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Pov JiMin:

Cargando la pesada caja en mis brazos me dirigí al auto. Jin estaba en el maletero acomodando otro par de cajas, una mueca se formó en sus labios en el momento que cerró este y caminó para ahora abrir las puertas traseras del auto, donde también habíamos colocado cajas, aun así muchas quedaban fuera al ser este un auto tan pequeño.

— ¿Qué sucede? —cuestioné dejando la caja en el suelo junto a las demás— ¿Hay algún problema?

Mi pregunta era estúpida cuando claramente podía ver el problema, no podíamos meter más cajas en el auto, aquellas que estaban llenas de comida y productos de aseo personal, destinadas a un refugio con personas sin hogar, el lugar era bastante grande y habían muchas familias con niños, lo ideal era poder llevar todas las cajas pero no cabían en el auto y no podíamos regresar después por el resto ya que el lugar era bastante alejado y Jin debía asistir a una reunión más tarde.

— No podemos meter más cajas, tendremos que llevar solo estás —dijo Jin rendido, el tampoco lucía feliz con la idea— el próximo mes tenemos permitido ir otra vez, quizá allí les llevemos el resto

— Para el próximo mes no tendrán más comida, es un grupo grande, dudo que les alcance para un mes completo lo que llevamos ¿No hay otra manera? —cuestione pese a saber la respuesta, pero simplemente no podía imaginarme a esos pobres niños sin tener que comer— ¿Podemos conseguir otro auto?

— Aunque lo hagamos, no sabes conducir y es solo nuestro trabajo dejar esta comida —Jin soltó un pesado suspiro mirando sus perfectos zapatos recién lustrados, luego él alzó la mirada hacia mi— debemos conformarnos con-

Sus palabras quedaron en el aire cuando ambos saltamos aterrados por el sonido de las llantas de un vehículo rechinar contra el asfalto justo a nuestro lado, el sonido desagradable quemando en mis oídos, lo había escuchado en las películas de acción que Taehyung me obligaba a ver de vez en cuando, pero siempre creí que un auto realmente no podía hacer tal molesto ruido, hasta ahora.

Tanto Jin como yo llevamos la mirada al vehículo detenido justo detrás del de Jin, literalmente había quedado a centímetros de impactarlo, ahora dudaba de las habilidades de manejo del sujeto dueño de ese auto, dude mucho más al reconocer aquel deportivo color negro, por inercia di un paso atrás y estuve a punto de esconderme tras Jin, claro que no era una posibilidad, cuando era imposible que él no me haya visto y esconderme sería solo hacer el ridículo y darle razones para burlarse de mi. 

Cuando bajó del auto su sonrisa relució, su mirada no tardó nada en dirigirse a mi haciéndome sentir incomodo. Sus pasos eran firmes mientras se acercaba a mi, yo bajé la mirada, cuando se detuvo frente a mi solo podía ver sus zapatos, muy cerca, demasiado.

— Hola ángel —su voz fue baja como si me estuviera susurrando un secreto, uno que me puso los nervios de punta, este chico me ponía demasiado nervioso, también me irritaba y me hacía querer estar lo más lejos posible de él, como si su cercanía quemara, y lo hacía—  Creo que te llamé con el pensamiento    

Allí reaccione, levantando mi mirada lentamente hacia él, de sus zapatos negros, a su jeans rasgado en ambas rodillas, la izquierda tenía un agujera más grande dejándome ver más de la piel expuesta en su rodilla y parte del muslo, por Dios... ¿Pero qué estaba mirando?, subí mi mirada aún más, observe la camiseta negra fajada dentro del pantalón, sobre ella una camisa abierta a cuadros y sobre todo ello una chaqueta de cuero negra. Frunciendo el ceño eleve más mi vista, a su rostro, el piercing en su labio adornada la sonrisa arrogante que se cargaba y arqueo la ceja también adornada con un piercing en el momento que yo retrocedí un paso soltando el aire que no sabía había estado reteniendo en mis pulmones. 

LIBIDO《KOOKMIN》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora