parte 1/?

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Un porro y un extraño

Las fiestas de Terushima siempre eran de lo que se hablaba al día siguiente, y los días siguientes a ese hasta que se hiciera otra. Por eso no era una sorpresa que luego de medio mes sin hacer una está estuviera explotada de gente. Al principio, según Terushima, la intención fue una reunión privada, para amigos cercanos, es decir, unas 50-60 personas, pero en algún momento de la noche las cosas se salieron de control. Ahora había un auto estacionado en la piscina, gente deslizándose por las escaleras encima de un trineo, e intentando sacar al patio un caballo que de alguna forma se metió al living de la casa... Y Tendou... Bueno, Tendou, terminó metido en una telenovela de bajo presupuesto.

...Horas antes.

—Dijo que van estar los chicos de vóley de la secundaria, y algunos compañeros de la facultad, pero nada más —fue lo que dijo Sugawara mientras se arqueaba las pestañas frente al espejo.

—¿Y le crees? —pregunto Oikawa, colocándose a su lado para hacer lo mismo. "Alguien que me delinee los ojos", se escuchó que murmuraron tras sus espaldas, pero ninguno de los dos se molestó en contestar, demasiados concentrados en terminar su maquillaje.

—A ver, veni —dijo Asahi haciéndole señas a Hinata para que se acercar—. No me pidas nada extravagante, solo se hace hacerlo de dos formas.

—Estoy en tus manos —murmuró mientras se paraba frente a él y cerraba los ojos.

—A todo esto, ¿y tu novio? —pregunto Sakusa que volvía de la cocina con una botella de agua fresca en las manos. Todos se dieron la vuelta, el hizo una mueca antes de aclarar— Tu novio, Kenma —el aludido, que estaba tirando en el sofá, despegó la mirada del celular. Los demás volvieron a lo suyo, desinteresados.

—Siguen en lo de Akaashi, seguramente se puso a boludear*1 con Bokuto y por eso todavía no vienen.

—¿Bokuto no tenía auto?— la voz de Nishinoya se unió a la conversación mientras un orgulloso Tanaka lo seguía a sus espaldas.

—Si, pero lo choco con... ¿Tanaka? —dijo interrumpiéndose Kenma.

Todos se voltearon a verlo, picados por la curiosidad. Se habían metido a la habitación de Oikawa hacia unos diez minutos sin haber dicho porque, y ahora ya sabían la razón, Tanaka se había sacado los jeans con los que tenía pensado ir a la fiesta y se había puesto una pollera negra que le llegaba una palma por encima de las rodillas—Si, si, ya se, estoy hermoso.

—Estas facherisimo*2 —apoyo Nishinoya palmeándole la espalda.

—La verdad que esto es re cómodo, si sabía eso hubiera usado polleras toda la secundaria.

—Todo divino pero te vas a cagar de frio*3, no está nevando pero es invierno —hablo Sakusa.

—En pleno baile no me va a hacer frío. ¡Ah! ¡Sácame una foto así se la mando a mi novia!

Sakusa sacó su celular rodando los ojos y siguió a Tanaka a donde él decía que era el mejor lugar de la casa para las fotos. En eso, los dos que habían estado frente al espejo decidieron que ya habían terminado, y así ya solo faltaban dos personas más para que finalmente pudieran irse. Como si hubiera sido invocado, el cuerpo de Yamaguchi entró a la sala.

—¿Y Tendou? —Fue lo primero que pregunto Suwara cuando lo vio llegar —¿No venía con vos?

—Ah sí, está en el auto de Osamu, con Suna y Atsumu.

—Justo terminamos, ¿iremos a entrar todos?—Oikawa se sumó a la conversación.

—Tsukki trajo su auto también, está afuera, así que seguramente si.

ChamuyerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora