BOE | COMPLETA ✔️

Capítulo 23

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※ LYN※

No te pongas histérica, no te pongas histérica...

<< Tarde >>

― ¿Por qué tarda tanto? ― Susurro.

Hace una hora que llegamos y Angros me pidió que me quedará en la sala de espera.

No fue algo que me molestara ya que tampoco tenía interés en ver a Betsy.

Se supone que tengo que venir a visitarla, pero no quería hacerlo todavía.

Aunque...

Está tardando tanto que la ansiedad me gana, poniéndome de pie y dirigiéndome hacia su habitación.

Me planto frente a la puerta, pensando en si debería tocar o simplemente entrar.

¿Qué me pasa? ¿Por qué estoy tan nerviosa?

Soy Jazzlyn Pemberton. Este comportamiento es inaudito viniendo de mí.

Abro sin tomarme el tiempo de tocar pero al hacerlo, las ganas de haber tocado me invaden.

<< No quería ver esto >>

Betsy en un mar de llantos sobre la cama y Angros abrazándola para que se tranquilice.

Toso, intentando llamar la atención de los dos.

Angros es el primero en apartarse mientras Betsy limpia sus lágrimas para verme mejor.

― Doctora Lyn ― ¿Sorprendida? Ya lo veo.

― ¿Cómo estás, Betsy? ― Me acerco a la cama, concentrando mi mirada únicamente en ella.

― Viva, por lo menos ― Señala la pierna que le falta, pero no volteo a ver. Da bastante impresión.

La conocí con ambas piernas y ver que le falté una no es algo fácil de asimilar. Y si para mí no lo es, no me imagino como será para ella.

― Lamento lo ocurrido ― Mis ojos se encuentran con los de Angros solo un segundo antes de apartarla, observándola únicamente a ella.

― No fue su culpa ― Niega, encogiéndose de hombros ― Estas cosas siempre pasan. La única diferencia es que está vez me toco a mí.

― De todas formas, si necesitas algo no dudes en hacérmelo saber ― Sonríe, mirando a Angros.

― No se preocupe. Estoy bien ― Sigue viéndolo con esa maldita cara de cría enamorada.

― Supe lo de tu prótesis y me alegra bastante. Puedes tomarte el tiempo que quieras y volver a la torre cuando te sientas lista ― Siento su mirada sobre mí, pero lo ignoro ― ¿Qué harás al salir del hospital? ― Vuelve a sonreír, mirando a Angros otra vez.

― Viviré con Angros.

<< Vaya. Que interesante dato >>

― ¿En serio? ― Interrogo, girando la cabeza hacia el idiota que luce preocupado al ver mi reacción.

Eso no me lo había contado.

― Si, es mientras me recupero ― No nota las miradas que hay entre ambos ― ¿Acaso no es el mejor? Nadie se había preocupado tanto por mí jamás.

Qué triste historia. No sé si reír o llorar.

― Por supuesto. Que bueno que te sientas acompañada ― Finjo una sonrisa ― Entonces, supongo que los dejaré a ambos... Solos ― Enfatizo en esa última palabra ― Recupérate pronto.