¡Estamos Casados! (EunHae)

Capitulo 27

DongHae suspiro, y entró a la gran casa. Toco la puerta y espero hasta que uno de los empleados le abrió.

— Joven DongHae —Dijo con sorpresa.

— Buenas tardes —Trato de sonreír — ¿se encuentra la señora en casa? —.

— Si, si...joven pero pase —Dijo la anciana — ¿quiere un vaso con agua? ¿Jugo? —Pregunto — la señora me contó acerca de su embarazo, felicidades...—

— ¿Nunca para de hablar? —DongHae le preguntó secamente — quiero ver a la señora, vaya por ella...—

— O-oh si...dis-disculpe —La señora hizo una reverencia y fue en busca de la señora Lee.

Unos pasos apresurados se escucharon desde arriba. DongHae miro a su madre bajar las escaleras y llegar a abrazarlo.

— Hijo mio —Dijo con una sonrisa separándose y mirando su pálido rostro, y las orejas bajo sus ojos. — pero mira...¿has enfermado? —Le preguntó preocupada — vamos al jardín...—

DongHae asintió y siguió a su madre hasta el jardín. Tomaron asiento.

— Oh se me olvidaba por completo —Dijo ella levantándose — espera aquí...ya regreso —

Hanna se levantó antes de que Hae pudiera hablar. Unos minutos después llego con una caja en sus manos y se la entregó a su hijo.

— ¿Qué es esto? —

— Es un obsequio —Respondio con una dulce sonrisa — para mi nieto —

DongHae apretó la cajita entre sus manos, y sus ojos se cristalizaron. Hanna borro su sonrisa.

— M-mamá...—

— ¿Qué sucede, cielo? —Pregunto preocupada.

El grisáceo negó con la cabeza.

— N-no voy...n-no voy a tener al bebé, mamá —Respondió con un nudo en la garganta — y-yo...perdí a mi hijo —

Hanna se levanto y se acerco al menor abrazándolo. DongHae se quebró una vez más, y la rodeo con sus brazos.

— Mi niño —Susurro besando sus cabellos — cuánto lo siento, mi amor...—

— Es tan doloroso, mamá —Sollozo —...siento tanto dolor dentro de mi —

— Cariño...—

— Esto...esto me está destrozando poco a poco —Le dijo —...mamá ya no tengo fuerzas...mi única razón para vivir...la única luz que tenia se ha ido para siempre...me quiero morir —

— No, no digas eso —Hanna tomo su rostro y limpio sus lágrimas —...es difícil cariño...se que debe de ser difícil pero...—

— No lo sabes —La aparto poniéndose de pie — nadie nunca va a poder saber como me siento —Se dio la vuelta, saliendo corriendo.

— ¡Hae! ¡DongHae! —Grito Hanna.

***•••***

La lluvia caía, el frío calaba en sus huesos mientras caminaba por el puente del río Han. Sus lágrimas se entremezclaban con las gotas de lluvia. Se detuvo y miro al cielo.

— ¿¡Por qué yo!? —Grito con todo el dolor de su alma — ¿¡que hice tan mal para merecer este castigo, EH!? ¡AHHHH! —Cayo de rodillas golpeando con fuerza el pavimento. — ¿¡por qué!? ¿¡Por qué me arrebataste a mi rayito de luz!? —Lloro más fuerte —¿Por qué...? —Pregunto débilmente.

— ¿¡DongHae!? —Escuchó unos pasos acercándose a él — ¡DongHae! —El mencionado levantó en rostro encontrándose con HyukJae. — ¿que haces bajo la lluvia? Te puedes enfermar...ven...—

— No —Se negó — quiero estar solo, quiero...quiero ir con mi hijo —Sollozo.

— DongHae —HyukJae sintió un nudo en su garganta — por favor...vamos —

— ¡Tú...tú eres el culpable de mi desgracia! —DongHae golpeo su pecho — ¡tú me arrebataste a mi rayito de sol! ¡Tú y solo tú me has destruido hasta no querer vivir más! —

— Hae...chiquito —

— ¡Tú...! —Sollozo golpeándolo débilmente.

HyukJae lo tomo en brazos, escuchó los sollozos del menor en su cuello. Llegó hasta el auto y lo sentó en el asiento del copiloto

El camino hacia el departamento fue silencio, el grisáceo tenía la mirada perdida en la ventana, y cerro los ojos quedándose dormido.

Al llegar al departamento, y después de haberle puesto ropa seca, HyukJae arropo al menor y se sentó en la silla junto a la cama.

Un suspiro salio de sus labios.

DongHae tenia razón, él era el culpable de la muerte de su hijo. Él había asesinado a su propio hijo.

Bajo la mirada apretando sus manos fuertemente. Un sollozo escapo de sus labios.

— L-lo siento tanto —Se arrodillo junto a la cama del menor tomando su mano —...siento mucho que estés sufriendo debido a mi actitud —Nego con la cabeza —, actúe tan mal contigo y...nuestro hijo pago las consecuencias, soy un monstruo —

"Prometo que voy a cambiar...prometo que tratare de enmendar todo el daño que te he hecho...te lo prometo, chiquito"