Noche 3

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Que será ese éxtasis que recibo encarecidamente, ese placer de forma tan sexual al leer mis propias rimas mientras me rompo el alma, no más, dije, pero mientras más me negaba, más fuerte era ese sentimiento de hacerlo cual púber descubriendo el autoerotismo, necesito más, mucho más, tomando el lápiz y otra hoja mientras mi cerebro está en 0 y mi corazón toma el control de todo mi ser, una tormenta de recuerdos banales y triviales me acosan en la habitación, viendo los fantasmas del pasado mientras el lápiz se mueve por si solo escribiendo "Patético es el amor, pero hermoso es el odio que nos unió".

El diario del poetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora