UNIÓN VN

Dudas

El restaurante "Vita Nouva"  está ubicado en el centro histórico de la Ciudad de México, lleva abierto desde hace más de 45 años y siempre ha sido famoso por  la atención brindada y la comida exquisita, pero lo que más ha llamado la atención de este lugar es la leyenda que hay detrás de toda la fachada, se cuenta que antes de su construcción, había otro edificio que servía para prácticas satánicas en donde realizaban rituales de todo tipo, a su demolición encontraron más de 700 cadáveres en huesos, con diversos instrumentos de tortura, además de que encontraron ciertas cartas en donde se mencionaban la forma de tortura hacia sus víctimas y que tipo de rituales hacían, pero nunca se descubrió a quien iban dirigidos, se dice que el lugar estaba "maldito"  hasta que los señores Guzmán compraron el terreno, llamaron a un padre para  bendecir el lugar y así poder construir su restaurante.

Bastante curiosa su historia ¿no?

Estaba nervioso, no era sano pensar demasiado en estas cosas que no me llevan a nada bueno.

Todas esas historias de Brujería, rituales satánicos, mafiosos, eran sólo para entretener a la gente que no tenía nada que hacer, y yo no era de ese tipo de personas, tenía un trabajo que amaba y en eso debía concentrarme, además de la incógnita que ocupaba mi cabeza desde hace más de tres meses y que me tenía obsesionado aunque solo había hablado una vez con ella, el misterio llamado Ginna.

—Señor llegamos — me dijo el taxista, interrumpiendo mis pensamientos -otra vez- lo venía haciendo  desde que me subí, tratando de hacerme la plática.

—Cierto, ¿Cuánto le debo? — le pregunté, bajandome del auto y sacando la cartera.

—$50 señor.

—Gracias— dije dándole el dinero y cerrando la puerta.

"Vita Nouva" tenía un aire bohemio, pero a la vez con un toque Italiano, las paredes eran de un color beige con imitaciones de pinturas de diversos artistas como: Botticelli, Leonardo da Vinci, Vincent van Gogh, Frida Kahlo, entre otros, el que más me gustaba era el de: El nacimiento de Venus del pintor Sandro Botticelli, porque estaba justo detrás de Ginna el día que la ví por primera vez.
Un poco irónico ¿no?

Cuando entre lo primero que hice fue dirigir mi atención hacia esa obra ya que era el lugar preferido de Ginna, para sentarse, pero no había nadie sentado y eso me preocupo.
¿Acaso ya no quería saber nada de mi?
¿Querrá evitarme?
Joder, desde que la conozco mi vida se basa en cuestionar todo lo que hago.

Como tenía mucha hambre, porque sólo había ingerido unas galletas asquerosas, decidí sentarme en la mesa de Ginna, y esperar un milagro para que ella apareciera.

—Buenas tardes, ¿Qué va a ordenar? — me pregunto una mesera, que ya me era conocida (además ya venía a este lugar desde hacía más de tres meses) y que por lo visto ya también me conocía.


—Lo de siempre, por favor

—Claro, en un momento se lo traigo —y se fue con una enorme sonrisa en la cara.

Ya tenía más de quince minutos en este lugar y Ginna no aparecía, me estaba poniendo muy ansioso por dos cosas:
°Ginna me frustraba al no aparecer
°No traían mi maldita comida, y eso me ponía de muy mal humor.

Lo único que lograba tranquilizar mis nervios era contemplar esa obra majestuosa, que me recordaba a ella...

—¿Tú? ¿Por aquí? —me pregunto Ginna apareciendo de la nada y me vio con una cara de confusión total.

—Sabes —le dije en tono sombrío — Es muy irónica esa obra de arte al menos para mi, "El nacimiento de Venus" ¿la conoces? Es del pintor Sandro Botticelli, muy buena ¿no?, ¿sabes su significado o lo que representa? — hice un gesto de la mano para señalar la pintura —¿no? —ella sólo me miraba y  su cara sólo reflejaba confusión.

—Este cuadro en su tiempo fue una obra revolucionaria, porque representaba lo que era un desnudo no justificado por ningún componente religioso, lo que suponía la aceptación del nuevo humanismo renacentista alejado del oscurantismo medieval.

» Se dice que su significado, está relacionado con el neoplatonismo y la formulación por Marsilio Ficino de un concepto idealizado del amor donde la figura de Venus se desdobla en dos versiones que se complementan entre sí: la Venus celeste y la Venus terrenal que simbolizan el amor espiritual y el amor material.
» Está obra estaba dedicada a glosar el amor imposible que profesaba el noble Giuliano de Médici por la bella y virtuosa Simonetta  Vespucci quien fue la modelo para la pintura de Venus.
»Esta obra y su singular significado, me recuerdan a nosotros, al amor platónico que yo te profeso y que al parecer tú no notas y te alejas diciendo que eres "peligrosa" — hago un gesto con los dedos simulando unas comillas, la miro a los ojos y me pierdo en su profundidad.

—¿Nosotros? —replica con sarcasmo — Nunca a habido un nosotros, no somos nada, sólo hemos hablado una sola vez y el hecho de que desde hace tres meses vengas a este lugar con el fin de verme no te da ningún derecho sobre mi, ni a que me reclames algo ¿ok? —concluyo se veía molesta, pero me inspiraba tanta ternura y gracia a la vez que lo único que hice fue reírme a carcajadas.

—¿Qué? ¿Por qué carajos te ríes?  —dijo dándome un manotazo, que me hizo reír aún más, pare en seco cuando se empezó a alejar caminando, no podía dejarla marchar, no está vez, así que la tome de la muñeca y la atraje hacia mi.

—No te vayas, no te alejes de mí — le suplique su rostro estaba tan cerca del mío que si  me movía un poco nuestros labios se unirían, estaba nerviosa, lo notaba por como mordía su labio inferior, por como se le acelero la respiración cuando pase el dorso de mi mano por su mejilla y está se sonrojó, eso me hizo sonreír de forma arrogante, me gustaba el poder que ejercía sobre una mujer con tan solo tocarla, cuando ella me volteo a ver, se apartó bruscamente de mi y se sentó en nuestra mesa, eclipsando el momento mágico.

—¿Qué es lo que quieres de mí?

—Yo quiero todo de ti.

—Y para ti ¿Qué es todo?

—Conocerte, saber cada detalle por más insignificante que parezca, quiero tus sonrisas, quiero esos labios que me muero por probar, quiero desnudar tu alma, ver a través de tus ojos, saber que piensas, que es lo que te gusta, que es lo que odias, TODO,absolutamente todo de ti.

—Y si ¿yo no quiero?

—Te puedo convencer —le Sonreí de forma pícara

— ¿Si? ¿Cómo? — pregunto molesta

—Tengo... Ciertos métodos, que te harán decirme si a todo lo que yo diga.

—No, eso si no lo creo posible

—¿Qué significan las siglas de tu cadenita? —pregunte, cambiando de tema abruptamente por uno mas relevante.

—Acaso ¿No es obvio? —me dijo volteando los ojos.

—Al menos para mi no

—¿Cómo se llama este restaurante? —pregunto como si le estuviera preguntando a un niño pequeño.

—Vita Nouva.... —puse una cara de alivio total por al fin comprenderlo y saber que ella no pertenece a esas cosas horribles de la Unión VN, sino que significan Vita Nouva espera un momento...

—¿Trabajas aquí? —no pude evitar preguntar

—No

—¿Entonces...?

—Soy la hija de los dueños, me gusta venir aquí porque me relaja y además me encantan las obras, yo las escogí, me producen una sensación de paz. Y la cadena fue un regalo de mamá, siempre la traigo conmigo, ¿contento?

—Mucho —le ofrecí una sonrisa de disculpa.

—Quiero conocerte, ¿amigos? —le pregunté muy nervioso.

—¿Por qué debería ser tú amiga?

—Por que quiero conocerte, ya te lo dije, además si no quisieras tener ningún tipo de relación conmigo no estarías aquí sentada y no te sonrojarías como lo haces cuando te miro a los ojos.

—Eso no es cierto —dijo volteando los ojos.

—Bien, ya dejemos el tema por ahora.

—Bien.

No podía creer que al fin supiera que significado tenían esas siglas, me había hecho un lío total en la cabeza creyendo miles de cosas que no tenían razón de ser, y que sólo justificaban mi paranoia.

Al fin iba a conocerla, a saber de ella, a estar con ella.

No podía dejar de mirarla a los ojos, eran tan jodidamente imperfecta y eso para mí la hacia la criatura mas perfecta del universo, ella una vez más se sonrojo con mi escrutinio y desvío su mirada hacia la obra de Botticelli. Esperaba no correr la misma suerte que Giuliano de Médici, por su gran amor Simonetta Vespucci, nunca la dejaré ir, no quiero ni pensar que sea de otro, no lo puedo permitir, pero por ahora no puedo ejercer ningún control sobre ella, eso haría que ella desconfiará aún más de mi y no quería eso, tendría que ir despacio, empezando por conocerla ser un caballero en toda regla, ser todo lo que una mujer espera de un hombre, y para eso tenía que: uno dejar de acosarla como lo hago, ya que ella me conoce le pediré que nos veamos fuera de esta restaurante, para conocernos mejor. Dos: dejar de mirarla como lo estoy haciendo justamente ahora, joder, que parezco un puto psicópata, pero también se debe reflejar mi adoración hacia ella, la forma en que su presencia me hipnotiza, está mujer me está volviendo loco, jodidamente loco, pero esta locura me fascina.

Simplemente no puedo. No puedo dejarla ir, sería como un suicidio a mi propia locura.

Volteo la mirada a la comida que tengo en la mesa y que llegó justo después que Ginna, y me la como de una sola tajada, porque aunque ella está aquí, aún sigo teniendo un hambre feroz, y  mientras lo hago una pregunta se me viene a la cabeza, algo que he estado pasando por alto y sin pensarlo la formuló en voz alta...

—¿Tienes novio? ¿Estás comprometida? —ella sólo me voltea a ver y hace un gesto negativo con la cabeza.

—No, no tengo ningún tipo de relación con nadie, al menos sentimental no, ¿por? — pregunta y a mi me invade un enorme alivio, es como si  me quitara un gran peso de los hombros.

Aunque a decir verdad, nunca me lo había planteado, pero que se le puede hacer, la verdad es que tanta paranoia para nada, saber que las siglas VN significan Vita Nouva el nombre de este restaurante, me ha tranquilizado en gran medida, todo el estrés que pase fue injustificado, así que ahora puedo estar tranquilo y...

Empezaré con mi plan...

★★★★★★★★★★★★★★★

¡Holaaaaa!🧡
Gracias por leer mi historia 🖤
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Es mi primer obra, y mi sueño❤️
Los ama: Pamela✍️❤️