¡Estamos Casados! (EunHae)

Capitulo 22

— Ya cara de simio ¿¡qué parte de no quiero no entendiste!? ¡Suéltame! —DongHae trataba de soltarse — ¡He dicho que me sueltes! —.

— Sigue caminando, niñato —Le dijo tomándolo con más fuerza.

— Ya...me estás lastimando —El grisáceo se sorprendió cuando se detuvo y aflojó el agarre.

— Vamos DongHae —

— ¿Para qué? —Aprovecho el momento y se soltó — no pienso ir contigo a ningún lado —

— No me importa, niño —HyukJae trato de tomarlo de nuevo más sin embargo Hae se lo impidió.

— ¡Que no iré contigo! —Le grito — ¡ya déjame en paz! —

— Deja de alzar la voz —HyukJae le gruño — si no vienes conmigo ¿qué piensas hacer, eh? —Le pregunto — ¿ir con el bastardo de tu padre? —

— Es mucho mejor que estar contigo —Respondió — además él me ayudará a terminar mis estudios y me dará lo que necesite hasta que...hasta que mi bebé nazca —

— Nuestro —Recalcó el mayor — porque por si se te olvida también es mi hijo —

— Mira HyukJae —Suspiró tratando de no alterarse —...solo déjame en paz, no quiero verte, no quiero tenerte cerca...no quiero que estés en nuestras vidas —

— Tú no vas a prohibirme nada —HyukJae se acerco y tomo sus hombros —, no me conoces niñato, no sabes de lo que soy capaz —

— ¿Me estás...amenazando? —

— Te estoy advirtiendo —Respondió —...ahora se obediente y camina, DongHae —

— No quiero —Dijo necio.

— Me estás hartando —

— ¿¡Y qué harás, eh!? —Le pregunto gritando — ¿¡golpearme!? —DongHae suspiro, llevando su mano a su abdomen debido al dolor que sentía.

— O-oye —HyukJae se acerco — ¿te encuentras bien? —

— Que te importa —DongHae le respondió —, déjame tranquilo...—Susurro.

El pelinegro puso los ojos en blanco, un grito salio de los labios de DongHae cuándo lo cargo en brazos.

— ¿Qué crees que haces, gorila maleducado? —

— Calla y tranquilizate —Le dijo con seriedad, lo subió al auto.

Sus rostros quedaron cerca, sus respiraciones de entremezclaron. DongHae sentía como su corazón latía desembocado dentro de su pecho.

"¿Él podrá escuchar mis latidos?"

— ¿Qué te sucede? —HyukJae lo saco de sus pensamientos — ¿acaso quieres que te bese? —Pregunto con diversión.

— C-claro que no —Chillo sonrojado empujándolo y cerrando la puerta —imbécil...—Gruño.

***•••***

Hyoyeon se cruzo de brazos con el ceño fruncido.

— ¿¡Por qué lo has traído aquí!? —Pregunto claramente enojada.

— Porque no tiene a donde ir —HyukJae se quito la chaqueta — además no puedo dejarlo solo...—

— ¿Y no pensaste en primero decirme? ¡Soy tu novia! —

DongHae sintió una leve punzada en su pecho que decidió ignorar.

— Yo mejor me voy —Hablo llamando la atención de la pareja — te dije que no era una buena idea —

— ¡Claro que no lo es! —Hyoyeon dijo — ¡es una pésima idea! —

— Ya entendí, rubia oxigenada —Dijo Hae con dureza — no tienes porque gritar que no estoy sordo —

— Entonces lárgate de mi casa —

— Con mucho gusto —El grisáceo se dio vuelta y camino a la puerta, sin embargo HyukJae lo detuvo.

— No irás a ningún lado —Le dijo.

— HyukJae —Se quejo Hyo — si no se va él...me iré yo —Le dijo altanera.

— Hyo...por favor, vamos a hablar ¿si? —HyukJae tomo su mano.

El grisáceo aparto la mirada. ¿Que demonios hacía ahí? Era obvio que sólo era un estorbo.

— Chimpancé deforme —Le llamó —...tranquiliza a tu rubiecita oxigenada —

— Mi nombre es Hyoyeon —

— No te lo pregunte —DongHae le sonrió — quiero dormir —Informó el menor.

— Te llevaré a tu habitación —HyukJae le dijo — luego tú y yo hablaremos —Agrego mirando a la rubia

DongHae paso al lado de Hyoyeon, y le sonrió cínico. Siguió al pelinegro hasta una habitación.

— Mi habitación es la de al final —Le informo — descansa...y si piensas escapar de una vez te informó que le he dicho al portero que no te deje salir —

— ¿Qué? ¿¡Acaso piensas mantenerme encerrado como un prisionero!? —

— Si es necesario, si...pero no volverás a esa casa —Cerro la puerta dejándolo con la palabra en la boca.

— ¡Maldito idiota! —Grito Hae histérico.

Por otro lado Hyoyeon se encontraba cruzada de brazos.

— Por favor amor —HyukJae tomo su barbilla — sólo será por un tiempo...—

— ¿Te has vuelto loco? ¿¡Como pudiste traerlo aquí!? ¡Soy tu mujer, HyukJae! ¿¡Y pretendes que viva con ese...chiquillo!? —

— Hyo...él está embarazado —Comento Hyuk —, sólo...sólo hasta que nazca el bebé...y luego seremos sólos tú y yo de nuevo —

— ¿Lo prometes? —Pregunto con un puchero en sus labios.

— Te lo prometo —HyukJae se acerco y beso sus labios.

— Te amo, Hyuk —Le dijo ella con una sonrisa — y porque te amo...voy a tratar de convivir con él —

— Gracias Hyo —Le sonrió. — eres la mejor...—

— Lo sé —Rio y volvió a besar los abultados labios del pelinegro — te amo...—

— Yo también, Hyo —Respondió y la abrazo — yo también...—