Capitulo 33

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HyukJae se removió incómodo, y abrió los ojos. La suave luz de los últimos rayos del sol iluminaban el departamento, y un suspiro salió de sus labios.

— Al fin despiertas —La voz de Hae llegó a sus oídos, y fue en ese momento en que cayó en cuenta que se encontraba dormido en el abdomen del grisáceo.

— Lo siento —Dijo apartándose.

— Lo siento más yo —Se quejó entumecido — llevabas como tres horas dormido —Dijo.

— Perdona...yo en serio no quise...—.

— Está bien —DongHae le interrumpió — no te preocupes no estoy molesto —

HyukJae se levantó y le ofreció su mano al menor, esperando ser rechazado sin embargo grande fue su sorpresa cuando Hae tomo su mano.

— Gracias —Le dijo el menor estirándose.

— ¿Terminaste con tus cosas? —HyukJae le pregunto.

— Si, ya están —

— Supongo que entonces...ya te vas —El pelinegro lo miro por unos segundos y aparto la mirada, no podía verlo, no después de lo sucedido.

— No...en realidad no —Contesto el menor — me quedaré...si no te molesta —

— ¿De verdad? —Pregunto sorprendido — ¿no estarás incómodo? —

— ¿Incómodo? —

— Si —El pelinegro bajo la mirada a sus manos — ya sabes por estar cerca de un...asesino como y...—

El grisáceo coloco dos de sus dedos en sus labios.

— Shhh...no digas eso —DongHae negó con la cabeza y acaricio con ternura su mejilla — no eres ningún asesino —

HyukJae rio amargamente y tomo su mano apartándola de su rostro.

— Escuchaste a mi madre —Le dijo sin emoción alguna — soy el culpable que mi padre haya muerto...si no hubiese insistido tanto para que regresara, él no hubiese tenido ese accidente de auto...no hubiese muerto —

— No fue tu culpa —El grisáceo repitió — no lo es...—

— Mate a nuestro hijo —HyukJae apretó los puños a cada lado de su cuerpo — tú mismo lo dijiste...soy un monstruo, lo he sido desde que tengo 12 años —Aparto la mirada.

— No —Dijo con un nudo en la garganta —...no fue tu culpa, no eres el culpable de nada —DongHae tomo su rostro e hizo que lo mirara a los ojos — la muerte de tu padre fue un accidente, la muerte nuestro hijo también fue un accidente —Dio un suspiro — escucha cuando YongHwa me dijo que lo había perdido me sentí devastado, sentía tanta frustración y necesitaba un culpable, y estabas tú...me desquite contigo, te culpe por algo que no tenías culpa alguna porque si así fuese entonces ambos seriamos responsables —Sus ojos se llenaron de lágrimas — pero yo solo...te culpe sin ni siquiera ponerme a pensar en que también sufrías, porque...bueno era también tu hijo, perdóname —

HyukJae se le quedo viendo, realmente era precioso, le estaba pidiendo perdón aunque no lo mereciera.

— No merezco tus disculpas —HyukJae le dijo — no merezco ni siquiera tu compasión...soy un monstruo —

— Ya te dije que no lo eres, baboso —El grisáceo dijo rodando los ojos — juro que si lo vuelves a decir te golpeare con fuerza —Amenazo, haciéndolo reír un poco.

—Debí haber cuidado mejor de ambos —Dijo Hyuk — también discúlpame —

— Todo está olvidado...—DongHae limpio su rostro quitando cualquier rastro de lágrimas y embozo una suave sonrisa.

***•••***

HyukJae y DongHae caminaban sintiendo la suave brisa chocar contra sus rostros. Después de la plática habían decidido salir a cenar a algún lugar; el ambiente había estado bien, habían platicado un poco y no habían vuelto a tocar el tema sobre su bebé.

HyukJae se detuvo cuando estuvieron cerca del rio Han, el grisáceo lo miro.

— ¿Sucede algo? —

— Ven...—Tomo la mano del menor y lo llevo hasta un pequeño lugar alejado de las personas.

— ¿Qué hacemos aquí? —Le pregunto DongHae confuso — ¿piensas violarme y que nadie venga en mi ayuda? —Bromeo un poco.

— No se le puede llamar violación si la victima lo disfruta —Respondió HyukJae.

El grisáceo se rio, ese era el insolente mono deforme que había conocido. Miro sorprendido al ver una pequeña ¿lámpara? Lo miro más confundido que antes.

— ¿Para qué es eso? —

El pelinegro tomo su mano, y puso la lámpara blanca entre ellos.

— Es nuestro hijo —DongHae lo miro y sus ojos se cristalizaron — es nuestro pequeño rayo de luz, una que lamentablemente se extinguió demasiado rápido —Agrego con tristeza, el grisáceo apretó sus manos — quiero decir que a pesar que lo conocí tan poco...lo ame, y perdóname por no haber cuidado mejor de ti, bebé —

— Yo...quiero decirle que fue una de las mejores noticias que recibí, que lo ame aunque no lo llegue a conocer —Las lágrimas escaparon de sus ojos —...también me disculpo, mi rayito de luz...lo siento mucho por no haber cuidado mejor de ti —DongHae sollozo — te extrañaremos siempre —

— Siempre lo haremos —Dijo HyukJae con un nudo en la garganta — siempre...—

Ambos soltaron la lámpara que salió volando hacia el cielo, DongHae llevo su mano a sus labios y tiro un beso con las lágrimas bajando por sus mejillas. Sintió los brazos de HyukJae rodear su cuerpo, escondió su rostro en su pecho.

— Gracias...—Murmuro el menor después de unos minutos aún abrazados.

— ¿Por qué? —

— Por esto...fue un lindo detalle —DongHae se separó — me siento mucho mejor ahora...—

— Sí, yo también —HyukJae aparto un mecho de su cabello de su rostro — ¿quieres regresar ya? —

DongHae negó con la cabeza.

— Quedémonos un rato más —Miro a la pequeña luz que se hacía cada vez más lejana.

— Está bien —

— Oye —HyukJae lo miro expectante, el grisáceo sintió sus mejillas calentarse ante las palabras que iban a salir de sus labios — abrázame... —El mayor lo miro confuso.

— ¿Q-qué? —

— Que me abraces antes de que me arrepienta —Dijo el menor mirando a otro lado, cuando estaba por rendirse y decirle que era una broma solamente sintió como sus brazos rodeaban su cintura una vez más.

Sintió la respiración de HyukJae en su oído, y como su corazón martillaba contra su pecho.

Te amo, DongHae —Le escucho decir suavemente antes de que tomara su rostro y uniera sus labios. 

¡Estamos Casados! (EunHae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora