Holaaaa!! Ya se que tardo mucho en subir capítulos, pero la verdad, últimamente me pongo a escribir y no me sale nada así que solo os pido un poquito de paciencia!!! Muchas gracias a tod@s y comentar!!!!!!
Víctor era un chaval de 12 años. Yo creía que tendría menos, ya que echando cuentas, me di cuenta que mi hermana tuvo que tenerle con 16.
La verdad es que no se le veía muy hablador. Llevaba un pantalón vaquero que le quedaba grande, una camiseta grande y una gorra que le tapaba media cara. No había abierto la boca en ningún momento.
- Bien Víctor, ahora vamos a coger el metro ¿vale?- dije teniendo la esperanza de que si le hablaba lo suficiente me contestaría.- después iremos a casa. Hoy me han dado el día libre en el trabajo, así que podremos pasar algo de tiempo juntos. ¿que te parece?
Nada, como si estuviera hablando con la pared.
- He pensado que en unos meses empiezas el instituto, así que tendremos que mirar cual te gusta mas ¿no?.
Nada. Era imposible. Decidí esperar a llegar a casa para hablar con el, para que viera que intentaría por todos los medios que podía contar conmigo, que no estaba solo.
Así, en silencio llegamos a casa. Diana estaba esperando en el sofá, y cuando nos vio se levantó y fue hasta Víctor.
- hola guapo. Yo soy Diana, la compañera y amiga de tu tía Jess. Lo que necesites aquí me tienes.
Víctor por fin levantó la cabeza y se quedo mirando a Diana de una forma que no me gustó ni un pelo.
- ¿Y a mi que cojones me importa quien tu seas?¿crees que voy a estar aquí mucho tiempo y que vamos a jugar a ser la familia feliz? Menuda payasa....
Diana abrió los ojos mirándole, sin creerse lo que acababa de escuchar. Y yo tampoco.
- ¡Pero bueno mocoso! Quien te crees que...
- Víctor espera aquí mientras hablo con Diana ¿vale?- interrumpí.
Cogí a Diana del brazo y me la lleve a la cocina.
- Mira Jess, se que esto no va a ser fácil, pero no podemos consentir ciertas cosas y lo sabes.
- Si ya lo se. Solo te pido que hoy le levantemos un poco la mano ¿vale? Es su primer día aquí, y no sabe que vamos a hacer con el.
- Vale esta bien lo siento.- suspiro Diana
- Venga, vamos a tranquilizarnos y a poner nuestra mejor sonrisa ¿vale?
-Vale...
Salimos al salón las dos juntas, con cara de susto y una sonrisa forzada, como si en vez de un niño nos esperase un león.
Me sentí patética. Era solo un niño, mi sobrino. Así que decidí echarle valor.
- Bueno Víctor, te enseñare tu habitación ¿vale? Ven por aquí.
Víctor me siguió, callado, pero con el ceño fruncido, eso si.
Abrí la puerta de lo que era mi habitación y le deje pasar.
- ¿puedes dejarme solo, por favor?- dijo muy bajito.
- Eh...claro. Cualquier cosa que necesites me tienes a mi o a Diana aquí fuera ¿vale?
-¡Jess!- grito Diana desde el salón.
Suspirando cerré la puerta y fui.
- Dime.
- uff...creo que me e torcido el tobillo...- dijo con cara de dolor.
-¿Que? A ver deja me que te lo mire.
La quite con cuidado la deportiva y el calcetín y....joder si que que se lo había torcido.
- Pero ¿como te lo as torcido?
- ¡Ay! Buff...se me ha caído un poco de agua al suelo y sin darme cuenta lo e pisado y me e resbalado. ¿Puedes ir a por vendas? Aquí en casa no hay ya e mirado.
- Eh...si claro, pero te dejo a cargo de Víctor. Ten cuidado ¿vale?
- Si tranquila...no creo que me asesine.
- Tonta....
Me levante coji las llaves y el monedero y salí de casa. No me gustaba como se le estaba hinchando el tobillo, así que me di prisa.
Eche a correr calle abajo. La farmacia estaba cerca, solo me quedaba doblar la esquina y.....
-¡Ay! Me cago en....
- Pero bueno que manera es esa de ir por la calle señorita.
Me dolía la pantorrilla a horrores. Hay estaba despatarrada en el suelo, frotándome el culo...joder como me dolía...
- ¡¿No puede mirar por donde va?!Me cago en...
Me fije en el espécimen que se empezaba a levantar y..o dios...
Era un hombre de unos treinta y pocos, fuerte, alto, de piel algo morena, seguramente de a ver estado en la playa, unos desconcertantes ojos grises y un traje que tenia pinta de caro.
Se me quedo mirando con un adorable ceño fruncido.
- ¿No va a pedirme perdón, señorita?
De adorable nada.
- ¿ Y usted ami?- refunfuñe.
- Perdone pero era usted la que iba como una loca, sin mirar por donde iba. Y levante se ya del suelo. Nos esta mirando todo el mundo.
Me quede con la boca colgando, alucinada de que el imbécil este me hablara así. Se notaba que no me conocía.
Me levante del suelo lentamente, haciendo una mueca de dolor, cuando el desconocido me paso el brazo por debajo de las piernas y sin esfuerzo me cogió.
-¿Pero que haces puto loco? ¡Sueltame!
- Mira no me gusta el golpe que te as dado así que te llevare al medico para que te vea.
- ¿Que dices? Mira tengo prisa, así que no tengo tiempo de discutir contigo. Suelta me.
El hombre no parecía muy convencido pero la bajo al suelo, mirando para comprobar que estaba bien.
- Ala, hasta luego.- dijo Jess. No tenia tiempo de discutir con ese hombre. Quería llegar cuanto antes a casa.
Dejo al hombre con la palabra en la boca y sin mas echo a andar lo mas deprisa posible a la farmacia.
Compro las vendas y medio corriendo llego a su portal y entro, sin darse cuenta de que alguien la vigilaba.
Hola a todos y a todas!! Siento no aver actualizado antes, no tengo excusa, pero ya estoy trabajando en el siguiente capítulo. Un abrazo enorme!!
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La media Luna.
RomanceEntonces lo vi. No pude evitar acercarme, estirar mi mano, y rozar con mis dedos esa media luna, tan fría y hermosa. Nunca podemos imaginar las consecuencias de nuestros pequeños actos. Y pensándolo bien, aún sabiendo todo lo que iba a pasar, hubier...