Esperando (2020)

¡Wei Ying!

Fui al infierno, le enseñarle un par de cosas al diablo para después venir y escribir ésto. 

Me deje llevar, si alguien es tan sensible como para leer algo escrito por mí, entender y que les llegue al corazón, tengan cuidado.

¡Alerta de muertes!

No sé que tan bien me salió y no sé si da el  mismo impacto como lo escribo a como lo leo o lo veo en mí mente.

Espero que les gusté...

Gracias por leer..

(ㆁωㆁ) (ㆁωㆁ) (ㆁωㆁ) (ㆁωㆁ) (ㆁωㆁ)

No recuerda dónde fue que paso todo esto, su mente estaba confundida y se sentía algo mareado.

El dolor en su pecho era fuerte, ardía. No podía respirar.

Derepente sintió por primera vez el horrible sentimiento de sed eterna, algo que siempre llevaría con él desde ese momento.

- Yo, Wen ruohan, le doy poder a mí sangre dándoles al nuevo demonio, WEI WUXIAN!- Grito, la fuerte luz roja lo cegó. Después se despertó en el campo de batalla frente a todas las sectas.

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Ahora recordaba, esa matriz era parecía a la de aquel día. Un poco más grande y apestaba a sangre, sin duda no era nada bueno.

No podía mantenerse conciente con todos los dolores que expriman su cuerpo. Sus garras eran grandes y negras, sus dientes más filosos. Pudo sentir que algo crecía dolorosamente de su espalda. No soportaría mucho más sin tomar un poco de sangre. A qué llegaría Wen ruohan actual con esto?

Sus negras lágrimas manchaban su rostro y el suelo. Solo quería dormir, dormir como hizo esos últimos millones de años y no volver a despertar.

¿Que tan difícil era querer paz?

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Lan QiRen se fue satisfecho con la información al fin conseguida y aunque lo prometió jamás liberaría a su inmortal prisionero. Era algo hereditario tener conocimiento sobre él, no muchos tuvieron la oportunidad para hablarle ya que los ignoraba, y viendo que su hijo era un traidor no dudaría en casarlo y obtener verdaderos herederos, no como esos niños que no poseen su sangre.

Salió del pabellón y se dirigió al bosque sin temor alguno, el demonio sin importar que tan fuerte sea con su nombre lo puede frenar.
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Jin Ling lloraba del susto en el hombro de Lan Sizhui, quien junto a su hermano estaba en Shock. Ninguno le había prestado atención al mayor desde que esos hombres salieron.

Pudieron respirar mejor después de unos minutos, Jin Ling dejo de llorar pero estaba agarrado a su Lan como si su vida dependiera de ello y no hace mucho pudo morir.

Lan Jingyi fue el primero en levantar la cabeza, no avía digerido todo pero sabía que había algo más grande y tenían que actuar.

El alto y frío hombre seguí de pie frente a ellos, no se movía solo los veía atento.

- Quien eres?- Jin Ling vio a su amigo, como podia hacer una pregunta así después de tener una pistola en su cabeza amenazando su vida. Volvió a ocultar su cara en el pecho de su novio, quien le devolvió el abrazo.