LA TUA CANTANTE DE ARO VULTURI.

Twelve

Jafh se marcho rumbo a Rumanía, entre más pronto terminará con todo aquello del ejército más rápido podría irse junto a Adeline hacia Volterra, pues debía de darle la respuesta a Marcos Vulturi.

Adeline acababa de terminar una llamada con su jefe, el cuál le había dicho que estaba bien que renunciara, al final de todo ella era una buena empleada y que pasara por las cosas que tenia en la oficina, Adeline se alegro pues la verdad se lo había tomado muy bien su renuncia así que se dispuso a ir rumbo a Forks, pues allá estaba la oficina.
Al llegar el portero del lugar le abrió y muy feliz la saludo, ella pasó adelante y subió hasta su oficina, y empezó a empacar sus cosas, luego se marchó.

Por otro lado Carlisle sentía que lo que Adeline les había dicho era una mala broma, no se lo creía todavía, pensaba que talvez la chica había dicho eso para safárselo de una vez, pero el no lo haría, el insistiria hasta saber la verdad de todo aquel papelón.
Mientras que Isabella sentía que Adeline los había cambiado, a lo cual Edward le respondió que si en verdad ella era la pareja de Aro tenían que aceptarlo pues al final era su destino estar con él, y ellos no era nadie para separarlos.

Rosalie se sentía feliz pues Alice había tenido una visión sobre Adeline y la miraba casada y feliz junto a aquel vulturi, así que habían comprobado que aquello era cierto y para no cambiar el destino de la chica por alguna cosa que Carlisle pudiese a cometer le habían advertido a Edward que no le dijera nada al rubio.

Adeline regreso a su casa, muy pronto la pondrían a la venta, había estado muy feliz pues hablaba con Aro muy seguido, y este justamente estaba viajando rumbo a Port Angels a visitarla.

Tres Vulturi se encontraban en su avión privado, pues habían decidido volar en vez de viajar por tierra todo ese tiempo.
Aro sentía que moría de ganas por volver a ver a aquella mujer de pelo tan negro como la noche, iba acompañado junto a Alec y Jane, pues había decidido llevar a sus gemelos favoritos junto a él.
Muy pronto aterrizaria el vuelo en el aeropuerto de Port Angels, y en unos minutos estaría junto a su amada.

Adeline para matar todo el tiempo libre se puso a limpiar su casa, es cierto que casi no habían estado y el olor a polvo se empezó a sentir, así que tomó una escoba y un trapo para limpiar y se dirigió a la parte de arriba, empezando por el cuarto de su hermano, limpio el sofá, la televisión, la repisa llena de libros ordenó la mesita y en unos cinco minutos aquello estaba que relucia de limpio, luego limpio su habitación, la repisa llena de libros, su cama porque si ella tenía una cama, el sofá y la mesita, la televisión, limpio la habitación de huéspedes y la sala de estar.
Por suerte de la chica cada cuarto tenia su baño privado así que también los limpio, y bajo a la primer planta y se dedico a limpiar los muebles, la televisión y las mesas de centro las decoraciones y después su cocina y su comedor, en menos de 30 minutos todo aquello estaba muy limpio, con olor a fragancia de pino, tener limpio su hogar le causaba una gran satisfacción pues aquello le gustaba.
Camino rumbo a su habitación a darse un baño, saco ropa de su closet y se dispuso a ducharse.

Adeline Escucho algunas voces en la planta baja, para ser específicos en su sala y al bajar ya vestida se encontró con la sorpresa de que su Vulturi y dos chicos más de la guardia estaban en su sala de estar, preguntándose como funcionaba la televisión, a lo que la chica respondió que se encendía y daba canales y todo eso.

"Aro, me alegra que vinieras"

"Te lo prometí mía cara, te dije que vendría muy seguido a verte"

Adeline se sentía feliz en cierta forma pues sentía como se empezaba a sentir el lazo que los unía, y se preguntaba si Aro sentiría lo mismo.

Adeline les dio a los gemelos el cuarto de huéspedes el cual era grande, consisitia de su cama, un sofá cama las mesitas de noche, una pequeña mesa para tomar café  y algunas cosas más.
Ella se llevo a Aro a su habitación y le dijo al pelinegro que podía ordenar su ropa en el closet que había.
Así que Aro abrió y acomodo algunos trajes a la par de la ropa de la chica.
Ambos sentían que aquella acción les daba más confianza en la pequeña relación que se empezaba a formar.

Aro se sentó en la cama de la chica y viéndola a esos ojos carmesí comenzó a hablar.

"Espero no te haya molestado nuestra pequeña intromisión a tu casa, quería verte y decidí viajar y darte la sorpresa, espero me disculpes por irrumpir en tu acogedor hogar"

"No tienes que disculparte, lo único que no me explico fue como lograron entrar para que el guardia los dejara pasar"

"Ahh, para eso le dije que era tu familiar y que los gemelos eran tus primos y que quería darte una sorpresa y nos dejó pasar"

"Ya me imagino"

Aro vulturi se quedo por mucho tiempo observando a la chica, su figura, sus ojos y se dio cuenta que irremediablemente él estaba cayendo en los efectos del amor.
Y por amor se cometen locuras así que halo a la chica haciendo que esta cayese encima de el y la beso.
La beso como si el mundo en ello se fuera y al ser vampiros casi no necesitaban respirar (pos ya están muertos wee) aquel beso encendió aquella chispa que Adeline hacia mucho no sentía y por primera vez supo que ahí era donde ella quería estar por siempre, que Aro Vulturi era su lugar seguro.