijiste a tu novio que fuiste a la pollería o algo?

—Anda a la mierda, un día que me mando una y ustedes no superan más.

—Sí, no me hagas acordar que me dan ganas de hacerlo cagar*39—acordó Kei, sacándose los anteojos y frotándose los ojos.

Ushijima metió la mano en uno de los bolsillos de sus jeans y saco un paquete de cigarros, le ofreció uno a Tsukishima que lo agradeció—¿Se van a quedar o tienen que salir a hacer de remiseros?

—Callate—suspiro dejando caer la cabeza para atrás mirando al cielo, el cigarro encendido colgando de sus labios—. Todo bien con los amigos de Yams, pero a los únicos que me banco*9 son a Sugawamura y al novio, y al pelirrojo ese.

—¿Pelirrojo? No sabía que había un pelirrojo en ese grupito.

—Tendou se llama —agregó Suna, uniéndose a la conversación— Es nuevo, llego a la facultad a finales del año pasado.

—No vayas a meter mano ahí, hijo de puta— dijo Kuroo, conocedor de lo que significaba la mirada avispada en el rostro de Ushijima—. Porque te cogiste a la mitad de los amigos de mi novio es que ahora tengo que venir acá a escondidas.

—Están buenos los amigos de tu novio —murmuro Kyotani mientras se metía un puñado de maní salado a la boca.

—Y tampoco se cogió a la mitad, tan ponedor*40 no es—Kita se carcajeo, esquivando la colilla de cigarro que voló en su dirección.