What if we make it real?

Capítulo 6

El rubio despierta temprano, se viste y va a prepararse el desayuno, escucha el sonido de su celular y piensa que es su novia, había estado llamando y mandando mensajes la noche anterior, toma su celular y tiene un mensaje de Walter, uno de Joel, otro de Clara y el más reciente de Chris.

Decide abrir el de Chris, solo era su respuesta a sus buenas noches, decide mandarle un mensaje de buenos días.

Abre el mensaje de Clara el cual le avisaba que tenían una entrevista mañana por la mañana, el siguiente fue el de Joel diciendo que era urgente que hablara con él, le contesta que si quería podía pasarse por su departamento en una hora.

Entra a la conversación con su mánager, diciéndole que el plan estaba resultando.

Termina de preparar su desayuno y justo cuando iba a empezar comer suena el timbre, se dirige hasta la puerta y se encuentra con el mexicano.

—Hey Zab, ¿qué tal?

—Hola Joel, pasa—el rubio se hace a un lado y el rizado entra al departamento.

—Necesito hablar con alguien—confiesa sentándose en una silla.

—¿Qué es lo que te pasa?—el puertorriqueño toma asiento y comienza a desayunar.

—Erick me llamó anoche, dijo que teníamos que hablar sobre lo que pasó— el rizado mira preocupado a Zabdiel.

—¿Te da miedo hablar con Erick?— se burla el rubio.

—No, solo no quiero que estemos raros— suspira.

—Ustedes ya están raros.

—Entonces no quiero que estemos más raros— el rizado sale de la cocina.

El rubio termina su desayuno y va hasta la sala donde Joel se encontraba  acostado en el sofá.

Se acerca y se coloca de rodillas a lado de él y nota como el rizado empieza a soltar pequeñas lágrimas.

—No quiero perderlo Zab, Erick es muy importante para mí.

—No vas a perderlo, estoy seguro que van a volver a estar como antes.

—No quiero volver a nuestra relación de antes quiero algo más con Erick—el rizado se sienta en el sofá y Zabdiel toma lugar a su lado.

El rubio no sabía que decir, Joel estaba ahí confesando su atracción/amor por el más pequeño de la banda, el rubio carraspea.

—Bueno, podes decirle eso, confensale lo que sentís por él.

—No puedo, voy a perderlo—menciona el rizado con frustración.

—¿Asi de fácil te vas a rendir?

—No me estoy rindiendo.

—Si, lo estás haciendo Joel.

—¿Que harías si estuvieras en mi lugar?

—No me gusta Erick, Jo—contesta divertido.

—Ya sé que no te gusta Erick pero ¿si fuera Chris?

El rubio se queda en silencio, nunca había visto a su mejor amigo con otros ojos.

El rizado observa la cara de confusión de su amigo y espera pacientemente su respuesta.

—En una situación hipotética, si me gustara Chris y hubiera pasado algo en el pasado con él, me arriesgaría.

El mexicano escucha atentamente al puertorriqueño y asiente, ya sabia lo que tenía que hacer pero antes tenía una ultima pregunta.