Ya da igual

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Durante toda la grabación, la chica no se pudo concentrar, haciendo que tuvieran que quedara en ridículo, pero eso por otra parte, fue algo bueno, ya que hizo reír al público, y eso era la finalidad de ese trabajo, entonces, no importó demasiado. 

— Fubuki-san —dijo el peli-azul llamando la atención de la chica—. ¿Estás bien? Has estado muy distraída —comentó.

— Si, estoy bien, no es nada importante —tranquilizó la oji-amarillo, aunque era todo lo contrario.

La chica volvió sola al Master Course, ya que a diferencia de Tokiya, ella no tenía más trabajo. En un principio, no quería volver, de seguro iba a estar Jinguji y su ganas de saber si de verdad sus ojos no le engañaban. 

Una vez que llegó, no había nadie en el salón, la chica supone que todos tienen sus propios trabajos, se fue en dirección a su cuarto, pero cuando pasó por delante de la sala de practicas, una mano la arrastró para adentro. El chico que estaba, cerró la puerta con llave.

— Ahora ya no podrás escapar. Confirma lo que vi esta tarde —hablo el peli-naranja.

____ respiró profundamente—. ¿Enserio necesitas que te confirme algo que es tan obvio? No entiendo el por que quieres encontrar una rama de esperanza en el cual lo que viste era todo parte de tu imaginación. Entiéndelo, no todo las personas muestran como es en realidad, cuanto antes superes lo de Nanami, antes encontrarás la felicidad —contestó sin mucha piedad la peli-azul, a estas alturas, ya le da un poco igual, al fin y al cabo, el ya lo sabía, y esa duda solo le haría más daño—. Ahora si me permites irme —la chica se fue hacia la salida, iba a abrir la cerradura, pero Ren le detuvo.

— Espera —musitó—. Como puedo superar una traición —cuestionó el peli-naranjo con una aura de tristeza.

— No lo sé. Pero si necesitas consejos, puedes pedirse la a algunos de tus compañeros —respondió simple la chica.

— ¿Me estás diciendo que ellos también lo saben? —.

— Solo algunos —contestó y se fue de allí.

Se puso en marcha otra vez a su habitación. Cuando llegó, se encontró con Cecil, que estaba en la puerta esperándola.

— Hola Fubuki-san —saludó cortésmente el moreno.

— Hola —respondió con falta de energía en su voz—. ¿Necesitas algo? —preguntó al ver que el chico lo estaba esperando.

— Pues si —respondió con nerviosismo—. Me gustaría ser tu amigo —dijo rápidamente.

— Lo siento pero, no estoy interesada —el oji-verde se entristeció—. Pero si me interesaría saber el por que de esa idea —.

— Pues...es porque siento que te judgué  mal, siento que eres una persona amigable, y me gustaría ver ese lado tuyo, los chicos siempre dicen lo genial que eres, así que quiero ver ese lado tuyo —.

— Es decir, te sientes excluido, ¿verdad? —cuestionó con una sonrisa aburrida.

— No me refiero a eso -respondió nerviosamente—. Quiero decir qu- —.

— Si si, ya entendí, solo me estaba quedando contigo —al escuchar las palabras de la peli-azul, el moreno se tranquilizó, no quería dejar tal mal entendido—. Pero no pienso cambiar mi opinión, a estás alturas ya da igual lo que seamos —lo último lo dijo en voz baja, pensando que no la había escuchado, pero Cecil tenía un muy buen oído y lo logró escuchar, pero no entendió el significado de sus palabras, la chica entró a sus cuarto, y le cerró la puerta en la cara al moreno. Cecil se dirigió al salón deprimido por no haber conseguido lo que buscaba.

— Cecil-kun, ¿qué tal? ¿Te has echo amigo de ____-chan? —preguntó Natsuki.

— No, dijo que a estas alturas ya no importa lo que seamos, sabes lo que significa —.

— No sé, pero se lo preguntaré, y también la intentaré convencer para que se lo piense mejor lo de ser amigos —dijo decidido el rubio.

— ¿Enserio? Muchas gracias Natsuki —agradeció esperanzado el moreno, el oji-verde se fue en dirección de las habitaciones de las chicas.

— Eto...Cecil-kun —la peli-coral llamó la atención del príncipe—. Por qué te empeñas tanto en ser su amigo, si ella no lo quiere, déjala tranquila —comentó Haruka.

— Pero de verdad me gustaría llevarme bien con ella, he mismo un poco como es en realidad, y parece muy amigable —contestó con un puchero el moreno.

— Corderita, si esa es la decisión de Cesshi, deberíamos respetarla y apoyarla, ¿no deberías hacer lo mismo? —se metió Ren en la conversación.

— Yo solo quiero que Cecil-kun no salga lastimado —comento con preocupación la ojos raros - "dilo por ti" pensó el peli-naranja.

— No te preocupes Haruka, ellas es muy buena persona, seguro que si quisieras conocerla, te caería super bien —.

(Con Natsuki)

El rubio llegó a la habitación de la peli-azul, tocó la puerta, pero nadie contestó, estuvo así unos cuantos minutos más.

— ¿Natsuki? ¿Qué haces aquí? —preguntó la oji-amarillo.

— Vine a preguntarte algo, por cierto, ¿dónde estabas? —.

— Fui a darle unos papeles a Shinin, ¡qué es lo que me querías preguntar? —dijo la chica abriendo la puerta y dejando que el chico pasara.

— Antes Cecil me dijo que no querías ser su amiga, ¿Por qué? ¿Te cae mal? —preguntó el rubio.

— No es eso, pero ahora mismo, es importante que deje de hacer amigos —contestó con un tono triste.

— ¿Por qué? —la chica no quería seguir contestando a las preguntas de este, así que sin pensarlo mucho, le quitó las lentes.

— Hola Sat-chan —dijo con una alegría tristona.

— ¿A que viene esa tristeza? ¿Fue Nanami? Cuando la vea... —.

— No, no ha sido ella, pero me gustaría hablar contigo —.

— ¿Y de que quieres hablar? —preguntó dejando de lado su ira.

— Deberíamos decirle a Natsuki sobre la verdad de Nanami —el rubio se sorprendió ante su pregunta.

— ¡Claro que no! —exclamó Satsuki—. ¡¿Sabes el daño que le podría llegar a provocar?! —.

— Entonces, ¿cómo vamos mantener a Natsuki separado de Nanami? —preguntó sin verse afectada por la ira que desprendió Satsuki con la última pregunta.

— Eso no es ningún problema, con que tu estés cerca de él, todo estará bien —"ese es el problema" pensó ____.

(Horas después)

Todos los chicos estaban reunidos en el salón.

— Ranran, ¿tu que crees que es lo que va a decirnos Shinin? —.

— Y yo que sé, saber lo que piensa ese tipo es imposible —comentó fastidiado el peli-plateado.

— Veo que estáis todos —comentó Shinin apareciendo por la puerta como una persona normal y corriente, cosa que asustó a varios—. Miss Nanami, usted será temporalmente la compositora de Quartet Night, eso será hasta que encontremos una nueva compositora —.

¿Música como arma de venganza? (Utapri x Tu) (Cancelada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora